El Alma De La Toga

INTRODUCCIÓN

Lo que este libró y en consecuencia este trabajo busca es recordar y realzar los valores que se tienen como abogado, el autor también busca que jóvenes estudiantes como nosotros que estamos cursando la carrera de Derecho sepamos cómo debe ser y como se debe comportar un abogado,

El autor de este libro Ángel Ossorio nos habla para que entremos en conciencia y veamos la realidad del abogado actual, que ha perdido ese amor que tenía a la abogacía en especial los valores que se han borrado con tanta corrupción.

Su punto es llegar a nosotros los futuros abogados o actuales abogados que han caído en el mismo error, para que así nos demos cuenta que el ser abogado no solo está en un título si no en la experiencia y en el alma de ser abogado.

¿QUIEN ES ABOGADO?

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA- El autor busca definir correctamente el concepto de abogado, el fin de este capítulo es reivindicar el término de abogado como lo conocemos hoy en día.

En este capítulo nos dice que el ser abogado no queda simplemente en el hecho de recibir un título de Licenciado en Derecho, el verdadero abogado es aquel que ejerce su profesión siempre buscando la justicia y dando consejos jurídicos. El título que nos dan en la universidad no es de abogado, sino de "licenciado en derecho" y para poder ejercer la profesión de abogado tienes que ejercer la profesión dando consejos jurídicos y luchando por la justicia, si no haces esto no eres un abogado simplemente eres un licenciado en derecho?

El abogado es el que ejerce permanentemente la Abogacía. Los demás serán solamente licenciados en derecho, pero nada más. El ser abogado no es una consagración académica si no una concreción profesional.

LA FUERZA INTERIOR

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA- La misión del autor en este capítulo es hacernos entender que a lo que sea que te dediques o sea cual sea tu profesión debes de creer principalmente en ti. Nos dice que existe una fuerza, que si no la encuentras en ti mismo no la vas a encontrar en ninguna otra parte.

Yo pienso que el autor tiene razón al decirnos que en nosotros mismos existe una fuerza, que tenemos que encontrar porque no la vamos a encontrar en alguien o en algo más. Esta es la fuerza que nos va a ayudar cuando se nos presente una injusticia o cuando tengamos que mantener nuestra dignidad u orgullo en una situación de agresión o crítica. Tenemos que encontrar esa fuerza y saber cómo usarla y controlarla. Va a haber muchas situaciones en las que digamos que ya no podemos más o veamos algo como perdido o sin remedio, y justamente es esa fuerza la que nos va a impulsar adelante y a seguir con los problemas que enfrentamos día a día y cuando no podemos encontrar esa fuerza, ósea, cuando empezamos a tener dudas, el autor nos dice que en ese momento debemos de cambiar de profesión.

El abogado tiene que fijarse siempre si se encuentra en esa fuerza interior para así hacerse superiores a cualquier cosa.

LA SENSACIÓN DE LA JUSTICIA

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA- En este capítulo el autor nos quiere hacer entender que la justicia no es algo que se pueda aprender en libros, sino que es algo que solo se aprende en la vida.

"La Justicia no es fruto del estudio sino una sensación", pienso que con esa frase el autor quiere hacernos llegar a la conclusión de que por más que la leas en libros, o estudies la justicia no vas a saber verdaderamente lo que es sino la has vivido, si no la has sentido. Es un conocimiento que sólo se puede adquirir día a día a través de la experiencia.

Este capítulo nos dice que procuremos no actuar tan apegados a las leyes, que usemos lo que nosotros tenemos conceptualizado como bueno, equitativo y sobre todo justo. En la sociedad que vivimos actualmente lo único que importa es el dinero o el poder entonces los abogados hacen lo que quieran con las leyes con tal de ganar, cuando realmente lo importante no es sólo ganar el caso si no buscar ayudar a nuestro cliente pero sin crear una injusticia para los demás.

Ser abogado no es saber el Derecho, sino vivirlo o conocer la vida. El derecho positivo está en los libros, pero lo más importante, como los valores, no está escrito en ninguna parte.

