Educación a larga distancia

esta alternativa de aprendizaje implica utilización de diversos medios individuales y colectivos que facilitan la instrucción en situaciones donde no existe la contigüidad física de alumnos y profesores.

En este contexto Reyes (2006), refiere que la Educación a Distancia, surge para dar respuesta a las nuevas demandas sociales, que requieren de un sistema de estudio que les permita aprender sin desatender su ámbito laboral y en la comodidad de su hogar utilizando medios que contrarresten las distancias y se adecuen a los nuevos tiempos.

En este sentido, es fundamental establecer una estrategia de formación y capacitación para profesores/facilitadores/docentes y estudiantes que participan en las actividades académicas a distancia, en un primer orden para el diseño y la oferta de productos académicos, y por otro, proponer momentos que nos permitan consolidar, operar y administrar espacios de colaboración para el fomento y divulgación de la Educación a Distancia en la UNEFA.

En atención a lo antes planteado, la concepción de la figura de facilitador es de gran importancia para organizar y facilitar los apoyos necesarios para la situación instruccional, ya sea que se trate de contactos cara a cara o de comunicaciones no contiguas. Al respecto, Medina (2005), define el facilitador “como un profesional especializado en un área determinada del conocimiento, que sirve de apoyo al sistema de aprendizaje a distancia y de autoinstrucción” (p. 9).

Atendiendo a este criterio, el facilitador de un sistema a distancia, además de cumplir con su rol académico debe asegurar que los estudiantes comprendan totalmente los contenidos presentados en las unidades y programas de los cursos y remediar sus conocimientos y

experiencias en función de sus aspiraciones intelectuales, profesionales y sociales.

Es así como la función del facilitador académico en la educación a distancia, además de responder a los desafíos de la sociedad de la información debe promover experiencias innovadoras apoyadas en las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) haciendo énfasis en la docencia, en los cambios de estrategia didáctica de los profesores, en los sistemas de comunicación y distribución de los materiales de aprendizaje, en lugar de enfatizar la disponibilidad y potencialidades de las tecnologías; por lo cual, es necesario reflexionar acerca del uso de las mismas ya que en todo momento deben favorecer la relación interpersonal, el aprendizaje autónomo y significativo.

De allí que, el papel del facilitador académico con el uso de las TIC procura el contacto directo con el estudiante, preparándolo en el seguimiento de la asignatura, contenidos del curso pertinentes para el aprendizaje, comunicación mediada por el computador, teoría y práctica de la enseñanza a distancia, pero además es la figura que ha de evitar la desmotivación y el abandono del participante en un proceso autoformativo y convencerle de que él es el actor principal de su propio proceso de aprendizaje.

Es necesario que el facilitador que reciba la formación de la Educación a Distancia desarrollen una serie de habilidades y destrezas con respecto a las TIC, por ello, el facilitador según Ochoa (2006) debe incorporar a este aprendizaje herramientas tal como la plataforma Moodle, que le permita presentar en cualquier curso recursos de información, fotografías, diagramas, presentaciones, audio o video,

páginas Web, así como llevar los contenidos de las asignaturas para que tanto facilitador como los participantes puedan tomar parte en la discusión del tema y desarrollen entre todos, esfuerzos colaborativos.

También esta plataforma según De Pablos (2007), permite a los docentes (facilitadores), subir contenidos educativos (apuntes, imágenes, videos, presentaciones, entre otros), así como facilitar la comunicación con los estudiantes y gestionar la evaluación de las tareas de aprendizaje de los mismos. Además de ello, posibilita la retroalimentación del trabajo realizado tanto por el facilitador como el participante en la educación a distancia.

En este sentido, se considera importante que los facilitadores tengan conocimiento sobre la plataforma Moodle para el uso de las tecnologías de información y comunicación (TIC), dado que la misma les va a permitir manejar más eficientemente esas tecnologías para que sea posible un cambio pedagógico real y a la vez sean la clave para un aprendizaje de calidad y soportado en la Web.

A tal efecto, es imperativo que la UNEFA implante nuevas formas que se apeguen a un aprendizaje significativo, donde las tecnologías sean un medio y el fin sea el participante del proceso de aprendizaje basado en la producción de nuevas experiencias y por ende en la transformación de un nuevo ser que requiere la sociedad actual.

Las transformaciones tecnológicas que han permitido reducir la distancia han sido una causa constante del avance insospechado de una enseñanza/aprendizaje no presenciales. Los recursos tecnológicos posibilitan mediante la metodología adecuada suplir, la educación presencial, con una utilización de los medios de comunicación

audiovisual e informáticos integrados dentro de una acción multimedia que posibilita, no solo la comunicación vertical profesor-estudiante, sino la horizontal entre los propios participantes en los procesos de formación. El fenómeno de los avances tecnológicos en el campo de la comunicación y de la informática, ha enriquecido los instrumentos de la tecnología educativa con la incorporación de los equipos de grabación, reproducción y transmisión de texto, sonido e imagen. Y sin olvidar que buena parte de estas tecnologías se encuentran hoy en los hogares de

multitud de ciudadanos.

Así los alumnos, a través del estudio independiente, aprenderán al menos de forma tan eficaz como el estudiante de un centro convencional. Más que el método en sí, importa el buen uso que se haga del mismo.

Entre los inicios de la Educación a Distancia en Venezuela según Ferrero (2006), una de las experiencias en ensayar nuevas orientaciones y estructuras organizativas en Educación Superior ha sido desde 1977 la Universidad Nacional Abierta, basada en un sistema de educación abierta y a distancia (SEAD) de alcance nacional, organizado para democratizar y masificar el acceso a la educación, a amplios sectores de la población del país que están imposibilitados para atender un programa de estudios bajo la modalidad presencial debido a la existencia de barreras geográficas, de impedimentos físicos y de cualquier otra índole, o a la imposibilidad de compatibilizar sus obligaciones familiares y laborales con los estudios, sin interferencias entre unas y otras.

Con

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