Las Nuevs Fronteras Del Capital

En la Cumbre de Johannesburgo es un tema importante, en particular como la de energía, el agua y la biodiversidad, y la implementación de estos, sobre todo para el financiamiento para el desarrollo.

Un grupo importante de delegados influyentes de América Latina, que han realizado debates y negociaciones de la biodiversidad. El compromiso de detener el ritmo actual de pérdida de la diversidad biológica, no se ha asumido mediante una meta cuantitativa concreta, se ha obtenido acuerdo valioso en el delicado tema de la distribución de beneficios.

Dentro del marco del Convenio sobre la Diversidad Biológica, se ha creado un régimen internacional para promover y salvaguardar la distribución justa y equitativa de los beneficios de los recursos genéticos. Las implicaciones que comprende a los países latinoamericanos si son mega diversos o no, se tiene en cuenta que en su conjunto esta es la región más biodiverso de la región.

Para el desarrollo de nuevas fuentes de energías renovables, no ha tenido éxito en esta década de alcanzar un 10% para la producción de energías renovables como tenia propuesta la Iniciativa Latinoamericana. Con las intensas negociaciones que ha tenido el plan, la invitación de los países a la promoción de fuentes renovables de energía, en función de metas concretas de cada país.

La importancia de la iniciativa planteada sirve como plataforma para avanzar los temas de interés en concreto de cada región. Temas como el agua, biodiversidad y energía son de vital importancia para una estrategia latinoamericana para el desarrollo sustentable que debe ser impulsada durante este siglo.

El mayor reto es convertir la realidad, esto exige la sensibilización de los tomadores de decisiones en todos los sectores e instancias de gobierno y la sociedad, requiere de una presión continua en la defensa de los intereses nacionales y regionales. El desafío no es solo del Estado sino también de la sociedad en general.

Para avanzar en la disminución de la pobreza, es necesario que se integren esfuerzos que involucren a tres materias para el desarrollo sustentable: económico, social y ambiental. En la macroeconomía per se no ha dado un resultado suficientemente efectivo para mejor la calidad de vida humana en los países en desarrollo.

Los países en desarrollo reclaman equidad en el comercio internacional, en la gobernabilidad global, en el acceso a información y tecnología, y en la distribución de beneficios derivados del uso de los recursos naturales, entre otros temas de gran importancia. La relevancia de estos principios, integralidad y equidad, se ilustra bien en temas como el comercio internacional –un instrumento- y la erradicación de la pobreza –una meta- para el desarrollo mundial.

El principal problema de centrarse en la liberalización del comercio es la concepción equivocada de que al levantar las barreras arancelarias automáticamente tendremos una mayor riqueza para todos. Lo que se debe es construir puentes entre el comercio y el medio ambiente, entre la inversión y el desarrollo y entre el financiamiento y la sustentabilidad.

Para erradicar la pobreza se requiere esfuerzos verdaderamente integrales que combinen herramientas económicas, sociales y ambientales. Que forme un elemento fundamental, el reparto equitativo de los beneficios obtenidos de los recursos naturales adecuadamente aprovechados.

La biodiversidad y el agua, son los dos recursos naturales importantes para erradicar la pobreza de forma integral y equitativa. América Latina una de las regiones más ricas con sus recursos naturales, ha sufrido una acelerada perdida de su biodiversidad (principalmente deforestación) y la preocupante degradación de fuentes y ecosistemas de regulación hídrica, pone en grave riesgo la capacidad para disminuir la pobreza.

Para tener acceso al agua, se han establecido compromisos con los países que incluyan en su plan de desarrollo, la creación de infraestructuras y servicios de abastecimiento de agua y saneamiento, toma de decisiones, prevención y protección para promover el aprovechamiento sustentable del recurso hídrico.

América Latina región del mundo con mayor abundancia de agua dulce, en la realidad el acceso al recurso está seriamente limitado para una porción importante de la población y la calidad del mismo es deficiente. Esto tiene una explicación lógica la desigual distribución geográfica de las fuentes hídricas, la contaminación, el deterioro de los ecosistemas que prestan los servicios ambientales, así como la falta de una conciencia pública y una política ambiental integral.

En la mayoría de los casos, existen reservas y fuentes de agua suficientemente accesibles. Sin embargo, se trata de una ineficiente gestión del agua y un insuficiente compromiso político de los gobiernos.

Es fundamental poner atención a la gestión de los ecosistemas, aguas arriba y aguas abajo. Las fuentes de agua y los ecosistemas prestan los servicios ambientales, almacenamiento, regulación y saneamiento hídrico debe ser de primordial importancia para un manejo integral. Donde se prioriza la conservación de humedales y bosques en las cuencas hidrográficas estratégicas.

El Plan de Johannesburgo reconoce la importancia de elaborar planes de gestión integrada de los recursos hídricos y de proteger los ecosistemas relevantes. También reconoce que la diversidad biológica es decisiva en la erradicación de la pobreza. Afortunadamente, no establece una clara visión en la gestión del agua y de la biodiversidad. Esta visión debería ser fundamentada a través de políticas y planes de acción a nivel de cada país

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