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Motivación Y Aprendizaje


Enviado por   •  28 de Septiembre de 2013  •  2.246 Palabras (9 Páginas)  •  234 Visitas

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INTRODUCCION

“La motivación es un factor determinante en la vida cotidiana”

Podemos definir la motivación como un conjunto de procesos implicados en la activación, dirección y persistencia de la conducta. Motivar al alumno es orientarlo en una dirección y asegurar que se sigan los pasos necesarios para implementar el vínculo entre la enseñanza y el aprendizaje. Se dice que en este proceso el aprendizaje significativo es un reflejo de la motivación y que a su vez la motivación del estudiante se refleja en el logro del aprendizaje significativo. Este concepto de motivación implica que un alumno despierte su actividad como estudiante, a partir del interés por estudiar cierta disciplina en acciones concretas, como por ejemplo, si un estudiante está interesado en aprender inglés, la motivación para el estudiante seria que al finalizar el curso, el alumno podrá comunicarse en ingles así como escribirlo y entenderlo perfectamente. Dirigir sus estudios hacia metas concretas y sostener sus estudios en una forma que, con esfuerzo y persistencia, llega a conseguir las metas. Los componentes del proceso de aprendizaje que yo encontré y me gustaría ejemplificar y estudiar más a fondo son: necesidades, intereses y motivos. La necesidad sería el mecanismo desencadenante del interés por aprender inglés, que incita a las personas a la acción, y la motivación surgiría del deseo de satisfacer esa necesidad. Además de implementar la ayuda docente que al igual es indispensable en este punto.

“MOTIVACION EN EL APRENDIZAJE Y LA ENSEÑANZA”

DESARROLLO

Lograr la motivación en el estudiante no es algo que se alcanza fácil y espontáneamente. Muchos profesores piensan que con organizar adecuadamente los objetivos del ámbito instructivo o con seguir las lecciones de su libro de texto es suficiente para lograr un proceso de aprendizaje exitoso, y no valoran, otras expectativas que el alumno espera del profesor, derivadas de objetivos conscientemente planificados que, contribuyan a motivar al estudiante.

El profesor debe conseguir, como resultado del proceso de enseñanza-aprendizaje en el estudiante, un desarrollo integral de su personalidad. El profesor debe ser una persona que cumpla con las expectativas del alumno, no solo profesionalmente sino también humanamente que el alumno se sienta confiado al tener trato con el maestro, eso lo podrá ayudar a desenvolverse más, algunas veces el alumno cree, que el maestro no podrá entender su problemática o que lo va a juzgar, lo cual hace que el alumno reprima sus cuestiones y esto lo complique aun más ya que va a ser mas difícil el aprendizaje y la motivación, más aún si ese objetivo contribuye a la culminación de estudios universitarios, entonces, esa meta u objetivo, fijada en el ámbito de la sociedad, se vuelve más difícil de cumplir. Para lograr que esto no ocurra es responsabilidad de la institución y en última instancia de los profesores que la representan. Deben de preparar a los profesores para que estén preparados para este tipo de caso y además de que sepan lo que tienen que hacer.

Luego entonces, surge una pregunta:

¿Qué causa la falta de motivación en el alumno?

A este respecto se han puntualizado algunos aspectos:

1. Autoestima baja: Los jóvenes que tienen una pobre imagen de sí mismos evitan las actividades que consideran estar más allá de sus capacidades. Aunque puedan terminar una tarea dada, estos estudiantes tienden a sabotearse a sí mismos para proteger la poca autoestima que sí tienen. Para ellos, es mejor no esforzarse o postergar las cosas, que asumir el riesgo de intentar y fracasar, y luego sentirse aun peor. Por ejemplo, si un estudiante es agredido por sus compañeros, no solo física sino psicológicamente, por ser una persona obesa, esta persona tendrá problemas de autoestima lo que le impedirá tener un buen aprendizaje tanto en la escuela como en casa.

2. Falta de apoyo en casa: El ambiente en el hogar moldea las actitudes iníciales de los jóvenes hacia el aprendizaje. En un hogar donde se fomentan la curiosidad, las preguntas y la exploración, los chicos reciben el mensaje que los estudios valen la pena y que son una fuente de satisfacción personal. Estos muchachos están más prestos a asumir los riesgos que supone toda empresa académica ardua así como cumplir con las expectativas que se requieren. Por otra parte, en un hogar donde no se estimula a aprender, los chicos reciben el mensaje que los estudios son algo de poco valor y que ellos carecen de la capacidad para el aprendizaje, los estudiante no tendrán un buen aprendizaje y no tendrán una motivación por seguir estudiando lo que hace no cumplir con las expectativas del lo ya visto anteriormente.

3. Bajas expectativas en el salón de clases: Los estudiantes reflejan la actitud de sus maestros. Si los maestros creen que los estudiantes pueden aprender, sus estudiantes tienden a confiar en sí, como ya lo expliqué en la introducción a esta investigación, además de que podrán tener una mejor motivación, lo que los lleva a ser mejores en sus habilidades. Estos maestros asignan tareas rigurosas, relevantes y viables que motivan y vinculan al éxito con el esfuerzo. Si en cambio los maestros asumen la postura que ellos son la fuente de todo saber y que sus estudiantes son ineptos, y que además alguno se niegan a dar lo mejor de sí ya que temen enseñar lo que ellos han aprendido ya sea por miedo a ser criticados o por envidia de transmitir algo que les fue de mucho esfuerzo y que no vale la pena enseñárselo a su estudiantes. Éstos estarán más propensos a desconectarse, rendirse y fracasar.

4. La presión: Muchos estudiantes sin motivación lo que hacen es sencillamente responder de manera negativa a la presión, no les gusta ser presionados y al no ser presionados, no sienten motivación alguna. Sea la tensión aparente o real, estos estudiantes se apoyan en mecanismos de defensa para protegerse del malestar que genera la presión. Mediante la estrategia de postergar o de evadir, estos estudiantes intentan escapar de su miedo al fracaso o a conformase con lo que tengan y no hacer el más mínimo esfuerzo por alcanzar una meta en la vida o proponerse un objetivo. A la larga, llegan a aceptar el resultado de su conducta, de modo que aparentan indiferencia y compostura, aun cuando va en aumento la presión que tratan de evadir.

Motivar al estudiante es algo que aporta mucho

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