LA FALTA DE INTERES en la LECTURA

LA FALTA DE INTERES en la LECTURA

Introducción.

La lectura es el proceso de significación y comprensión de algún tipo de información y/o ideas almacenadas en un soporte y transmitidas mediante algún tipo de código, usualmente un lenguaje, que puede ser visual o táctil.

La falta de interes en la lectura es un problema que viene desde ya hace varios años, en la escuela “Manlio Fabio Altamirano” esto aunado a que los niños y padres de familia no ponen de prioridad la escuela, no existe tal interés por que sus hijos se superen y aprendan y esto dificulta mucho las acciones que uno quiere emprender dentro de un salón de clases.

El observar que de 20 alumnos que estudian en un salón de clases y teniendo en cuenta que  son de los grados e 1°, 2° y 3° año y que el 70% no saben leer no tan si quiera deletrear, me hizo empezar de nuevo como si estuvieran en 1° año y no llevar a cabo las actividades marcadas en un programa, porque no tenían la capacidad de hacerlo, y  pensar en darle una solución a dicho asunto, es por esa razón que me he dado a la tarea de ocupar diversas, técnicas para poder sacarlos adelante, sin embargo debo aclarar que de este 70% solo el 50% esta leyendo y el otro 20 % se rezago .

En lo personal  nunca me había tocado tal rezago y mucho menos de niños que ya acuden a grados superiores a 1° y 2°, desde que llegue a la comunidad observe que la escuela es bidocente y que tal vez esto hace que este problema prevalezca, sin embargo creo que a pesar de ser bidocente se puede superar dicho problema teniendo los recursos necesarios para aplicarlos. La atención a los niños, es un poco restringida por los grupos que se atienden pero no es imposible saber los problemas y dificultades que sufren los alumnos.

El guiar, orientar, sugerir, llegar a despertar el interés de la lectura en las personas debe ser una de las metas más importantes de los docentes y personas del ámbito de la educación. Para conseguir este objetivo de incentivar a leer a los alumnos, el propio docente debe demostrar la satisfacción y el placer que le otorga la lectura.

Con la lectura, los alumnos, motivados e incentivados por el docente, deben desarrollar la imaginación, viajar en ese cuento que transmite el libro y dejarse llevar por la historia. Así es como los niños irán sintiendo, cada vez más, el placer que emana de la lectura.

La lectura se convierte en una actividad eminentemente social y fundamental para conocer, comprender, consolidar, analizar, sintetizar, aplicar, criticar, construir y reconstruir los nuevos saberes de la humanidad y es una forma de aprendizaje importante para que el ser humano se forme una visión del mundo, permitiéndole apropiarse del mismo y de las riquezas que contiene el mundo, no de manera tajante, sino permitiéndole al lector darle su propio significado.

Los argumentos de los padres y maestros remarcan  estos  problemas por el cual no existe el interés por aprender a leer.

Así para  trabajar dicha problemática se deben considerar los aspectos que a continuación se enumeran, para que dicho problema vaya desapareciendo.

1. Forjar el interés a los niños por la lectura.
2. Utilizar técnicas divertidas que inciten al alumno aprende a leer.
3. Relacionar a los padres o tutores de los alumnos a que se involucren en la educación  y trabajar a la par en casa como en la escuela.
4. Gestionar material didáctico de acuerdo a las necesidades de los alumnos.

Dichos aspectos ayudara a que los alumnos se sientan motivaos, y que el aprender  sea divertido y aprendan lo más rápido posible, estos 4 aspectos en mi consideración  son los más significativos e importantes hasta el momento, dejando abierto  la posibilidad de que se adhieran otro en la práctica de dicha problemático.

Para llevar a cabo y que funcione lo que estoy planteando necesito información relevante sobre el tema con autores que den su punto de vista, videos y reseñas de experiencias de otras personas, buscar libros que contengan información de la etapa de maduración de los niños y los problemas que dificultan el aprendizaje del ser humano, esto por que en ocasiones no es simplemente que un método, sino más bien un problema, psicológico que afecta el desempeño del alumno.

Así con este ensayo se recuperara información relevante para poder emprender el proyecto de investigación, se pretende que pueda tener las armas necesaria para que al final de un siclo escolar no exista, ni el 1% del rezago, descubrir por medio de la investigación técnicas y estrategias completas que ayuden a lo mencionado y que este investigación sirva para los demás docentes que cuentan con el mismo problema le sea de gran ayuda y por qué no lo modifiquen según sus necesidades.

