Zara Negocio Triple A

ZARA: EL NEGOCIO TRIPLE A

Inditex es una de las mayores compañías de distribución de moda en el mundo, vendiendo más de 26 mil millones de euros en el año 2018, a través de más de 7.000 tiendas en 96 mercados (Inditex, 2019), tomando como su principal bastión Zara, la primer marca de ropa del grupo creada por Amancio Ortega, un hombre que ha dedicado toda su vida al trabajo y al crecimiento de su compañía, que desde el primer momento tuvo claro el concepto de enfocar todos sus esfuerzos a satisfacer las necesidades del cliente, del consumidor final de sus productos. Lo anterior contrario al pensamiento tradicional de moda que se ha movido en tendencias que los diseñadores introducen en el mercado en dos temporadas por año, usualmente primavera-verano y otoño-invierno (Martinez, 2012, pág. 122), generando grandes inventarios y que el consumidor concurra con poca frecuencia a las tiendas de ropa, ya que no observa diseños nuevos para comprar. Esta metodología push, de empujar los diseños al mercado genera grandes riesgos de acumulación de existencias, si las colecciones no tuvieran éxito o por el contrario generar desabastecimiento a la mitad de temporada si es exitosa la misma.

El gran éxito de Zara destaca en percibir al cliente no solamente como el receptor de la mercancía sino en convertirlo en su fuente principal de información para determinar tendencias y generar diseños que concuerden con sus gustos. Este concepto se describe como “Moda Rápida” (Martinez, 2012) el cual buscar satisfacer al cliente a la misma velocidad en que las tendencias van sufriendo modificaciones. Para esto Inditex ha basado su política en la observación y el método pull, donde se fabrica en función de lo que pidan los clientes, teniendo la viva idea de que este es el que le dicta al diseñador lo que quiere ponerse y no al contrario.

Teniendo claro este concepto antes mencionado, ahora la gran pregunta es cómo consiguió Inditex en cabeza de Amancio Ortega satisfacer las necesidades y gustos de los clientes a la misma velocidad en que estos cambian, produciendo miles de unidades con los menores costes de distribución y con un precio asequible. Para dar respuesta a este interrogante vamos a analizar los principales aspectos en cada eslabón de la cadena de suministro que han generado que este concepto de negocio de Zara se pueda ejecutar a la perfección.

En primer lugar tenemos que decir que su estrategia está basada en la transparencia en sus actividades, colaboración y confianza con las partes implicadas y mejora de los procesos productivos. Adicional de la adquisición de tejidos y materia prima que se adapten a

cualquier tipo de diseño que puedan concebir los profesionales del desarrollo del producto (Lorenzo, Serra y Calzado, 2002), basado en la observación de las tendencias del mercado y los clientes. Para dar una rápida respuesta a estas necesidades, se parte de una colección fija denominada “basics”, prendas que no pasan de moda, que equivalen al 60% de la producción y “prendas oportunistas” que solo pueden estar quince días en las tiendas (Martinez, 2012, pág. 122), esto produce la atención en el público y genera una mayor demanda en el consumidor, esperando cada semana prendas nuevas.

Inditex se provee de forma directa de tejidos, el marcado y el corte, y el acabado final de las prendas, subcontratando la fase de confección con talleres externos permitiendo enfocarse en revisar solo el proceso realizado por estas fábricas sin tener en cuenta la calidad de las materias primas, ya que son ellos mismos los que las suministran. Adicional realiza a sus proveedores auditorias y exige el cumplimiento de los requerimientos del código de conducta, trabajo que supervisa en conjunto con ONG y la ETI (Martinez, 2012), esto para garantizar no solo la calidad de sus productos sino la calidad del trabajo ofrecido a los empleados de cada proveedor.

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