L Hombre en Busca de Sentido ensayo

Aquí explica como lo llevo al descubrimiento de la logoterapia, el mismo explica su experiencia, donde toda su familia y esposa perecieron. ¿Cómo alguien que sufrió tanto, que varias veces estuvo a punto del exterminio? ¿Cómo pudo aceptar que la vida fuera digna de vivirla?

No hay nadie como él, para juzgar nuestra existencia humana, es difícil no compararlo con Freud.
Frank se basa en ideas de Freud y tiene una gran estima hacia él.

Aquí se encuentra el punto central de existencialismo, “vivir y sufrir”, nadie puede decir en que consiste esto, depende de cada quien la respuesta a esta idea.

En el campo de concentración el objetivo es reprimir a los prisioneros, quitarles sus ilusiones y sueños.

Los prisioneros no eran más que simples personas, pero algunas descubrían su capacidad de vivir al llegar a puntos de sufrimiento altamente elevados, ¿Cómo alguien como puede despertar el deseo de vivir a pesar de diversas circunstancias?, Frank aclarara ese punto.

A diferencia de otros existencialistas europeos, Frank adopta un punto de vista de trascender la capacidad humana, de descubrir la capacidad humana sobre la vida, entorno a los problemas que llena nuestro entorno.

Este no una fantasía, es un relato compartido por uno de los sobrevivientes que múltiples personas han sufrido, esto pretende dar respuesta a ¿Cómo incidí a la vida diaria en un campo de concentración en la mente de un prisionero promedio?

En el campo de concentración cada prisionera era despojado de pertenencias, podían cambiar de nombres y oficios, los prisioneros no eran más que números, nunca hubo tiempo para consideraciones éticas o morales, solo un pensamiento mantenía a los prisioneros adelante, ver de nuevo a su familia y ayudar a salir a sus amigos de ese infierno.

Por lo general solo se mantenían aquellos prisioneros que habían perdido sus escrúpulos por la lucha de la existencia, no importaba lo que hicieran solo por salvarse, el ensayo trata de la experiencia que tuvo, donde no trabajo de psicólogo, sino tan solo como un prisionero más.

Antes de las Navidades de 1944, recibió cupones de premio (por parte de la empresa a que fueron vendidos), los cupones podían canjearse por 6 cigarrillos y perdían su valor cada 2 semanas, los cigarrillos podían ser cambiados por consumir sopa lo cual realmente era un alivio durante esa horrible experiencia, cuando a alguien veían fumarlo en vez de cambiarlo por alimentos; sabían que había perdido la voluntad de vivir y ya no tenía esperanzas.

A medida del amanecer se notaba el campo, las torres de observación, donde se arrastraban hacia el sufrimiento, el imagino horcas con gente colgando de ellas, tristemente se acostumbró muy rápidamente al sufrimiento constatado del día al día.

Su optimismo lo había ayudado a controlar sus sentimientos, lo cual lo llevo a pensar “los prisioneros se ven bien alimentados, con un buen ánimo”, hasta el último momento creyó que no todo sería tan malo, todo parecía tener un buen entorno.

Se hicieron cargo de todos los de nuevo ingreso, Auschwitz un lugar de varias riquezas depositados en varias almacenes; en espera de transportar a los demás prisioneros.

 Durante 4 días se alimentaban con un 1/8 de pan, al final parte de sus ganancias se convertían en licor.

Al parecer que todos lo que estaban con él, pensaban que todo saldría bien al final, conociendo de nuevo el exterior, al salir del tren pidieron que formaran 2 filas de hombres y mujeres; el general señalaba a izquierda y derecha, nadie sabía lo que significaba
Después le comentaron que las persona que iban hacia la derecha eran obligados a trabajar, los de la izquierda eran enfermos, o discapacitados e iban a su muerte, cerca de un 90% de los prisioneros marcharon directamente de la instalación al crematorio.

La minoría de la expedición se enteró de la verdad, él dijo que enviaron a su amigo P. lo enviaron hacia la izquierda, los prisioneros con más tiempo señalaron una chimenea llena de humo negro, ahí se encontraba él.

Para los que habían pasado la primera selección, tomaron un baño, lo cual confirmaba su idea de poder ser libres.

Desinfección: esperaron frente a un cobertizo, les dieron unas mantas donde tenían que dejar cualquier pertenencia (anillo, relojes, pulseras, etc.)

Él le dijo a una militar, que tenía un manuscrito en su bolsillo, le pidió a favor que lo dejara consérvalo porque era la obra de toda su vida; le respondió con una sola palabra “mierda” y en ese momento todo se volvió verdad, el borro de su conciencia toda vida anterior, sus compañeros permanecían de pie, asustados y sin ninguna esperanza.

