Del Tener Al Ser - Erich Fromm

Del tener al ser - Erich Fromm

Comienza el autor por precisar que no es lo mismo querer vivir simple y sencillamente con el cómo querer vivir, esto cuando nos preguntamos las bases de la existencia humana. Así, da por sentado que si bien existimos es por dar satisfacción básicamente a nuestras necesidades, lo cual se resumiría en que estaríamos felices si se cumplen de diversas maneras nuestras demandas del qué queremos. Pero pone de manifiesto también que existen necesidades de las cuales no podemos dejar que nos hagan “feliz” en la vida ya que pueden ser dañinas para nuestro cuerpo, para los demás o para en sí la sociedad. Así que estos malestares que se pueden identificar son aspectos que nos hacen a intentar ser cosa que no somos, ya sea por el ambiente social, por el aspecto psíquico, etc. y depende en sí de nuestra liberación como seres humanos con la respuesta al cómo querer vivir, al buscar esas premisas que en nosotros están a la espera de salir y ponernos en un lugar que nos haga sentir un tanto satisfechos.

Esto claro no podemos realizarlo con solo la intervención social o productiva de nuestro mundo, ya que si bien esto es de buena ayuda para la existencia humana, no nos hacen liberarnos de nuestras afecciones, solo logran hacer que nos profundicemos más en ellas, me refiero aquí con el consumismo y principalmente la competencia limitada entre los seres humanos que nos destruye y nos hace ver solo en nosotros mismos de una manera enfermiza o patológica, si se le quiere llamar así.

Por demás está decir que esto antes mencionado lograse llegar por cuestiones casi propias del ser, pero la fuerte influencia del todo exterior llama aun más la atención. El autor menciona sobre lo caminos que se pueden llegar a tomar a conciencia del propio ser, para poder alcanzar la libertad deseada de ser el propio ser que uno quiere ser. Autoconciencia, cosa que propone para poder encaminar al sujeto en este viaje por el encuentro consigo mismo, aspecto que si bien podemos no tener y estamos conscientes de ello, solo hace falta algún factor que motive a poder llegar a tenerlo. ¿Cómo? Solo la persona en cuestión sabrá cuándo y cómo recurrir a esa autoconsciencia. Si bien después de que nos hemos dado cuenta de todos esto que nos gustaría o nos afecta o ambas, es momento de que lleguemos a poder averiguar de nosotros analizándonos uno mismo, de recuperar nuestro ser que alguna vez no estuvo en conflicto o por lo menos estuvo estabilizado por necesidades y fuerzas que no influían de manera determinante en uno como sujeto.

Podremos poner en práctica el arte del amor, arte por el cual se mueven centenares de pensamientos y sentires que nos ayudan a clarificar (a veces no) aspectos de los cuales no podemos darnos cuenta, haciendo de ello una valiosa herramienta con la cual podemos comenzar a analizarnos a nosotros mismos como sujeto en desequilibrio. En este aspecto mi parecer apunta a que el amor, así llamado por Fromm, es más bien la voluntad de realizar o hacer las cosas, de querer las cosas como uno quiere, de poder tener, valga la redundancia, la voluntad

...