ENSAYO DE EDUCACION INICIAL

FACULTAD DE EDUCACIÓN E IDIOMAS

ESCUELA ACADÉMICO PROFESIONAL DE EDUCACIÓN INICIAL

ENSAYO

MODELO CURRICULAR SIMBÓLICO O DELIBERATIVO

AUTORAS:

Cárdenas Estrada Yesenia Fernanda

Pérez Vega Sheyla

ASESOR:

Mg. Dennis Jaramillo Ostos

LÍNEA DE INVESTIGACIÓN

UNA PROPUESTA PEDAGÓGICA TRANSFORMADORA

LIMA – PERÚ

2012

MODELO CURRICULAR SIMBÓLICO

INTRODUCCIÓN

Hoy en día nos encontramos viviendo en una sociedad cambiante, es por ello la utilización de un modelo curricular dinámico empleando distintos sistemas y estrategias para resolver un problema educativo latente en nuestra realidad para poder lograr de esta manera una formación integral, es lo que se quiere lograr en el proceso de enseñanza aprendizaje.

Es por eso que tomaremos el modelo simbólico o de corte deliberativo para el planteamiento de nuestro sistema educativo, este modelo permite la construcción del conocimiento del alumno, conjuga equilibradamente la teoría y la práctica despertando así el interés del individuo.

En el presente ensayo analizaremos el modelo simbólico como nueva propuesta a utilizar. Para ello, presentaremos y discutiremos las aportaciones de los modelos práctico – deliberativos de diseño curricular.

Los modelos práctico – deliberativo sobre lo que vamos a tratar, marca precisamente una transición radical en la concepción misma de la relación entre el profesorado y el curriculum escolar. En este sentido, los profesores, dejan de verse como distribuidores de proyectos ajenos, o como gestores de las decisiones tomadas por las administraciones educativas para las que trabajan, para pasar a ser reconocidos como actores, creadores y decisores del diseño curricular, como proceso de toma de decisiones en educación, se democratiza, se acerca a los actores que forman parte de la comunidad educativa, empezando por el profesorado; además, el énfasis se traslada desde la utilización de reglas y procedimientos técnicos de elaboración del curriculum.

Los modelos curriculares práctico-deliberativos de diseño curricular tienen la tarea de ir más allá de la responsabilidad de políticos y administradores de la educación, ya que los problemas curriculares son prácticos y no teóricos, se hacen frente con una racionalidad distinta a la de medios – fines. Asimismo, tienen una visión más democrática, con un carácter práctico y gran capacidad para describir y comprender el proceso de diseño curricular.

EL MODELO DE DISEÑO CURRICULAR SIMBÓLICO O DELIBERATIVO

El modelo curricular simbólico o de corte deliberativo es un diseño práctico que marca una transición radical en la relación profesorado – currículum escolar. En este sentido, los profesores, pasan de ser gestores de decisiones tomadas por terceros, a ser reconocidos como actores, creadores y decisores en el campo del diseño y el desarrollo curricular.

Este modelo curricular también es conocido como investigación – acción que constituye la aplicación del método científico usado para investigar en el entorno educativo. Es el proceso por el cual los diseñadores o maestros se estudian a sí mismos de una manera científica con el fin de guiar, corregir y evaluar sus decisiones y acciones.

Desde esta perspectiva, la plataforma curricular influye en el proceso de deliberación para la toma de decisiones sobre el diseño. Así pues, la fase de deliberación abre paso la toma de decisiones para la acción, distinguiéndose entre diseño explícito (las soluciones dadas una vez discutidas) y diseño implícito (los cursos de acción que se siguen automáticamente sin considerar alternativas). Al respecto, Walker considera que la fase de diseño de un proyecto de desarrollo curricular típicamente contiene estos elementos explícitos (los que proceden de la discusión racional) e implícitos (los derivados de preferencias y rutinas personales e idiosincrásicas), y que las decisiones están influenciadas por ambos. Esto es, no puede decirse que lo explícito se encamine como conjunto de elementos determinantes con carácter de exclusividad, pues desde el punto de vista naturalista de Walker (naturalista porque se retrata cómo se planifica el currículum en la práctica), la dimensión implícita afecta a la deliberación de tal manera que en ocasiones determina fuertemente la misma.

En el modelo deliberativo de Walker, la culminación de esta fase de diseño es la elaboración de materiales de enseñanza específicos y la creación de escenarios educativos. Con ello se aprecia lo que Walker pretendió con este modelo: estrechar la conexión entre desarrollo e implantación del currículum. Éste es uno de los principales aspectos positivos de esta propuesta. También parece ser una descripción bastante ajustada de cómo planifican los docentes, como hizo patente la investigación sobre pensamientos de los profesores. Es más, se trata de un patrón más ajustado a la realidad y más democrático, porque permite un diseño “de abajo-arriba”.

La práctica deliberativa implica el debate permanente y el encuentro entre las personas e ideas que están implicadas en el diseño curricular. Para Stenhouse y Walker, la deliberación implica: La formulación de los temas sobre los que hay que decidir; la presentación de las opciones alternativas en relación con dichos temas; la consideración de los argumentos a favor y en contra y el consenso sobre la alternativa más adecuada. Asimismo, la deliberación es la indagación colectiva, la investigación en la práctica, y siempre implica la intención de hacer cada vez mejor las cosas.

Diseñar no es más que un proceso por el que se adjudican funciones a cada uno de los cuatro elementos integrantes del proceso de desarrollo curricular desde una posición de valor, cuyo sentido se va matizando en la práctica por procesos de ajuste mutuo, es el resultado de la intención ensayada en la acción, a partir de la cual se reestructura

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