Dependencia emocional

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UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DEL PERÚ FACULTAD DE CIENCIAS HUMANAS CARRERA PROFESIONAL DE PSICOLOGÍA

PSICOLOGÍA EXPERIMENTAL

“Programa de intervención basado en autoestima para disminuir la dependencia emocional de estudiantes de la Universidad Tecnológica del Perú durante el año 2023”

Autores

Farfan Pineda, José Rubén U20219187

Gómez Espinoza, Jose Luis U19220697

Huamani Lope, Janira Erika U22224142    

Heredia Carta, Tania Mirian U22100920

Herrera Huayta, Eliana U22243985

Llumpo Huamani, Manuela Alejandra U22224949

 Muñoz La Rosa, Luciana U20246978

Mallcohuaccha Condori, Patricia U22104201

Valdivia Delgado, Alexandra U2220827 No participo

Docente

Israel Elias, Funes Huizacayna Arequipa, 17 de Julio del 2023

1.  CAPÍTULO I

1. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

El problema de la dependencia emocional surge principalmente de una combinación de factores psicológicos, sociales y emocionales. Puede tener sus raíces en experiencias tempranas de apego inseguro, falta de autoestima, patrones disfuncionales aprendidos en la infancia o en relaciones pasadas. Por ende, puede alimentarse de la necesidad de evitar la soledad y el miedo al rechazo, lo que lleva a una búsqueda constante de aprobación y atención de los demás. La dependencia emocional puede tener consecuencias negativas en la vida cotidiana y en las relaciones interpersonales, afectando la autonomía y la capacidad de establecer límites saludables.

Surge cuando una persona se vuelve excesivamente dependiente de otra para su bienestar emocional y su sentido de identidad. Este problema puede tener sus raíces en diversas causas, como experiencias traumáticas, carencias afectivas en la infancia o una baja autoestima. Ante esta necesidad surge la dependencia emocional, la cual se caracteriza por la necesidad constante de atención, aprobación y validación de la otra persona, y puede llevar a comportamientos obsesivos, posesivos y de control. Según De la Villa-Moral, Sirvent, Ovejero y Cuetos, (2018), quienes refieren que la dependencia emocional cursa con sentimientos negativos tales como la soledad, tristeza, abatimiento, desánimo, culpa, insatisfacción, miedo a la soledad, baja tolerancia a la frustración, el aburrimiento, así como de vacío emocional. Esta dinámica puede generar desequilibrios en las relaciones, ya que la persona dependiente suele descuidar su propio crecimiento personal y bienestar en función de satisfacer las necesidades de la otra persona. La dependencia emocional puede afectar tanto a hombres como a mujeres, y puede tener un impacto negativo.

A lo largo de las últimas décadas, la dependencia emocional ha experimentado cambios profundos en las estructuras familiares, el aumento de la tecnología y la influencia de las redes sociales, ante todo esto se ha observado un incremento en los casos de dependencia emocional. Las personas están cada vez más conectadas virtualmente, pero menos conectadas emocionalmente, lo que ha llevado a la búsqueda de validación y afecto en relaciones poco saludables. La falta de habilidades para manejar las emociones y establecer límites sanos también contribuye a este problema.

La dependencia emocional es un problema importante debido a sus impactos negativos en la calidad de vida y las relaciones personales. Es así que las personas dependientes emocionalmente tienden a buscar la validación y la felicidad en otros, lo que puede conducir a relaciones desequilibradas y tóxicas. Esta dependencia puede generar sentimientos de ansiedad, baja autoestima y falta de autonomía emocional. Además, puede limitar el crecimiento personal y la capacidad de tomar decisiones independientes. Abordar este problema es crucial para fomentar relaciones saludables, promover la autenticidad emocional y desarrollar la confianza en uno mismo.

Afecta negativamente a las personas al depender excesivamente de otras para su bienestar emocional. Esto puede generar una serie de consecuencias perjudiciales en la vida diaria. Las personas con dependencia emocional pueden experimentar baja autoestima, ansiedad y depresión cuando no tienen la atención o el afecto de los demás. También pueden tener dificultades para establecer límites saludables en las relaciones y tienden a sacrificar sus propias necesidades para satisfacer las de los demás. Por lo tanto, limitar la autonomía personal y las relaciones equilibradas y satisfactorias.

