Cuento: Contemos nuestra práctica

Cuento: Contemos nuestra práctica

Cierto día en clases de sexto semestre de Contaduría Pública, obtuvimos la oportunidad de conocer una motivación para transmitir nuestro conocimiento a personas que lo necesitaran y quisieran aprovechar de ello. Esa noche al escuchar las palabras de la profesora explicando el funcionamiento y el fin que tenía la práctica social, una de las integrantes del grupo construía en su mente un plan para poder ayudar a un grupo de madres que conocía con dificultades para poder ejercer un plan de negocio y llevarlo hasta el final de forma que pudieran generar ganancias , entonces se dio la oportunidad de conocer a los dos  compañeros que al contarles la idea quisieron apoyar y en esta gran travesía quisieron participar.

Hicimos un plan de trabajo fácil de superar, que fuera consistente, con grandes expectativas para que quedara en una realidad, plasmado en guías de aprendizaje y motivaciones para que estás madres pudieran luchar y así sus proyectos productivos pudieran realizar. Al pasar los días y al vernos frustrados porque nuestro plan original cada vez lo teníamos que cambiar, nos motivamos en conocer su trabajo y ayudarlas a organizar en un bazar que ya tenían visionado para poder trabajar, requisito que pedía la comunidad para que ellas pudieran estar en esta sociedad, pero antes de organizar sucedieron muchas cosas que queremos contar, por ejemplo dos de los participantes eran desconocidos para la fundación una presentación deberían realizar, sin embargo no fue fácil para ellos lograr llegar, dieron mil y una vueltas para poder llegar casi acaban con el combustible de su moto, la paciencia los agobiaba por la hora de llegada y al final se dieron cuenta que conocieron todo suba y al final es la primera travesía. Una vez llegamos a la fundación pudimos conocer el lugar y las personas encargadas, en ellos se genero una expectativa por lo que se les iba enseñar a las madres, habíamos elaborado un material llamativo de presentarnos evidenciando el compromiso y dedicación que les queríamos ofrecer.

Corriendo para un segundo encuentro que logramos agendar un fuerte aguacero nos hizo separar de la ruta a encontrar, dejando de visitar la fundación en esta oportunidad como equipo completo pero la tarea no se dejo de hacer y las encuestas en curso se pudieron ejecutar, lo que fue muy valiosa porque esa información nos permitió evidenciar que tanto conocimiento tenían las madres y que objetivo tenían frente a sus proyectos productivos, dándonos la oportunidad de reestructurar nuestro plan.  

En el tercer capítulo de esta historia entre sol y lluvia conocimos a las madres en un contexto acompañamiento y de reconocimiento para nosotros ejerciendo sus proyectos y de los cuales pudimos involucrarnos al ver su forma de actuar para así organizarnos gracias a esta actividad nos dábamos cuentas en tantas falencias en las que podíamos ayudar y en la gran labor que debíamos realizar, ya que no era fácil tener que enseñar que lo que se estaba aplicando no era tan viable para su rentabilidad, que habían costos que no consideraban y ellos debían traerlos a la realidad.

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