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JESUS COMO LIDER


Enviado por   •  21 de Enero de 2014  •  1.303 Palabras (6 Páginas)  •  745 Visitas

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Jesús como Líder

Sin dudas Jesucristo es uno de los hombres que más profundamente a influido en la historia de la Humanidad. Su predicamento en vida, se transformó luego de su muerte en el cimiento de una nueva religión, que extendió por buena parte del mundo occidental, a través de la evangelización llevada adelante por la Iglesia Católica.

Jesús predicador

Jesús de Nazaret era un predicador ambulante. Juan el Bautista le había señalado como su sucesor. Luego de sortear una serie de pruebas de ascetismo, aumentó su popularidad y –también- el número de sus seguidores. Entre estos discípulos doce hombres conformaban el núcleo más cercano a Jesús. Eran quienes hoy conocemos como los doce apóstoles.

Jesucristo dedicó su juventud a predicar sus creencias. Así, recorrió numerosos lugares de Palestina. Llegó a Jerusalén tan sólo unos pocos días antes de su muerte, aparentemente en el año 30 d.C. Había llegado allí para celebrar junto con sus discípulos la pascua judía.

Es importante recordar que la ciudad de Jerusalén era el núcleo de la vida religiosa judía. En ese contexto, la prédica de Jesús atrajo el recelo de las autoridades religiosas judías y de sus seguidores.

Cómo podríamos evaluar humanamente los resultados del ministerio de Jesús?: «No tuvo resultados perfectos (tuvo un traidor, multitudes que lo seguían pero demandantes y cambiantes, discípulos —amigos íntimos— que lo abandonaron en su hora más difícil). Bíblicamente su ministerio fue muy sencillo pero profundo.

La meta de Jesús fue las personas. Él buscaba conducirlas a la salvación eterna y formarlos a su propia imagen. El método para alcanzar su meta fue: Involucrarse personalmente en sus vidas, a sus discípulos para que fueran como él y, después, enviarlos para que hicieran a otros lo que él hizo con ellos.

El ministerio de Jesús y sus resultados

Juan 17.7–12, 18; Mateo 2819; 1 Juan 1.2–3

El mayor milagro de Jesús no fue realizado mientras caminó sobre esta tierra. Fue el resultado de incontables horas dedicadas a la capacitación de sus doce discípulos, hecho lo cual y una vez que partió, y los instruyó que fueran y practicaran este mismo arte de preparación y liderazgo. El milagro consistió en que esos hombres prácticamente fracasados prosiguieron su milagroso ministerio de tal manera que alcanzaron toda Asia en dos años (Hechos 19.10). Jesús pasó la mayor parte de su tiempo con los Doce, no con las masas. Él estaba empeñado en la formación de hombres que dirigirían la iglesia en la siguiente generación; hombres en quienes usted y yo no hubiéramos perdido nuestro tiempo. Jesús sabía dónde se encontraría su legado. Su ingenio no se encuentra en sus milagros divinos, ni siquiera en su directo ministerio. Se encuentra en su multiplicación deliberada.

Su enfoque primordial fue tratar personalmente con sus discípulos.

Observaciones sobre este enfoque de Jesús

La idea de Jesús sobre el discipulado (involucrase con las personas y formarlas para que ellas hicieran lo que él hizo)

Instrucción... en un contexto relacionado con la vida.

«Viendo la multitud, subió al monte; y sentándose, vinieron a él sus discípulos» (Mateo 51).

«Aconteció que estaba Jesús orando en un lugar, y cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo: Señor, enséñanos a orar» (Lucas 111).

Demostración... en un contexto relacionado con la vida.

«Así que, después que les hubo lavado los pies, tomó su manto, volvió a la mesa, y les dijo: ¿Sabéis lo que os he hecho? Vosotros me llamáis Maestro, y Señor; y decís bien, porque lo soy. Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros. Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis» (Juan 13.12–15).

Experiencia... en un contexto relacionado con la vida.

«Después llamó a los doce, y comenzó a enviarlos de dos en dos; y les dio autoridad sobre los espíritus inmundos» (Marcos 6.7).

«Y tomando los cinco panes y los dos pescados, levantando los ojos al cielo, los bendijo, y los partió, y dio a sus discípulos para que los pusiesen delante de la gente» (Lucas 9,16).

Asesoramiento... en un contexto relacionado con la vida

«Y reprendió Jesús al demonio, el cual salió del muchacho, y éste quedó sano desde aquella hora. Viniendo entonces los discípulos a Jesús, aparte, dijeron: ¿Por qué nosotros no pudimos echarlo fuera? Jesús les dijo: Por vuestra poca fe; porque de cierto os digo, que si tuviereis

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