FORMACIÓN Y PREPARACIÓN DE DOCENTES

Existe dentro de la formación de profesores un proceso ineludible en el que se delimitan las pautas para crear a nuevos docentes que trabajen en las aulas, aprendiendo a utilizar nuevas técnicas de enseñanza; necesidad que con base a las prácticas frente a grupo va creciendo, y modificando los prototipos y esquemas personales con respecto al trabajo profesional.

Es primordial entonces que en las escuelas formadoras de nuevos docentes se desarrolle un riguroso análisis de la preparación y capacitación para actuar en las aulas. Por tanto, quienes se han de desenvolver en la correspondiente actividad; están obligados y deben estar comprometidos a seguir los contenidos de la formación inicial bajo una línea específica de temas a abordar, con el fin de comprender y reflexionar sobre la importancia de las propuestas teóricas; haciendo énfasis en el contraste con la práctica docente.

Un objetivo tan grande de esta formación inicial es la reconstrucción del pensamiento pedagógico; en el que es requerida una “deconstrucción de los esquemas de pensamiento y acción crítica y empíricamente consolidados” Considerando esta visión formativa, se confirman los preceptos inmersos en la misma práctica. A los alumnos en formación compete entonces tomar una actitud racional y propia con la que valoren el ejercicio de su práctica y rectifiquen el trabajo con sus alumnos.

Siempre se manifestará una conjunción de elementos implícitos que modifican enormemente el quehacer docente como los siguientes:

- Conocimientos disciplinares. Los contenidos académicos son la herramienta del desarrollo intelectual de conciencias para los nuevos docentes. En este proceso se da pauta para la movilización de saberes, permitiendo la reflexión y análisis de los mismos contenidos para su uso adecuado.

- Alumnos. Interactuar con los alumnos es el artilugio que dará pauta para consolidar una actitud profesional. A través del ejercicio de la práctica, los docentes en formación podrán adoptar un estilo particularizado de la enseñanza, integrando en nuevas metodologías diversas estrategias que habiliten el proceso de enseñanza y aprendizaje.

- Medio escolar y contexto. Dentro del aula, intervienen factores internos y externos que implican una transformación paradójica en el uso de los saberes y su desarrollo con la práctica. En las inmediaciones escolares, se desarrollan bajo ciertas condiciones las correspondientes actividades. Generalmente provienen del exterior los complejos actitudinales, cognitivos y ambientales determinantes del ciclo de vida escolar.

Sea una formación docente generalizada o específica en alguna rama cultural, cognitiva, social, etc. Los docentes requieren de la adecuada capacitación para la creación y fortalecimiento del potencial para la enseñanza. Por tal circunstancia, es importante que se analicen rigurosamente las propuestas didácticas, cuestionando incluso su efectividad al momento de su aplicación.

A partir de ello, los alumnos en formación tendrán qué formarse también bajo un enfoque de investigación constante, no sólo para buscar cuáles son las problemáticas derivadas en el proceso de enseñanza; sino también para proponer alternativas para estas situaciones. Aunado a ello, se requiere fortalecer una idea visionaria con relación a las perspectivas personales y colectivas para enseñar, para orientar e impulsar la práctica in crescendo, con beneficios personales y colectivos. Resultará más factible hacer las reconstrucciones pedagógicas necesarias.

Con relación al aprendizaje de los contenidos de la formación inicial, es necesario darles una orientación distinta bajo el marco de una nueva didáctica, donde predomine un enfoque constructivista y formativo; y destacando los rasgos más importantes que han constituido los diversos temas a hablar.

Los participantes

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