El grado de afectación más importante en el problema de la dependencia emocional radica en la pérdida de autonomía y autoestima de la persona afectada. La dependencia emocional impide que la persona pueda tomar decisiones y actuar de manera independiente, ya que su bienestar y felicidad están completamente ligados a la presencia y aprobación de otra persona. Esta falta de autonomía puede conducir a relaciones tóxicas y desequilibradas, donde la persona dependiente se somete a situaciones dañinas con tal de no perder la conexión emocional que cree necesitar.

El programa de intervención basado en la autoestima surge a modo de resolución de una problemática, el cual es la dependencia emocional, por la necesidad de promover el desarrollo saludable de la autoestima en las personas. Este enfoque terapéutico busca fortalecer la confianza, fomentando una imagen positiva de sí mismos. A través de técnicas y estrategias específicas, el programa aborda las creencias limitantes, promueve el autocuidado, el reconocimiento de logros, fomenta una actitud de respeto y aceptación hacia uno mismo.

Surge cuando se observa la necesidad de abordar los problemas relacionados con la baja autoestima en las personas como la dependencia emocional, Este enfoque terapéutico se basa en la idea de que una autoestima saludable es fundamental para el bienestar emocional y la interacción social positiva con los demás.

A lo largo de los años, se ha reconocido la importancia de la autoestima en el bienestar emocional y psicológico de las personas, se han desarrollado e implementado diversos enfoques y técnicas para fomentarla y fortalecerla. En sus inicios, este programa se centraba principalmente en abordar los problemas de baja autoestima y proporcionar estrategias para mejorarla. Con el tiempo, dicho programa se ha expandido y diversificado para diferentes poblaciones y contextos. Además, se han integrado nuevas metodologías y prácticas.

Es importante reducir la dependencia emocional en los jóvenes, ya que podrán desarrollar mayor confianza en sus habilidades y capacidades, lo que les va a permitir enfrentar desafíos y metas con una actitud segura, el programa les ayudará a cambiar la forma en la que se ven a sí mismos, fomentando una imagen más positiva y realista de su valía personal, cabe agregar que les ayudará a desarrollar habilidades para reemplazar la autocrítica destructiva con pensamientos más amables y compasivos , asimismo lograr que aumenten su capacidad de afrontamiento y de resolución.

El programa de intervención de autoestima tiene un impacto positivo en las personas con dependencia emocional al abordar las causas subyacentes y fortalecer la autoconfianza. Este enfoque terapéutico fomenta la resiliencia y la capacidad de hacer frente a los desafíos emocionales. El programa también puede contribuir a reducir la ansiedad, la depresión y otros trastornos relacionados con la autoestima baja. Al mejorar la autoestima, se pueden experimentar cambios en beneficio de la persona afligida, como, por ejemplo, desarrollar habilidades de comunicación, promoviendo relaciones más saludables y satisfactorias. El programa de intervención de autoestima generalmente incluye técnicas de terapia cognitivo- conductual, trabajo en la identificación y cambio de creencias negativas sobre uno mismo, promoción de habilidades de afrontamiento saludables y fomento de la aceptación y el amor propio. Así mismo, desarrollar la confianza en sus propias decisiones y a tomarlas de manera más autónoma, sin depender constantemente de la aprobación de los demás. También explorar y desarrollar su propia identidad, reconociendo sus valores, intereses y metas individuales. En general, el programa de intervención basado en la autoestima ofrece una base sólida para el crecimiento personal y el bienestar emocional. Es importante destacar que cada persona es única y los resultados de un programa de intervención pueden variar. Es recomendable buscar el apoyo de un profesional de la salud mental para recibir un enfoque personalizado y adecuado a las necesidades individuales.

El grado de afectación de un programa de intervención basado en la autoestima puede variar dependiendo de varios factores, como la efectividad del programa, la dedicación, el compromiso de los participantes y la gravedad de los problemas de autoestima que están experimentando. Es por ello que un programa de intervención basado en la autoestima bien diseñado y ejecutado puede tener un impacto significativo en la mejora de los participantes. Se espera que, asimismo, al mejorar su autoestima, podrán mejorar en el ámbito social como sus relaciones interpersonales, en las que podrán establecer límites saludables, comunicarse de manera efectiva y desarrollar relaciones más positivas y significativas.

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