Estudio De Casos De Pequeñas Empresas
stiven.ro18 de Noviembre de 2014
5.071 Palabras (21 Páginas)420 Visitas
Estudios de casos de pequeñas empresas elaboradoras de productos del bosque en América Latina
Antecedentes
Ha habido una considerable actividad para ayudar a reducir la pobreza rural en América Latina. Los esfuerzos han incluido la reforma de políticas acompañadas por programas de campo para el desarrollo rural. Muchos de estos programas de desarrollo integrado han tenido componentes forestales, y es en conjunción con la labor en éstas, que el autor ha recogido la información que sigue. Las pequeñas empresas procesadoras basadas en productos del bosque que tienen una buena oportunidad de crecimiento, desempeñan una labor muy importante como fuente prometedora para un mayor empleo, para un mejor nivel de vida y, a largo plazo, para el desarrollo de las áreas rurales. Este documento describe y comenta las experiencias con dicho tipo de empresas haciendo hincapié en el papel, naturaleza y estructura de las organizaciones del productor, y de las instituciones externas implantadas para darles asistencia. Discute los puntos fuertes y las debilidades principales para llegar al éxito, e identifica los puntos clave relacionados con las organizaciones de productores y agencias de asistencia. Se describirán tres casos específicos ilustrativos seleccionados dentro de una gran variedad de tipos de ubicaciones.
La experiencia sugiere que para discutir el impacto institucional en el desarrollo de las pequeñas empresas industriales basadas en el bosque, es necesario tomar en cuenta la cadena total de producción desde el bosque hasta el mercado. Problemas como la infraestructura, la estructura social, y el abastecimiento a largo plazo de la madera, consideraciones sobre la extracción del bosque y el transporte, el sistema de distribución y las políticas y sistemas de comercialización, tienen que ser tomados en cuenta como actividades estrechamente interrelacionadas con la empresa.
La mayoría de las pequeñas empresas basadas en productos del bosque aquí revisadas como estudio de casos son compañías privadas, de propiedad a veces individual. También hay, sin embargo, diferentes tipos de cooperativas, comúnmente apoyadas por los gobiernos o por otras instituciones externas, algunas de las cuales reciben asistencia internacional.
La actividad tradicional y más común de la elaboración en pequeña escala, aparte de la leña y fabricación de carbón vegetal, es el aserrado a mano y mecanizado, donde este último es predominantemente hecho con aserraderos rústicos circulares. Muchos países tienen hasta 200-300 aserraderos de este tipo que operan frecuentemente muy por debajo de su capacidad instalada.
Estos aserraderos son, a menudo, una base esencial para otras unidades elaboradas basadas en productos del bosque, que convierten la madera aserrada ulteriormente en diversos productos acabados tales como muebles, cajones, parquet, mangos, molduras. Esta elaboración secundaria viene a menudo integrada al aserrado en la misma localidad. Sin embargo, un aserradero a menudo proporciona también materia prima a una serie de pequeñas unidades elaboradoras de productos de la madera, pertenecientes normalmente a familias o individuos.
Este documento discute solamente el desarrollo de pequeñas empresas basadas en la madera, ya que la madera es el más importante producto forestal. Otras actividades, como la resinación, el uso de árboles frutales, artesanía con productos forestales no madereros, tienden a tener solamente una importancia localizada, y no serán tratados aquí. Hasta ahora, el apoyo externo a estas pequeñas empresas es muy limitado: las instituciones gubernamentales, por lo general, hacen hincapié en las funciones de control y de aplicación de las leyes. A veces, también organizan cursos especiales de entrenamiento. En general, hay un limitado servicio asesor directo y sistemático para cualquier aspecto y no se dispone de financiamiento o de crédito.
Como resultado de la limitada asistencia externa, los productores de productos similares como los propietarios de aserraderos, tienen comúnmente algún tipo de cooperación entre unos y otros. Ellos constituyen, a menudo, asociaciones de interés especial, que son normalmente un foro para plantear cuestiones de mercado, fijación de precios, etc. Las asociaciones generalmente no están en condiciones de obtener muchos logros, siendo por lo común débiles debido a los fondos limitados. Por este motivo pueden ofrecer poca cosa a sus miembros en el sentido de apoyo técnico y financiero necesario. Pocas empresas pequeñas controlan su propio abastecimiento de materias primas, inclusive su propio sistema de manejo del bosque y capacidad de extracción y transporte: obviamente son mucho más fuertes que las que tienen que depender de otros empresarios para sus materias primas o para la distribución de sus productos manufacturados.
