Ensayo sobre la Eutanasia en México

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Universidad Veracruzana “Campus Coatzacoalcos”

Facultad Derecho SEA

Experiencia Educativa:

Habilidades del Pensamiento.

Docente:

Carmen Camacho Cristia

Trabajo:

“Ensayo Sobre la Eutanasia”

Alumnos:

Nochebuena González Diana Laura

Rosales Samano Ulises

Vázquez Nava Guillermo Del Ángel

Fecha:

8 de Julio de 2017

Existe un método para suprimir de manera rápida todo el sufrimiento que un enfermo en etapa terminal pueda experimentar; dándole una muerte tranquila y digna, sin necesidad de prolongar más la amargura del momento final, que al final sólo termina por degradar su condición física, moral y espiritual: la eutanasia.

Actualmente sólo en muy pocos países, como, por ejemplo; Holanda y Bélgica, se han despenalizado la eutanasia, y en otros todavía permanece plasmado como homicidio, o bien como asistencia al suicidio. Según los datos oficiales: en una tasa creciente, a miles de personas se les emplea la eutanasia en contra de su voluntad y las restricciones para aplicarla han ido disminuyendo. Por ejemplo, actualmente existe permiso legal para aplicar la eutanasia a niños recién nacidos con graves problemas de salud sin consentimiento de nadie excepto del médico.

La RAE define a la eutanasia como: “intervención deliberada para poner fin a la vida de un paciente sin perspectiva de cura” y “muerte sin sufrimiento físico” (Real Academia Española, 2017). Deriva de las raíces griegas eu (buena) y thanatos (muerte), es decir, hace alusión a un bien morir, lo cual, desde mi punto de vista, se entiende como una muerte digna sin sufrimientos innecesarios y en las mejores condiciones que cada caso se permita.

EUTANASIA

La eutanasia se toma como una forma de muerte digna para las personas que padecen de una enfermedad terminal e irreversible; por lo tanto, el sufrimiento es muy alto para quienes permanecen vivos por medios artificiales si llegan a solicitarla en uso reiterado de su razón, en forma libre y voluntaria.

Argumentos a favor

Para poder apoyar esta práctica es necesario realizar un análisis reflexivo acerca del tema, sin dejarse influenciar en las concepciones que impone la religión y la moral, pero entre todos consideramos que al existir el “derecho a la vida” este también implica la dignidad y la libertad, con ello podemos entender que la eutanasia positiva es una salida válida para un enfermo terminal que ya no desea sufrir más, es una decisión muy íntima y personal, la cual sólo le corresponde a la persona tomar.

La vida es el valor esencial, y este debe ser protegido por el estado con todos los medios posibles, pero no se puede dejar de lado el humanismo y ese constante pensamiento de que la muerte sea lo menos dolorosa y traumática posible. La eutanasia ofrece esta alternativa, ya que sus motivos son meramente de misericordia, tanto para el que sufre como para aquellos que lo rodean, además, cuando se busca prolongar artificialmente la vida de la persona se piensa; ¿realmente es vida o es mera existencia biológica?

Lo más importante sobre este tema es nunca olvidar los motivos humanitarios frente al sufrimiento innecesario que un enfermo terminal pueda poseer, del que sólo se alarga su agonía y la de sus seres más cercanos, y no su vida.

Los médicos han participado en la toma de decisiones sobre el fin de la vida, y actualmente es común suspender o no instaurar tratamientos en determinados casos, aunque ello concluya con la muerte del paciente. Esto se conoce como limitación del esfuerzo terapéutico, limitación de tratamientos o, simplemente, eutanasia pasiva. Ésta se lleva a cabo con el conocimiento y anuencia de los familiares y/o curadores del paciente.

Mientras que jurídicamente la sociedad moderna basa su ordenamiento jurídico en la protección de los derechos humanos. En este sentido, cada enfermo tiene derecho a decidir, informadamente, sobre los asuntos que pertenecen a una esfera tan privada como su cuerpo; y en virtud de esto, decidir cómo quiere seguir o no seguir viviendo.

En un artículo se puede encontrar un ejemplo de esto, con la opinión del director de la Unidad de Cuidados Paliativos, Armando Garduño Espinosa:

De los 750 niños atendidos hasta la fecha en una de las pocas unidades que existen en el país, el 20 por ciento se encuentra en estado vegetativo^[a], es un dilema enorme, están peor que la muerte. Hemos ido a sus casas, aplicando analgésicos, pero muchos niños se consumen por el cáncer, los tocas y sufren intensamente, eso es una crueldad y por eso se debe de impulsar la iniciativa, pero trabajar a su vez en recursos terapéuticos. (Especialistas, a favor de la eutanasia, 2010)

Argumentos en contra

La mayor parte de los argumentos en contra de la eutanasia toman como base la religión, puesto que ésta rechaza la idea de esta práctica, sosteniendo que Dios es quien entrega la vida y sólo Él puede determinar en que momento se acaba; sin ninguna intervención humana. También va en contra de todos los principios éticos y morales que atentan con los valores religiosos que la Iglesia ha sostenido por siglos.

Bióticamente hablando no es lo mismo morirse, o dejar morir, que matar o ayudar a otro a matarse. Mientras que morirse es un hecho, dejar morir implica una conducta éticamente relevante, ya que unas veces procederá abstenerse de intervenir o suspender el tratamiento iniciado en los casos de enfermedades incurables^[b]; y otras veces, dejar morir, pidiéndolo o no el paciente, puede ser un acto inmoral y hasta criminal de dejación de los deberes de asistencia hacia el enfermo. 

Como ejemplo está La encíclica Evangelium vitae del Papa Juan Pablo II:

[…] la eutanasia es una grave violación de la ley de Dios, en cuanto eliminación deliberada y moralmente inaceptable de la persona humana. Esta doctrina se fundamenta en la ley natural y en la Palabra de Dios escrita; es transmitida por la Tradición de la Iglesia y enseñada por el Magisterio ordinario y universal. Semejante práctica conlleva, según las circunstancias, la malicia propia del suicidio o del homicidio". (Juicio de la Iglesia Católica sobre la eutanasia, s. f.)

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