A las personas que se despojaban rápido de todo eran azotados con látigos, todos fueron depilados de todas las partes de su cuerpo, después de eso fueron llevados a las duchas (habían escuchado que las duchas realmente tenían agua, era lo único seguro, su existencia)

El cambio sus lentes y cinturón por un pedazo de pan; acabando todo eso llego con un general, donde él les explico que quien trajera piedras preciosas o algún material de valor serian colgados frente a todos.

Al cabo de un rato, escucharon de nuevo el látigo y gritos de hombres torturados, iban perdiendo las ilusiones y sueños de cada uno poco a poco, ellos solo sabían que debían mantenerse con vida.

Durante la ducha bromearon e intentaron animarse, pues después de todo se estaba bañando con verdadera agua; tenía una fría curiosidad si saldría con vida o con algún otro daño o defecto, mantenían un buen estado de ánimo contra cualquier medida.

A los recién llegados tenían reservado muchas sorpresas, los médicos de ese grupo se daban cuenta que los libros mentían, pues en su experiencia se contradecía todo saber aparentemente adquirido.

Algunos utilizaban las botas como almohada, los sueños eran como un descanso de todo el horror durante el día.

Las llagas y heridas de las manos sucias no supuraban y el único medicamento era el agua, todos dormían muy juntos y profundamente a pesar del ruido, aun se hallaban en la primera fase de las reacciones psicólogos, que cada hora se preocupaban por la hora de la muerte, que cada vez perdían más las ganas de suicidarse; él se hizo la promesa de no tocarse la cerca alambra electrificada (no tenía sentido suicidarse, ya que las probabilidades de vida eran muy escazas), casi ninguno de ellos no tenía la probabilidad de llegar a la última fase.

Un amigo suyo que había llegado antes, fue a hablar con ellos para tratar de calmarlos, sus amables palabras no correspondían con la verdad. El único medio para mantenerse vivos era ser dedicados al trabajo.

“De todos vosotros él es único que debe tener la próxima selección, así que no os ‘preocupéis”

“Hay cosas que deben haceros perder la razón o no hay razón que deban perder”

La reacción de un hombre tras su internamiento en un campo de concentración, representa igualmente un estado de un estado de ánimo anormal, pero tras un análisis es completamente normal.

Segunda fase… La vida en el campo, apatía

El prisionero cambiaba de fase, donde representaba una muerte emocional, entre los barracones del campo, solo había barro y entre más se trabajaba, parecía que más se hundían en el.

Unas semanas después las  cosas cambiaban, por la mañana cuando todavía estaba oscuro, el prisionero se plantaba junto a la puerta con su destacamento para marchar; ¿y todo por qué? Porque tenía fiebre, pero se había presentado a la enfermería en un momento inoportuno, era castigado por tratar de evitar sus deberes.

Asco, piedad y horror eran emociones que ya no se sentían por todo lo presenciado durante semanas, muertos y enfermos no exaltaban, era normal ver eso todos los días. El observaba esto sin importancia, sin sentimientos, sin emociones…

Muchos prisioneros ya no percibían los golpes, ellos sufrían más con palabras, con tratarlos como si fueran animales domésticos a cumplir una tarea. Eran prácticamente discriminados, no tenían esperanza alguna de vivir o seguir trabajando por algún motivo, habían perdido su objetivo principal de conseguir la libertad que ya habían perdido.

Todos padecían edema de hambre, ni si quiera podían atar sus zapatos, los pies desnudos hinchados; cada paso dado constituía una tortura verdadera.

Después de un tiempo era muy difícil olvidar los hábitos adquiridos durante su estadio en el campo de concentración. Apenas podían dominar el arte de vivir aunque el sufrimiento sea continuo.

El sufrimiento ocupa toda el alma y conciencia, el sufrimiento humano es totalmente relativo, por ejemplo lo mas mínimo puede causar una gran alegría.

Después fueron trasladados a un campo donde no había horno, ni gas, ni chimenea; donde el ánimo se levantó claramente por la buena noticia, contaron algunas bromas. Muchos permanecieron de pie frente a la intemperie, pero eso no fue suficiente para quitar su felicidad.

Todos sufrían un tipo de hibernación donde usualmente compartían temas de interés político, religioso y cultural, donde debatían la misma información todos los días sin a veces incluso diferir o procesar información. Se plantea que todos incluso con algo tan simple logran la alegría, con familia, amor, amigos, objetos, etc.

El arte también es muy importante dentro del campo de concentración ya que se aprecia más en contraste con lo horroroso del campo. La irritabilidad se hace patente debido a la falta de sueño, cafeína y nicotina.

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