HABLANDO DE DERECHO

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Desde el momento que nacemos, todas las personas estamos sujetas a la aplicación del derecho; ya que desde el mismo nacimiento pasamos a pertenecer a un país, lo cual nos otorga el dereho a la ciudadanía. Es por esto que todo individuo debería tener una noción mínima de lo que es el derecho.

Francesco Carnelutti en su obra “Cómo nace el derecho”, nos da a conocer sus orígenes y nos explica de manera muy sencilla las cosas propias del derecho. Para comenzar plantea como definición universalmente aceptada del derecho al “conjunto de leyes que regulan la conducta de los hombres”[1] y a los Juristas como “obreros del derecho”

El objetivo fundamental del derecho es conseguir la paz entre los ciudadanos y para ello debe tener un conjunto de normas que le permitan al Estado su cumplimiento; es así como acude a diferentes espacios como la Constitución, la ley, la jurisprudencia, la doctrina; entre otras, para alcanzar su fin.

Ahora bien el derecho y la economía están intimamente relacionados: mientras el primero regula la conducta del hombre, el segundo explica las leyes a través del uso de conceptos económicos como el dominio de la propiedad. Es este dominio lo que genera en el hombre un deseo voraz, que lo lleva a querer arrebatarle a los demas sus propiedades, ocasionando

un conflicto o guerra y que en derecho se resuelve en los tribunales, buscando que cada quien reciba lo que merece y llegar a su objetivo fundamental que es la paz. Para llegar a ese equilibrio se establece una tregua que en derecho es el contrato, y que es un acuerdo de voluntades que genera derechos y obligaciones para las partes.

El secreto fundamental del derecho es que nosotros los hombres no podemos vivir en el caos, el orden nos hace falta como el aire que respiramos y la economía no basta para poner orden entre los hombres.

Otro tema relacionado con el derecho es la moral, que va relacionado con el bien y el mal, es decir los valores morales de los individuos, y que no es de orden jurídico sino de su conciencia. Es la falta de moralidad lo que da origen fundamental a la creación de las leyes a través de las cuales se indica a los hombres, el camino a seguir utilizando la fuerza o sanción para conseguirlo.

Es así como se hace necesario un jefe o cabeza para regular los conflictos y poner orden y paz entre los individuos; esta figura es representada por el Estado, quien se encarga de pensar y ejecutar el derecho (la paz y el orden), además de emitir los mandatos y de dirigir la sociedad.

De ahí que el derecho sea una combinación de fuerza y de justicia y se represente a través de la

Diosa de la Justicia así: la espada simboliza el poder coercitivo del estado; la balanza simboliza el equilibrio entre los derechos de los litigantes; y la venda sobre los ojos representa la imparcialidad.

Pero cuando los hombres se apartan de los preceptos morales y del amor al projimo, surgen conductas que violan la ley y aparece el delito, cuyas formas primordiales son el homicidio: agresión al cuerpo y el hurto: agresión a la propiedad contra la voluntad del propietario; dando paso a la pena que es el castigo impuesto por la autoridad a quien ha cometido el delito.

Siendo así la propiedad no es otra cosa que el derecho o facultad de poseer alguna cosa y disponer de ella dentro de los límites de la legalidad; por tanto, garantiza al individuo el goce exclusivo de las cosas que son objeto de ella y por tanto se llaman cosas propias o suyas, entonces pasa de ser un principio económico a un principio jurídico; es así como se convierte en el primero de los derechos subjetivos

El contrato, como la propiedad, es un fenómeno económico antes de ser jurídico, tiene la finalidad de fijar ciertas posiciones actuales: por eso implica una promesa recíproca y la promesa es una declaración que se refiere al futuro. Es un acuerdo de voluntades que genera derechos y obligaciones para las partes.[2][] Por

ello se señala que habrá contrato cuando varias partes se ponen de acuerdo sobre una manifestación de voluntad destinada a reglar sus derechos.

Existe un acto jurídico que expresa la mejor forma de tener dominio de una propiedad este el testamento: declaración que de su última voluntad hace una persona, disponiendo de bienes y de asuntos que le atañen para después de su muerte. Aquí podemos ver que el derecho concede al hombre dominio hasta después de que ha dejado de existir en la tierra.

La ley es cada una de las

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