Conocimiento De Las Zonas De Desarrollo No Controladas

CONOCIMIENTO DE LAS ZONAS DE DESARROLLO NO CONTROLADAS

IDENTIFICACIÓN DE BARRIOS CONSOLIDADOS Y NO CONSOLIDADOS

DIAGNÓSTICO DE ÁREAS EN RIESGO

EXPLICACIÓN DE LAS ZONAS DE RIESGO A LAS COMUNIDADES DESDE EL PUNTO DE VISTA HOLÍSTICO

CONCLUSION

Claramente, hay una necesidad de educar a nuestros líderes organizacionales y a la población en general sobre los aspectos de preparación y mitigación. Tenemos que conocer cuáles son las necesidades de nuestra población y como ésta responderá ante un evento o fenómeno físico.

Los esfuerzos de mitigación implican altos costos a corto plazo. Sin embargo, a largo plazo suponen una reducción en los daños causados por desastres respecto a las pérdidas económicas, pero sobre todo, una reducción en la pérdida de vida humana. La mitigación es prevención. El gobierno y la población en general tienen que tomar un rol activo en la mitigación y preparación para desastres. Las agencies gubernamentales correspondientes tienen que asegurarse de que no sólo se establezcan códigos de construcción más estrictos sino que las compañías y los ciudadanos cumplan con los mismos; no tan sólo crear reglamentación que las organizaciones tienen que seguir en tiempos de crisis, sino también velar por que estas organizaciones cumplan con ellas; y no permitir la construcción de viviendas en zonas inundables, laderas inestables o montañas escarpadas, entre otras medidas.

Finalmente, debemos señalar que todo programa de mitigación y preparación para desastres, tanto de agencias gubernamentales como privadas, tiene que tomar en consideración la población, sus condiciones históricas, sociales, económicas y demográficas. El éxito de dichos programas se debe, en gran medida, a su capacidad para movilizar a la población en tiempos de desastres y que ésta responda de una forma "esperada" y "apropiada". Es importante recordar que, como señala Dynes, "si usted ignora a la 'gente' en su planificación, su planificación será ignorada.

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