ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Necesidades Educativas

flaquito1 de Octubre de 2012

23.038 Palabras (93 Páginas)301 Visitas

Página 1 de 93

BLOQUE I

DIVERSIDAD EN LA ESCUELA PRIMARIA

BREVE HISTORIA DE LA EDUCACIÓN ESPECIAL

Por: FCO. JAVIER SÁNCHEZ GALICIA

TETELES DE A.C. PUEBLA 2000

NORMALIDAD Y DIVERSIDAD

La humanidad en su devenir histórico ha transitado por diversas etapas en las que las formas de pensar relacionadas a las diferentes situaciones que se dan en el seno de las sociedades han cambiado y evolucionado.

La diversidad ha sido una categoría presente en todos los tiempos de la historia humana, y de la misma manera las personas con diferencias a lo considerado como “normal” en cada pueblo y época, han sido tratadas de muy distintas formas.

El término normalidad es muy polémico, sin embargo podemos definirlo básicamente como el conjunto de características que debe poseer una persona con relación a las que poseen generalmente los miembros de la comunidad a la que pertenece. El concepto debe estar muy ligado con el contexto de lo contrario perdería su sentido real.

LA ANTIGUEDAD

No podemos dudar que desde los inicios de la especie humana han existido sujetos con múltiples diferencias entre las que se encuentran las discapacidades físicas, mentales o sensoriales que pueden por otra parte ser congénitas o adquiridas.

En las congregaciones primitivas el trato que se daba a las personas que no reunían los parámetros de todos los demás iban desde el abandono hasta el sacrificio, ejerciendo en ellos multitud de formas de segregación, la discapacidad era considerada desde el punto de vista de la selección natural suponiéndose entonces que era natural la supremacía de los seres más aptos.

El descubrimiento de restos de un esqueleto de un ser humano que hizo Marcelin Boulle el año de 1911 en la comarca de Dordoña correspondía al prejuicio existente en esa época de un tipo pre-humano que caminaba con las rodillas flexionadas, el cuello inclinado, la espalda redondeada, en conjunto un ser con un aspecto animalesco.

Al hacer un estudio del mismo sujeto en 1955 el profesor de Anatomía de la universidad John Hopkins; William L. Strauss y A.J. Cave del Hospital Bartolomew de la ciudad de Londres, encontraron que el esqueleto correspondía al de un hombre de cuarenta a cincuenta años de edad con deformaciones producidas por la artritis que le impedían desenvolverse adecuadamente en un medio muy demandante.

Se deduce entonces que este hombre pudo sobrevivir gracias al apoyo de sus congéneres, ese rasgo de solidaridad, nos remite a los inicios del ser humano como tal, de personas que podían sentir piedad por uno de los suyos y atendían a sus necesidades para que pudiera sobrevivir.

Las diferencias tomadas a manera de discapacidad, eran interpretadas como un “lastre” para las sociedades que vivían como nómadas, la capacidad de movimiento independiente era un valor muy apreciado en situaciones de supervivencia en las que los niños, ancianos y personas con alguna dificultad física o sensorial resultaban una carga para la colectividad.

Se supone que también en algunos casos se seleccionaba a las personas con defectos para participar en ceremonias por pensarse que estaban protegidas por los dioses.

En Esparta a partir del siglo VI a. C. Se intensificó la disciplina dirigida a la guerra caracterizada por una rigidez militar en todos los actos de la vida ciudadana, por ello no se permitía que un niño con defectos físicos sobreviviera. Esta costumbre (el infanticidio) era desafortunadamente práctica común en las sociedades de la antigüedad, en la India por ejemplo los niños con discapacidad eran arrojados al Ganges...

El infanticidio se dio no solo en función de discapacidad sino también por razón de sexo, las niñas eran eliminadas con mayor frecuencia, que los individuos varones.

Sin embargo existen también muestras de aceptación y apoyo a las personas con discapacidad, los ciegos por ejemplo fueron respetados en varias culturas, en China los invidentes eran reconocidos como transmisores orales de la historia y tradiciones, y por lo tanto reconocidos socialmente, Herodoto llamó a Egipto “el país de los ciegos” porque había gran cantidad de ellos, se desarrollaron métodos de atención para el cuidado de los ojos y los veteranos de guerra ciegos podían trabajar y recibir sueldo por ello.

En Grecia, Homero “El rápsoda ciego” fue reconocido por obras inmortales como “La Iliada” y “La Odisea” que le dieron fama que perdura a través de los tiempos.

Por el contrario Aristóteles manifestaba que los sordos eran incapaces de hablar y por lo tanto “ineducables”, desafortunadamente esta forma de pensar prevaleció por varios siglos.