Desarrollo.

En México enfrentamos la seria problemática de que los niños no tienen el hábito de la lectura, esto influye en su desarrollo académico y social, y a la larga se traduce en un bajo nivel cultural en el país.

La falta de interés dentro del núcleo familiar para fomentar el hábito de la lectura y la falta de difusión de actividades culturales en las escuelas, hacen que los niños se inclinen hacia actividades ociosas y productos novedosos o de moda: consolas de video juegos, televisión etc., haciendo deficiente la lectura frente al avance tecnológico.

¿Qué preferencia le da un padre a la lectura respecto a otras actividades que se realizan como parte de la convivencia familiar? “Para ellos es mejor comprar una cajita feliz o ir al cine que regalar un buen libro a sus hijos, o en dado caso se les regalan libros con bajo contenido educativo” (Valentina Domínguez, entrevista, 9 noviembre 2009).

La falta de cultura y de hábitos de lectura en México, se ha dado generacionalmente y ha provocado que cada día sea más difícil acercar a los niños a los libros, llegando a ser de los primeros países donde la lectura es prácticamente nula. Según las estadísticas que provienen de la OCDE y la UNESCO, en su estudio “Hábitos de lectura” se otorga a México el sitial 107 en una lista de 108 países estudiados: el mexicano promedio lee 2.8 libros al año.

La ola de ocio y la falta de promoción de la lectura, son factores que, entre otros, impulsan a la juventud a practicar formas más cómodas de entretenimiento dejando a los libros en último lugar.

Los padres sostienen que no es por falta de interés que no dedican tiempo a cultivar el hábito de lectura en sus hijos, y utilizan pretextos como falta de tiempo, cansancio, mucho trabajo, etc. Pero no es necesario tanto tiempo: un cuento de 15 ó 20 minutos antes de dormir, no sólo ayuda a crear el hábito en los niños, sino que les ayuda a desarrollar otras habilidades.

Sucede muy a menudo que los niños, por curiosidad, deciden hojear un libro que encuentran en su casa o en la escuela, pero si no es la literatura ideal y no tienen a alguien que los oriente y les ayude a encontrar el placer de la lectura, esto no sirve de nada y pierden el interés. Puesto que la lectura es un proceso que requiere no solamente leer las palabras escritas en el libro, sino interpretarlas, entenderlas y darles un significado, es importante que los padres estén junto al niño en sus primeras lecturas para orientarlo y ayudarlo en este proceso, pues si el niño no logra entender lo que está leyendo, se aburrirá y no querrá volver a leer en su vida.

Otro problema es que muchas veces, el niño se encuentra con un libro que le resulta aburrido y con base en éste etiqueta a los libros en general como aburridos. Por eso, cuando un niño comienza a acercarse a la lectura, debe tener opciones para elegir de acuerdo a sus gustos e intereses: “a una niña le atrae mil veces más un libro de princesas que uno de vaqueros; a un niño le atrae mil veces más un libro de monstruos que un libro de hadas… el asunto es llegar con cinco o seis libros, entonces si el niño lee un libro de monstruos y no le gustan los monstruos, puede dejarlo y tomar otro… es cuestión de darles un poco de variedad, para que ellos mismos sepan qué es lo que están buscando, qué es lo que quieren leer” (Julio César Islas, entrevista, 9 de noviembre de 2009).

Hoy en día, la falta de hábito de lectura ha constituido una negativa herencia social que, dentro de nuestro país, nos ha convertido en individuos carentes de interés por la información que nos rodea.

Iniciar al niño en el hábito de la lectura es tarea principalmente de los padres y maestros, quienes deben “ocuparse de que el niño no solamente lea los textos escolares, sino también de contribuir al comienzo del desarrollo de la afición por las obras literarias apropiadas a su edad e intereses personales” (Elizagaray, 1979, p.50).

El interés por los libros y su lectura debe empezar a muy temprana edad, el tener contacto con éstos, aun cuando no sepan leer, es indispensable, de manera que al hacerlo un acto persistente terminará por convertirse en un hábito del cual los niños se sentirán atraídos y contemplarán como método de conocimiento.

La escuela es un espacio institucional en el que obligatoriamente se enseña a los niños a leer, con el fin de instruirlos y crearles un hábito de lectura; desafortunadamente y a partir de esta premisa, la sociedad se ha encargado de deslindarse de un gran problema que hoy aqueja a nuestro país.

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