Estudio de caso 1: PEQUEÑAS INDUSTRIAS BASADAS EN PRODUCTOS FORESTALES EN EL PROYECTO PLAN SIERRA EN LA REPUBLICA DOMINICANA
El planteamiento
El Proyecto Plan Sierra es un esquema integrado de desarrollo rural en la región montañosa de bosques de pinos del norte. El proyecto abarca alrededor de 250 000 ha distribuidas en 4 cuencas. El proyecto se inició en 1979 y el presupuesto nacional ha sido aproximadamente de 700 000 dólares EE.UU. a partir de entonces. En el curso de los años, el proyecto ha sido capaz de atraer apoyo bastante sustancial desde el exterior - bilateralmente de Suecia, Holanda, Alemania y Estados Unidos, y de instituciones internacionales tales como la Fundación Kellogg y el Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas. Las actividades más importantes son la repoblación con árboles forestales y cultivos perennes, conservación del suelo, cultivos anuales, pastoreo de ganado y el desarrollo de industrias elaboradoras basadas en la madera, con materia prima de los bosques sometidos a manejo. Existen subprogramas de ayuda, tales como el desarrollo de la infraestructura, servicios de salud, capacitación y educación, y organización social.
Un elemento muy importante en las actividades del Plan Sierra es el otorgamiento de créditos a los campesinos. El proyecto normalmente concede créditos a grupos de campesinos, pero los individuos en el grupo se comprometen a devolver con las futuras cosechas, mientras que la responsabilidad del grupo es la única garantía exigida por los prestadores. Si bien hasta ahora el 70 por ciento de este crédito ha sido destinado a la producción de café, el proyecto comenzó, en 1985, a proporcionar también crédito para las inversiones forestales. Ello complementa la asistencia técnica a propietarios de bosques privados, con respecto a la elaboración y aplicación práctica de planes de manejo forestal.
En el área del proyecto, se han identificado hasta ahora 400 propietarios de bosques, de los cuales 13 son dueños de un total de 770 ha. Ellos están implicados inicialmente en el desarrollo de la forestación, en el manejo del bosque y en la producción de madera en rollo, pero algunos de ellos pueden instalar en el futuro pequeñas industrias basadas en la madera para utilizar sus propios recursos forestales. Con el fin de evitar la explotación excesiva de los bosques para ganancias rápidas, la nueva ley forestal de 1985 exige que los propietarios forestales obtengan permisos especiales de la Comisión Técnica Forestal para cosechar sus bosques. Los permisos pueden ser emitidos solamente si existen planes apropiados de manejo forestal.
En el marco del proyecto integrado, hay un subprograma de financiación sueca (denominado “Celestina”) que pone en práctica un plan de ordenación forestal para alrededor de 4 000 ha de bosques de pino (Pinus Occidentalis) mal cortados y degradados, y que utilizan los productos cosechados en una unidad industrial procesadora con dos aserraderos y otros equipos instalados. El objetivo principal de este plan de manejo es el de restaurar y utilizar los bosques degradados, de esta forma alcanzar un rendimiento económico superior a largo plazo, y obtener también un impacto social en el proyecto, al dar empleo y entrenamiento a la gente en edad de trabajo perteneciente a 110 familias (600 personas) que viven dentro del área Celestina. La meta final es de dar autodependencia económica con el procesamiento y comercialización de productos forestales hasta un total anual de alrededor de 6 000 m3.
En la región del Plan Sierra, alrededor de 40 pequeñas empresas basadas en la madera están ubicadas y desarrolladas, todas a una distancia máxima de 30 km de la Celestina. Ellas producen principalmente muebles y artesanías, y la mayoría son pequeñas y de propiedad individual. Los muebles procesados son de tipo rústico y a menudo sólo limitadamente terminados. Sin embargo, existe un mercado local bueno para los pequeños talleres, y los mayores venden al mercado nacional. Algunas de estas empresas tienen hasta 15 personas empleadas y los propietarios subcontratan también gente, muchas veces mujeres, para prefabricar piezas de muebles o hacer ciertas operaciones especiales en sus casas lo que tiene un buen efecto en cadena sobre la ocupación en la vecindad.
Problemas y apoyo institucional
Los principales problemas encontrados incluyen la mala organización interna y la falta de cooperación entre empresas, aun para resolver problemas comunes relacionados con el financiamiento y la comercialización; la materia prima es de mala calidad; la madera aserrada no es, por lo general, suficientemente seca y las dimensiones de las tablas no conforman normalmente las necesidades, con el resultado de un desperdicio innecesario y aumento de costos; los productos tienen normalmente defectos tales que sólo pueden ser vendidos en el mercado local a precios comparativamente
...