Falta De Interes

Falta de interés en el aula

En nuestro país la educación pasa por una situación muy complicada, se aplican reformas educativas, se modifican los planes de estudio, se implementan estrategias, etc., todo con el fin de lograr buenos resultados en cuanto a la enseñanza aprendizaje, pero la realidad es que esto no está funcionando, según los últimos reportes de la OCDE, México ocupa uno de los últimos lugares en esta materia. Aunque son muchos los motivos que intervienen en este contexto, por el momento centrare mi investigación en cuanto a lo pedagógico.

En este documento describiré el resultado de las observaciones que comencé a realizar el ciclo escolar pasado y que continuo en el actual, por lo cual me he podido percatar que existen muchas causas que dificultad el aprendizaje en el aula, pero algo que mucho es la “falta de interés” de los alumnos por aprender lo que el docente les enseña y del docente para con los alumnos por el bajo rendimiento que estos presentan.

Así mismo intentare fundamentar teóricamente esta problemática.

Los motivos de la falta de interés en la clase son muchos, esto afecta haciendo que no haya un aprendizaje significativo o peor aún termina siendo la causa del abandono de los estudios. En la actualidad es muy común la falta de interés de los educandos por el estudio, sobre todo si el docente no los motiva o les facilita el aprendizaje; a los alumnos hay que interesarlos en estudiar para que realicen sus trabajos satisfactoriamente.

Para los alumnos en el aula todo es tan cotidiano, que mantener la atención en la clase es algo casi imposible, por lo que terminan distrayéndose hasta con el vuelo de una mosca. Esto lleva a que cuando se les pide que realicen alguna actividad no la puedan concluir al cien por ciento y menos lo hacen correctamente, en el peor de los casos llegan a oponerse rotundamente a llevarla a cabo.

Por parte del docente en la mayoría de la ocasiones no se interesan por fomentar la participación de los alumnos través del desarrollo de actividades interactivas, ni facilita el proceso de aprendizaje con el uso de los recursos didácticos, no fomenta aprendizajes articulando experiencias y conocimientos previos con los contenidos de estudio, mucho menos relaciona el aprendizaje logrado por los alumnos con su entorno social, no inculca valores, responsabilidades y respeto por los demás, no pone atención en que no todos los niños aprenden al mismo ritmo o que algunos tienen situaciones difíciles en el hogar, en general no se preocupa en lo más mínimo por el grupo.

Por otra parte están los padres quienes por cubrir las necesidades económicas en su hogar, se desentienden de la educación de sus hijos, cuando el docente los llama a reunión porque necesita pedirles que apoyen a sus hijos para que cumplan con las tareas son muy pocos lo que asisten y por tanto el apoyo es casi nulo. Esto se agrava cuando son los mismo padres lo que limitan anímicamente a sus niños con frases que como; la escuela no sirve para nada, con que sepas leer y escribir es más que suficiente, mejor vete a trabajar para ganar dinero y apoyar en la casa.

Todo lo anterior lo expreso porque he tenido oportunidad de platicar con los niños, con el docente y además he estado presente en algunas reuniones de padres, como ya lo mencione anteriormente en el ciclo escolar pasado y en el presente.

He cierto que como he dicho esta problemática tiene muchas causas, pero es aquí donde desde mi punto de vista la tarea del maestro se debe de intensificar y buscar por todos los medios estrategias que le permitan mantener la atención de los alumno independientemente de los problemas extraescolares que tengan y así estén concentrados en la clase y por lo consiguiente que su práctica docente tenga buenos resultados.

Al respecto desde el constructivismo César Coll menciona; “se concibe al alumno como

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