LA MORAL DEL ABOGADO

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA- La cuestión de este capítulo y lo que el autor nos quiere dar a conocer es el criterio debe de tener un abogado

Se supone que como abogado aceptas un caso es porque estas defendiendo una causa justa, y haces todo lo moralmente y justamente necesario para defenderlo. Pero de ahí sale una cuestión muy importante; lo que puede ser bueno para mi puede ser que para otro no lo sea, entonces ¿quién decide lo que es moralmente correcto y lo que no? Y aquí es donde entra otra cosa importante, el autor menciona una frase que llamo mucho mi atención, "Abogado que sucumba al qué dirán, debe tener manchada su hoja de servicios con la nota de cobardía". Pues para lo que muchos sea correcto, puede que para otros no lo sea; y si nos dejamos llevar por lo que dicen los demás jamás llegaremos a ser quienes en un principio soñamos que seríamos. Debemos servir al fin bueno, aunque sea con medios malos, y no viceversa.

EL SECRETO PROFESIONAL

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA- ¿Es posible servir al secreto profesional y a la moral del abogado al mismo tiempo?

Puede sonar chistoso pero cuando lo pensamos detenidamente nos damos cuenta que es casi imposible para las personas mantener un secreto, porque se lo cuentas a alguien de tu confianza y esa otra persona se lo cuenta a alguien de su confianza y así sucesivamente y se firma una cadena y a veces contamos cosas sin pensar cómo pueden afectarle a los demás. Como abogados debemos evitara esto porque sí revelamos algún secreto de nuestro cliente o relevante al caso se puede ver perjudicada la decisión del juez. Y volviendo al planteamiento del problema y al capítulo anterior, se supone que cuando tu aceptas un caso es porque estas defendiendo una causa justa, entonces yo pienso que si al abogado se le confía algún secreto que diga que el cliente es totalmente culpable mejor deje el caso, sin tener que revelar el secreto y no defender una causa que no es justa.

LA CHICANA

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA- ¿Medios dilatorios del procedimiento para ganar tiempo o para probar una verdad incomprobable de no existir dichas dilatorias?

El último recurso que debemos de emplear como abogados es el uso de trámites innecesarios o recursos improcedentes para ganar tiempo o para la presentación de pruebas. Debemos actuar conforme a los tiempos que establece la ley y no buscar beneficios en otros.

Aunque, como nos dice el autor, hay casos en los que por un buen motivo sea necesario hacer uso de la "chicana", queda en la conciencia de cada abogado hacerlo o no. Yo pienso que la chicana es algo malo, porque de cierta forma es como entorpecer o hacer lenta la ley para nuestro beneficio, o más bien el beneficio del cliente; pero en la actualidad se ha ido perdiendo ese sentido del buen desempeño de la abogacía y por eso la chicana puede que en ciertos casos no sea tan mal visto como en otros.

La verdad si yo estuviera en la situación de que sé que mi cliente es inocente o tiene la razón y estoy representando una causa justa si haría uso de esos recursos, siempre y cuando lo haga para que prevalezca la justicia.

LA SENSIBILIDAD

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA- El autor en este capítulo nos quiere hacer entender que como abogados no debemos de ser de corazón frío pero tampoco mostrarnos sensibles, debemos de encontrar ese punto medio.

Como hemos escuchado desde que entramos a la carrera, la abogacía es una lucha de pasiones. Y está en nosotros no rendirnos a ellas. En mi opinión la cuestión de la sensibilidad en esta carrera es muy difícil porque por una parte el cliente se quiere conectar contigo y que entiendas por lo que está pasando pero tampoco es lícito adueñarse de sentimientos que no te corresponden como tampoco te puedes mostrar frío ante una situación. Creo que la solución está en encontrar un equilibrio entre esos dos extremos. Un punto medio en donde puedas controlar las emociones. Y lo más importante es olvidar, olvidar las victorias o las derrotas y despedirse del cliente.

EL DESDOBLAMIENTO PSÍQUICO

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA- ¿Es necesario ponerse en los zapatos del cliente para llevar mejor el caso?

Me parece que para proceder muchísimo mejor en un caso, es de gran importancia llegar a conectarse con el cliente. Para esto, es bueno dejar a un lado nuestros intereses y nuestro bienestar, y ponernos en los zapatos del cliente. No es cuestión de olvidarse quiénes somos, sino el renunciar a ciertas cosas que podrían interrumpir nuestro trabajo y utilizar nuestras facultades como buenos abogados.

Pero tampoco debemos de olvidarnos del principio fundamental, actuamos por

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