ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

El Maestro Y Su Practica

chatitabonita7 de Octubre de 2011

16.608 Palabras (67 Páginas)676 Visitas

Página 1 de 67

Al analizar mi práctica docente me di cuenta que existen algunas costumbres que tengo muy arraigadas las cuales debo modificar, no es fácil reflexionar sobre ellas, puesto que llevo tanto tiempo llevándolas a cabo que se vuelven parte de la rutina y termino realizándolas de manera mecánica, pocas han sido las veces en que me he puesto a reflexionar de manera formal sobre ellas, y menos aun sobre como transformarlas. En este escrito también pretendo plasmar las técnicas que utilizo para registrar mi trabajo, además de los requisitos que estas deben cumplir.

Una de las prácticas que me parece susceptibles de mejora en primer lugar, es la de profundizar en mi quehacer educativo, creo que esta primera acción me ayudaría a mejorar otros aspectos de mi actuación docente como es la de sistematizar mi registro diario de la jornada de trabajo, ya que en ocasiones por alguna situación se me pasan algunos días por relatar y días después mi relato está incompleto, carente de detalles espontáneos. Dejar de ver los registros como mero requisito y hacer un análisis profundo de ellos me ayudará también a notar más fácilmente errores y aciertos cometidos en mi labor. Otra cosa que me gustaría cambiar es la realización de entrevistas con los padres de familia de manera personal y más formal, ya que hasta ahora se llevan cuestionarios en una hoja y muchas veces las preguntas son mal interpretadas por lo que no obtengo las respuestas que necesito o son muy escuetas, así que pienso que en persona resultaría más confiable el resultado arrojado por la entrevista y conocería mejor el contexto del niño, otro aspecto de esta dinámica es que debe ser estructurada con claridad para obtener datos concretos que no den pie a divagar o respuestas superficiales, de otra manera no tendría aplicación práctica. Pienso que también es importante dar un cambio a la evaluación que se hace a los niños, si realizara la evaluación en conjunto con los padres de familia, me parece que sería una valoración más certera y completa, ya que se ampliarían en forma sustancial los criterios y aspectos a evaluar de los alumnos. En pocas ocasiones he hecho adecuaciones curriculares, tiendo a homogeneizar la práctica, y cuando las llevo a cabo, no el planeo solo aplico esos cambios en forma arbitraria sobre la marcha a las actividades o trabajos de los niños o niñas que así lo requieren. Otra de las cosas de las que estoy consciente es el hecho de que debo cambiar mi concepción de aplicación de disciplina, ya que la mayoría del tiempo quiero tener sentados a los niños y trabajando sin ruido, en ocasiones reflexiono acerca de esto y sé que debo ser más tolerante en este aspecto, y buscar otras estrategias menos rígidas para lograr la disciplina en el aula.

A continuación mencionaré los instrumentos de trabajo que llevo a cabo para registrar mi práctica, además de los requisitos que deben llevar cada uno de ellos:

• El diario de trabajo: por día fechado llevo a cabo una narración y descripción breve de la jornada de trabajo, para ello me baso en la observación, tanto de las actitudes, logros y conocimientos previos que tienen los niños con respecto a la actividad que estoy abordando; además de lo que considero fue lo más relevante del día, también anoto los hechos que afectaron o favorecieron el desarrollo de las actividades, así mismo realizo una autoevaluación, y ocasionalmente anoto opiniones o diálogos de los niños.

• La planeación: la hago de acuerdo a lo que, a mi parecer, es prioridad (en cuanto a competencias se refiere) favorecer en los niños, o a las necesidades que presentan en ese momento, y en base a una reflexión de cómo los observo además de los registros hechos. Lo primero que lleva mi planeación es la fecha de inicio y aproximadamente en qué fecha la voy a terminar; generalmente planeo para un mes, después pongo la o las competencias que voy a favorecer, seguida de la situación didáctica y la secuencia didáctica, posteriormente las actividades permanentes, las actividades del programa estatal de lectura que pienso llevar a cabo durante la situación didáctica, después las competencias transversales y finalizo dejando un espacio para actividades imprevistas.

