Estética en Arquitectura Crítica Arquitectónica

Universidad Autónoma de Nuevo León[pic 1][pic 2]

Facultad de Arquitectura

Estética en Arquitectura

Crítica Arquitectónica

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Nombre: Sebastián Guardado Barrón

Grupo: 005

Matrícula: 1818939

Semestre: 3°

Docente: Arq. Cristóbal E. González Guzmán

Periodo Escolar: AGOSTO-DICIEMBRE 2018[pic 4]

Índice

• Desarrollo…………………………………………………………………….3
• Reflexión……………………………………………………………………..6

Desarrollo

E

n este primer subtema se hace mención de la definición de lo que es en sí la crítica y cuáles son sus objetivos y sus significados. A mi parecer, la crítica vendría siendo un juicio estético, una opinión, una retroalimentación de algúna sugerencia o de algún proyecto a realizar; este juicio tiene como labor principal la valoración individual de la obra arquitectónica que el crítico hace para saber la complejidad de los conocimientos que la otra persona dispone a saber, de su metodología, intuición y gusto. Dicha crítica iniciada como una simple opinión personal de un arquitecto que sabe del tema tiene como objetivo principal entrar a formar parte de la voluntad colectiva, estar enlazado a los debates cuidadanos, y así poder  revertir las necesidades de cada individuo dentro de la sociedad. También es importante mencionar que el crítico se dedica más que nada a comprender la obra arquitectónica para poder ser expuesta al público el contenido de esta. [pic 5]

La crítica se sitúa en el amplio horizonte que se extiende entre dos extremos ilusorios y falsos; el exceso racionalista y metodológico que se cree que se pueden hacer interpretaciones completamente demostrables hacia la sociedad, únicas y estables ante toda obra de creación.

Siempre se ha hecho presente que la primera respuesta a toda pregunta que se refiera a toda disciplina humana existente en el mundo, ha consistido siempre en irse hacia sus inicios en la historia, principalmente los primeros movimientos y actitudes que se hicieron. El inicio de la crítica se inició a mitad del siglo XVIII con el nacimiento del neoclasicismo, que fue más que nada una evolución total del gusto y de la metodología de creación e interpretación hacia las artes en general, la arquitectura y las ciudades. Para que la crítica se pudiese llevar a cabo, se tuvo que plantear la teoría del neoclasicismo; como Mengs, Lessing y Winckelmann lanzaron contra el periodo barroco tardío. A partir del arte de vanguardia y del movimiento moderno que la actividad de la crítica toma un papel más relevante; todo lo que conlleva las diversas génesis de la abstracción requiere de una teoría, una crítica y una historiografía que acompañen la difusión de la obra de arte de la arquitectura moderna hasta hoy en día. La expansión de la arquitectura moderna, la teoría y la crítica no ceden en su empeño aún, sino que siguen creciendo.

Todo ensayo que se presente, debe de contener razonamientos y comparaciones únicas con elementos subjetivos. Absolutamente todo tiene que basarse en la planeación de preguntas, mostrando la arbitrariedad de las convenciones. El ensayo consiste en una reflexión abierta e inacabada que parte del desarrollo de la duda de algún tema en específico. La estructura permite ir en la dirección de una concepción multidisciplinar del conocimiento humano, comprendiendo la cultura y el arte en general como un todo; como por ejemplo la pintura, escultura, arquitectura, literatura, poesía, etc. El ensayo nunca va a pretender agotar un tema, en sí no tiene la misma estructura de algún poema o de alguna narración, que pueden llegar a un resultado definitivo; siempre estará dispuesto a la transformación, continuidad y al replanteamiento. [pic 6]

La crítica artística se desarrolla más recargada en proximidad hacia la teoría, la estética y la historia. La misión de la crítica va mucho más allá de lo que podemos imaginar, es mucho más compleja, está impregnada de problemas metodológicos y contradicciones. Su misión principal es interpretar y contextualizar, y puede entenderse como una hermenéutica que desvela orígenes, relaciones, significados y esencias. Para que la crítica se pueda desarrollar, se tiene tomar en cuenta la condición básica de que en la crítica sólo existe una teoría. Toda actividad crítica necesita la base de una teoría de donde deducir y de donde tomar referencia, y tomar en cuenta los juicios que sustentan las interpretaciones. Toda teoría necesita la experiencia de ponerse a prueba y poder ejercitarse en la crítica; la crítica en la arquitectura se relaciona necesariamente con las teorías que proceden del mundo del pensamiento, la ciencia y el arte. Solo existe crítica cuando existen versiones contrapuestas, una gran variedad de posibilidades. La crítica surge de la diversidad de interpretaciones y del pluralismo que se genera en la crisis del mundo unitario de la tradición clásica; el trabajo de la crítica parte principalmente de la duda y la indagación e, incluso, debe aceptar los errores y los cambios. Si el trabajo de la crítica acepta las evoluciones y errores en los juicios formales y estéticos, al mismo tiempo debe ser extremadamente precisa y rigurosa en todo aquello que concierne a los datos y a los hechos concretos, en todo lo que es mesurable analíticamente. Las valoraciones que se establecen en los juicios estéticos son completamente susceptibles de cambios e interpretaciones contrapuestas, pero los datos y los hechos concretos son sólo de una manera.

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