En la Roma imperial los enfermos mentales eran utilizados para “divertir” a las personas pudientes. También en el Código Justiniano se habla de la clasificación de sordomudez donde se plantea qué sujetos tienen derechos civiles.

En la Edad media la Iglesia Católica adoptando una actitud ambigua condena en Europa el infanticidio, pero considera que las causas de las “anormalidades” son fenómenos sobrenaturales por posesiones demoniacas o espíritus infernales lo que alentaba el rechazo y la segregación.

Las discapacidades se veían como enfermedades, que se asociaban a “pecados cometidos” como una forma de expiación, baste para ello leer el texto del ritual con el que los enfermos ingresaban en los leprosarios:

“Amigo mío.- Dice el ritual de la Iglesia de Vienne- le place a nuestro señor que hayas sido infectado por una enfermedad, y te hace Nuestro Señor una gracia al quererte castigar por los males que has hecho a este mundo (Foucault 1992)”

Este texto nos remite a épocas de segregación de las personas que por muy diferentes razones estaban en situación diferente a las personas comunes.

El Renacimiento implica una separación de la concepción cristiana hacia una más centrada en el hombre.

En los siglos XVII y XVIII a las personas con alguna discapacidad se les recluía en orfanatos, manicomios, prisiones con delincuentes y marginados en condiciones infrahumanas.

En Europa en el siglo XVII por diversos motivos sociales aumentó la mendicidad, y surgieron en las grandes ciudades instituciones para albergar a toda esa población, a esto se le denominó “El gran encierro”, por ejemplo la apertura del primer Hospital de París en 1676 se realizó pensando en que en él estarían por igual locos, pobres y vagabundos. Foucault rescata una descripción de la época:

“Se informó en los sermones de todas las parroquias de París que el Hospital General se abriría el 7 de mayo de 1657 para todos los pobres que quisieran ingresar ahí por propia voluntad, y de parte de los magistrados se prohibió el grito público a los mendigos que pedían limosna en París; nunca fue ejecutada de mejor manera orden alguna.

El 13 se cantó una misa solemne del Espíritu Santo en la iglesia de la Piedad, y el 14 el encierro de los pobres se consumó sin ninguna emoción.

Todo París cambió de cara ese día, la mayor parte de mendigos se retiró a las provincias, los más sabios pensaron en ganarse el pan por sus propios medios. Fue sin duda un acto de protección de dios sobre esa gran obra, pues nunca se habría podido creer que costara tan poco trabajo y que se llevara a cabo tan venturosamente.”

Pero también surgen esporádicamente intentos de emprender esfuerzos por mejorar las condiciones de vida de las personas que sufrían alguna discapacidad.

En el monasterio de Oña el religioso Pedro Ponce de León (1509-1584) contradiciendo la concepción de Aristóteles, trabaja con doce niños sordomudos con los que pone en práctica su método oral con un gran éxito, además escribió el libro “Doctrina para mudos-sordos”.

Se identifica al fraile Ponce de León como el pionero en la educación de sordomudos.

San Vicente de Paul (1576-1660) estuvo al frente del hospital Bicetre , primera institución a manera de asilo-hospital para personas “mentalmente impedidas”.

En 1575 el italiano Rampazzetto utilizó letras de madera para la enseñanza de lectura a personas invidentes, método que repetiría el español Francisco Lucas en 1580.

En Alemania Harsdorffer usaba tablas cubiertas de cera y grabadas con un estilete en 1651.

Juan Pablo Bonet publicó en 1620 el libro “Reducción de las letras y el arte de enseñar a hablar a los mudos.

El abad Charles Michel L’Epée (1712-1789) funda la primera escuela pública para sordomudos en 1755 institución que posteriormente se convertiría en el Instituto Nacional de Sordomudos de Francia.

En la Ciudad Luz Valentín Huay (1745-1822) funda en 1784 una institución para invidentes, de la que surgiría Louis Braile (1809-1852), célebre por estructurar basándose en una escritura cifrada utilizada por el ejército, el sistema de escritura por puntos en relieve que persiste hasta la actualidad y que lleva su nombre.

Braille quedó ciego a los tres años y en su época fue reconocido en París como un gran intérprete de órgano y violonchelo.

EDUCACIÓN ESPECIAL EN LA ERA DE LAS INSTITUCIONES

A finales del siglo XVIII y principios del XIX nace la era de la institucionalización especializada para personas que presentaban deficiencias, esto a su vez puede considerarse como el nacimiento de la Educación Especial propiamente dicha.

Existe un sentimiento generalizado de que es necesario atender a las personas que presentan diferencias sin un claro enfoque educativo, mas bien con el pensamiento de que era necesario proteger a la sociedad de los discapacitados y a la vez la

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (150 Kb)
Leer 92 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com