• La evaluación del niño (a): la realizo al primer mes, durante y al finalizar el ciclo escolar, apoyándome en evidencias de trabajo, la observación permanente de sus actitudes y durante el desarrollo de las actividades, me auxilio en notas de campo, en ocasiones el entrevisto de manera individual y/o grupal. En las evaluaciones inicial y final hago un escrito donde plasmo las competencias que el niño posee, únicamente aspectos positivos y agrego sugerencias para que sea apoyado en casa con los aspectos más deficientes. En la evaluación continua solo guardo evidencias de los trabajos de los niños y anoto en ellos los avances obtenidos en la competencia que ese trabajo pretendía favorecer. También ejecuto la evaluación diagnostica de grupo, de las competencias que están menos desarrolladas en el grupo y de las que están más favorecidas y a partir de esta evaluación llevo a cabo el plan anual de trabajo. Además esta evaluación debe contener, fecha de realización, firmas de la educadora, directora y padre o tutor del niño, además del sello de la institución.

• El expediente personal del niño: lleva la ficha de identificación del niño, copia del acta de nacimiento, copia de la CURP, la evaluación inicial y final del niño, evidencias de trabajo con notas de los avances y dificultades que el alumno presento en la actividad en cuestión, también debe llevar las entrevistas realizadas con padres de familia y con niños, cabe mencionar que las entrevistas que hago usualmente son informales y no las registro

ACTIVIDAD PREVIA. “Desde el saber del estudiante-profesor, ¿Qué aspectos de su práctica docente considera debe preservar y cuáles necesita renovar, con la intención de llegar a mejores aprendizajes y condiciones de estudio para los involucrados?”

Desde la perspectiva particular basada en la experiencia laboral, se puede considerar que la práctica docente es toda una cultura, un ritual que se realiza al interior de las instituciones y más concretamente al interior del aula escolar; espacio propicio para que el docente ponga en práctica una serie de estrategias que aunadas a una cultura propia, propiciarán el desarrollo del proceso enseñanza-aprendizaje de los alumnos.

Es indudable que existen un sinnúmero de aspectos que entrelazados conllevan poco a poco a la consecución de los objetivos de aprendizaje planteados, muchos de ellos sostenidos en la práctica docente de antaño y que a la fecha se siguen realizando como por ejemplo: el pase de lista, plan de clase, horarios, honores, disciplina, hábitos higiénicos, rol de aseo; entre otros que contribuyen de alguna manera al proceso educativo.

Sin embargo es necesario reconocer y aceptar que muchos de los aspectos mencionados se han quedado estancados en el momento histórico de su surgimiento y que ya no son tan efectivos en su operacionalidad en la actualidad el cual requiere considerar otra serie de aspectos más dinámicos que atiendan debidamente a las necesidades actuales de la población escolar.

Es por ello que entre esos aspectos destacan como relevantes con la intención de llegar a mejores condiciones de aprendizaje y estudio: principalmente la planeación que el docente elabora y que a lo largo del tiempo de cierta forma ha ido perfeccionando en base a la experiencia laboral que cada ciclo escolar le aporta, pero que sigue presentando deficiencias, pues a pesar de establecerse ciertos formatos de planeación los cuales consideran unidad, propósito, contenido programático, actividades a desarrollar, recursos, evaluación, entre otros, lo manejan de manera aislada de las demás asignaturas.

No se ha logrado establecer un parámetro o formato que permita vincular el proceso de interacción de las demás asignaturas al momento de planear, realizando así una fragmentación de contenidos didácticos por asignaturas que por ende dan al alumno una visión fragmentada del conocimiento adquirido, puesto que no logra establecer la interrelación y mucho menos la aplicación del contenido de una asignatura le puede aportar a los demás.

Se considera en este rubro la elaboración y contemplación de una planeación enfocada al trabajo con padres de familia a fin de realizar detenidamente la práctica y fortalecimiento de los valores universales desde el hogar con una unificación de criterios hacia la concepción de los mismos, necesidad fundada en la marca indisciplina que se vive dentro de los centros escolares tanto entre alumnos como de alumnos hacia maestros, precisamente porque esta educación en valores se encuentra devaluada, ya que el docente al interior de la escuela presupone que el alumno trae la formación en valores desde el hogar, situación que en la mayoría de los casos es negativa pues los roles sociales de los padres impiden que haya esa atención en valores al interior de las familias, ocasionando que en la escuela el alumno proyecte sus deficiencias causando caos.

De igual manera la planeación actual no contempla en su estructura de manera formal previamente establecida,

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (64 Kb)
Leer 66 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com