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El Alma De La Toga


Enviado por   •  21 de Octubre de 2013  •  1.578 Palabras (7 Páginas)  •  235 Visitas

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El alma de la toga nos habla acerca de lo que es realmente ser un abogado que no será aquel que de memoria redacte un juicio, o la institutas si no aquel que se apasione por su arte, además de hacer una comparación entre lo que es un abogado y un licenciado en derecho ya que este segundo es aquel que es un estudioso de las leyes con una cedula profesional que le va a permitir ejercer su profesión en busca de la justicia pero que a diferencia del abogado este buscara ir más allá del derecho es decir buscar las causas que dieron el origen a cierto conflicto y entender el porqué del comportamiento del hombre y el porqué del surgimiento de las leyes.

El abogado es el que busca no llevar a su cliente a lo que este le pida, si no a la emanación pura de la justicia, el que de ella ejerza permanentemente, aunque cabe mencionar que nosotros somos para el cliente y no el cliente para nosotros y algo fundamental es que el cliente debe obedecer al abogado y no el abogado al cliente ya que de ser así debe mejor retirarse del caso.

Además debemos aprender a confiar en nosotros mismos, en vivir nuestra vida sin tener como condicionales las opiniones de los demás, que si bien son válidas, muchas veces no lo son y como tal al no sentir esa fuerza interior de lucha lo mejor es cambiar de profesión.

La justicia es un concepto que está muy relacionado y va de la mano con nuestra profesión ya que nosotros como futuros abogados debemos siempre defender y anteponer a todo a nuestro cliente pero siempre prevaleciendo la justicia ya que algo que no hace mención el libro es acerca de algo sumamente importante la confesión del cliente donde un abogado siempre debe guardar el secreto y jamás revelarlo ya que de lo contrario estaría violando su moralidad ética, además de estar cometiendo un delito, sólo en caso de que nosotros supiéramos que nuestro cliente es culpable y está afectando a otro privándolo de su libertad e incluso atentando contra su muerte es ahí donde el abogado debe revelar la confesión y con esto ejercer lo que realmente es justo.

El abogado en la guarda del secreto profesional, puede encontrarse en tres conflictos: conflicto con su propia convivencia, conflicto con el interés particular ajeno y conflicto con un grave interés social.

Cuando un abogado acepta una defensa, es porque estima aunque sea equivocadamente que la pretensión de su tutelado es justa y en tal caso al triunfar el cliente, triunfa la justicia y nuestra obra no va encaminada a cegar sino a iluminar, claro que hay abogados que hacen lo opuesto y ´planteando cuestiones injustas necesita cegar al tribunal es por eso que estos hombres no pueden ser los hombres representativos de esta profesión.

El último recurso del que debe de valerse un abogado sin duda alguna, no son más que trámites innecesarios que se emplean para la obtención de un tiempo superior al dado por la ley para la obtención de beneficios o para la presentación de pruebas., medios dilatorios del procedimiento para ganar tiempo o para probar una verdad incomprobable de no existir dichas pruebas se debe actuar conforme a los tiempos que establece la ley, no buscar beneficios en otros, aunque si bien debería ser así a fin de buscar, prevalezca la ley.

En el abogado podrá dormitar la competencia científica, pero lo que tiene que estar siempre alerta es la conciencia ya que es evidente que la chicana maliciosa no responde a una necesidad sino a un vicio de voluntad que debería ser castigada.

El abogado es artista, vive de las emociones de los clientes a fin de hacerlas del conocimiento del juez mediante su plasme en los escritos o su recitación en las palabras, no podemos ser fríos de alma y mostrarnos insensibles a los sentimientos de nuestros clientes y de nuestra contraparte, al igual no es abogado completo el soltero ya que no conoce por experiencia de su sangre lo que son la vida conyugal, los deberes paternales y la unidad de la familia, sin embargo a su vez tampoco podemos ser emocionales en estos.

Al igual nos hace mención que la forma más adecuada para desempeñar nuestra labor es siempre imponiendo ante todo la justicia independientemente de la cuestión económica ya que si sólo nos guiamos por buscar la victoria a cambio de una recompensa económica por nuestro cliente nos estaríamos convirtiendo en jugadores, además nos hace una recomendación del trabajo que es el trabajar de las 6 a las 10 de la mañana ya que se encuentran despejadas nuestras ideas y podemos pensar razonadamente en buscar una resolución pacífica con la contraparte.

Los abogados

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