ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

PATRICIA ALKOLOMBRE. CAPÍTULO 1 EL DESEO DE HIJO.


Enviado por   •  9 de Noviembre de 2014  •  1.673 Palabras (7 Páginas)  •  282 Visitas

Página 1 de 7

PATRICIA ALKOLOMBRE.

CAPÍTULO 1 EL DESEO DE HIJO.

EL DESEO DE HIJO EN LA MUJER.

El “deseo de hijo” es un discurso actual y en el lenguaje corriente ha devenido sinónimo de una voluntad de procrear. La maternidad está asentada en el ideal del YO femenino y es la expresión más clásica de su sexualidad, culminando con la llegada de un hijo.

Desde la etapa pre-edipica, se funda en los deseos de tener un hijo de la madre, hacerle un hijo a la madre; desde la identificación materna: ser “Madre” como ser Madre.

El deseo de hijo está también marcado por la conflictiva edipica: tener un hijo del padre como resarcimiento de la envidia fálica. El cuerpo materno para la niña es un espejo a futuro con pechos e hijos; hablamos de la diferencia anatómica niña-mujer: una diferencia intra-genero, diferencia que está en relación con la prematures biológica de la infancia.

Es así como la sexualidad femenina se tramita atreves de los tiempos de espera en relación a un cuerpo de mujer a futuro. Etapa de aprendizaje para la niña y a la vez tiempo de espera que transcurre en los escenarios lúdicos a través del juego con las muñecas donde espejan y dramatizan los cuidados maternos cuando las niñas visten alimentan y hablan a sus muñecas, ensayando a la vez reproduciendo los roles maternos.

Al llegar a la pubertad, el cuerpo femenino y sus transformaciones adquieren una función trófica como seña Freud: “con la formación de los órganos sexuales femeninos hasta entonces latentes, parece sobrevenirle un acrecimiento del narcisismo originario”. En el primer caso se trata de “tener un hijo”, es decir el deseo de hijo seria el deseo de tener un hijo. Supone una ruptura de la posición narcisista, una renuncia al estado de fusión y de completud. Está ubicado dentro del orden simbólico, existiendo la triangulación y la terceread.

EL DESEO DE UN HIJO EN FREUD.

La visión de la visualidad femenina en Freud estuvo atravesada por variables culturales en las que la supremacía del varón estaba fuera de discusión. En 1925 escribe acerca de las consecuencias psíquicas de la diferencia anatómica y su incidencia en la constitución del complejo de Edipo en la niña, está toma conocimiento de la falta del Pene y quiere tenerlo. La envidia del Pene “como herida narcisista” establece una cicatriz vinculada con un sentimiento de inferioridad o bien puede dar inicio a lo que Freud denomina “le complejo de la masculinidad” en la mujer.

En este punto plantea que “la libido de la niña se desliza –solo cabe decir: a lo largo de la ecuación simbólica prefigurada pene=hijo- a una nueva posición. Resigna el deseo del pene para reemplazarlo por el deseo de un hijo y con este propósito toma al padre como objeto del amor. La madre pasa a ser objeto de los celos y la niña deviene una pequeña mujer. Párrafo citado infinidad de veces para hablar del deseo de hijo en Freud como situación “por desplazamiento” del deseo del pene en la mujer.

La principal consecuencia para la niña “continua Freud” del descubrimiento de la falta de pene y de la inferioridad del clítoris, es la propensión a sufrir sentimientos de inferioridad y atener más inclinación hacia los celos que el hombre. Señala que al investigar la neurosis femenina, uno de los destinos de la relación entre el deseo de hijo y el deseo de pene en mujeres que tienen una fuerte disposición masculina sumado a un fracaso accidental, produce una activación de la “envidia del pene” y este se convierte en el portador de síntomas neuróticos. En otras mujeres no se registra este deseo de pene y en su lugar está el deseo del hijo cuya frustración “puede desencadenar la neurosis.

Freud plantea un tercer caso en los que ambos deseos, de poseer un pene y el deseo de hijo se relevaron el uno al otro. El varón ama desde el primer momento a una mujer, en cambio la niña se desliga de la madre y se dirige al padre. El deseo de hijo en la niña “desde esta perspectiva” es central ya que está inmersa en el vinculo pre-edipico en la madre. Otro refuerzo de esta fuente pre genital proviene de la experiencia social que enseña que el hijo es una muestra de amor, un regalo. Se plantea también una analogía entre pene y excremento, en tanto la representación de la castración convierte en algo separable del cuerpo. De este modo coinciden en las génesis del deseo de hijo una emoción anal-erótica y otra genital proveniente de la estructuración del complejo de Edipo vinculada con la envidia del pene.

AUTORES POST-FREUDIANOS. ESCUELA INGLESA.

Ernest Jones, Karen horney y Melanie Klein fortalecen la idea de una naturaleza femenina y plantean una revisión critica acerca de la hipótesis freudiana de una masculinidad primaria en la niña (vista desde una posición falocentrista), desde entonces no hay una visión univoca del tema.

Jones y Klein coinciden en la idea de un conocimiento inconsciente de vagina en la niña. Señalan la existencia de dos sexos y plantean que la envidia del pene no es primordial en la niña si no que es un movimiento defensivo. Para Horney

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (10 Kb)
Leer 6 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com