“LA INVESTIGACIÓN EDUCATIVA: CONCEPTO Y ANTECEDENTES”

“LA INVESTIGACIÓN EDUCATIVA: CONCEPTO Y ANTECEDENTES”

I.        INTRODUCCIÓN

La investigación educativa es una ciencia cuya finalidad es estudiar la realidad de como se encuentra la educación en cualquier área que en esta se dé, valorando tanto sus características, sus procesos, sus funciones, su efectividad, todo esto con el fin de obtener resultados y diagnósticos que puedan ayudar a generar conclusiones y valoraciones para la mejor toma de decisiones, generando con esto las modificaciones necesarias en un proceso continuo de mejoras fundamentales en los centros educativos.

Pero, ¿que es la investigación educativa?, a saber es una ciencia nueva cuya finalidad no es tan nueva, ya que anteriormente existía la denominada “Pedagogía experimental” que buscaba de alguna manera llegar a las mismas metas, sin embargo la gran diferencia se encuentra en que esta se enfoca más en la visión del maestro como generador del conocimiento (Calvo  y Pineda, 2006), mientras que la investigación educativa se desarrolla más por el uso del método científico con el fin de abordar investigaciones en el campo pedagógico (Munevar y Quintero, 2000).

En su origen la pedagogía experimental surge en 1822 en Estados Unidos durante el primer seminario pedagógico coordinado por J. C. Stanley cuyo objetivo principal era “crear una pedagogía científica que propiciara el desarrollo de investigaciones con una orientación práctica” (Ocaña, 2010). Cabe aclarar que el término fue acuñado por los denominados “padres” de la “Pedagogía Experimental” contemporánea, W. August Lay y Ernest F. Meumann en el documento titulado Pedagogía Experimental (Esperimentelle Pädagogik) en 1905. En los inicios el pedagogo suizo llamado Edouard Claparede que era neurólogo de profesión, fundó en Ginebra un laboratorio de psicología escolar, donde defendía una educación activa de los niños y apostaba a que el juego permitía el desarrollo de la personalidad, animando a los profesores para que observaran a sus alumnos y a partir de ahí empezar a construir sus clases, bajo el concepto de educación funcional, además publicó un libro sobre la psicología del niño y la pedagogía experimental.

Mientras en Francia, el psicólogo y pedagogo Alfred Binet realizó importantes aportes a la psicología experimental pero en especial al desarrollo educativo, siendo considerado el padre de los test de inteligencia y junto a Théodore Simon diseñaron el Test de predicción del rendimiento escolar, el cual se considera la base para los tests de inteligencia.

Así, el origen de la pedagogía experimental generó las bases empíricas de la educación, lo que permitió la incorporación del método experimental. en el desarrollo del campo educativo y su vinculación con la psicología científica. Lo que en conjunto dio como resultado que los contenidos de las obras publicadas hasta la Primera Guerra Mundial sobre pedagogía experimental no fueran de corte metodológicos, sino más bien, intentos de recopilar resúmenes de experimentos y trabajos científicos sobre materiales escolares y sobre la escuela en general .

II.        ENSAYO

El desarrollo de la investigación educativa se encuentra fuertemente basado en la Pedagogía experimental y en especial en la pedagogía experimental contemporánea la cual tiene sus bases en observaciones bastante rigurosas de los métodos educativos, el fomento y desarrolló del conocimiento científico en el alumno, además de preocuparse en la eficacia y pedagogía del proceso educativo, mediante el estudio científico de los elementos que intervienen en él, es así que esta disciplina pone los cimientos de lo que sería más tarde la investigación educativa.

Cabe aclarar que la pedagogía experimental se encuentra relacionada con la preocupación por establecer sólidas bases empíricas para la educación, la incorporación del método experimental en el campo de las ciencias humanas y la vinculación inicial con la psicología científica.

Así la pedagogía experimental contemporánea ha generado la elaboración de investigaciones basadas en el método científico y con ello ha desarrollado un vínculo estrecho entre la visión de los campos de la ciencias sociales y de la salud con la investigación del estudio de la educación, haciendo que en la mayoría de los casos esta se convierta en una ciencia experimental (es necesario decir que no siempre se cumple con esta relación).

Entendiendo que la investigación educativa tiene sus raíces en la pedagogía experimental es lógico que su desarrollo evolutivo tenga que ver con las bases de la misma pedagogía experimental, sin embargo la investigación experimental presenta ya como ciencia propia fines más ambiciosos y sobretodo muy puntuales, ya que esta ciencia tiende ha generar procesos cotidianos que sean adaptables y asumidos por los centros escolares de manera particular (sin que se pierda el contexto general)  para afrontar y solucionar sus propios retos en un proceso continuo de cambio, para esto es importante involucrar al personal académico de los propios planteles, formando así agentes de cambio que se encuentren capacitados en los procesos y actividades educativas que requieran su investigación propia con el objetivo de permitir la reflexión objetiva sobre su práctica educativa y así generar las mejoras necesarias. Ya que la investigación educativa tiene como obligación el estudiar las actividades educativas en un contexto local y en cualquiera de sus manifestaciones concretas, para lo cual es importante diseñar un planteamiento que contemple las características, el funcionamiento, la idiosincrasia y los posibles efectos que se puedan obtener, para obtener conclusiones, diagnósticos y valoraciones que ayuden tomar las decisiones más adecuadas o a realizar las modificaciones necesarias en el proceso. Así se puede decir que para formar un investigador en el área educativa tiene que poseer forzosamente conocimientos sobre el quehacer académico, y que presente actitudes asertivas que promuevan y que faciliten de manera sistemática, el acceso al conocimiento y el desarrollo de las habilidades, hábitos y actitudes que demanda la práctica de investigación.

En México los grandes cambios en materia educativa surgieron al término de la Revolución Mexicana, la cual acabó con algunas instituciones científicas, pero fortaleció muchas y creo nuevas instituciones cono la Dirección de Estudios Geográficos y Climatológicos (1915), y la Escuela de Química (1916); se mantuvo el Observatorio Astronómico. Se crea en la Universidad Nacional como tal a partir de las reformas educativas impulsadas por Justo Sierra (que desde 1881 había propugnado por la creación para revivir a la difunta Real y Pontificia Universidad de México) y que fue fundada en 1910 como Universidad Nacional de México. Ya en 1936 que se crea el Instituto Nacional para la Educación cuyo objetivo fue llevar a cabo investigaciones científicas en educación (Rosas, 2011), sin embargo es durante los años 50 que se fundan, dos instituciones clave para la Investigación Educativa, el Centro Regional para la Educación Adulta y el Alfabetismo Funcional de América Latina (CREFAL) y en 1956 que se crea el Instituto de América Latina para la Comunicación Educativa (ILCE) aunque la investigación educativa no fue su prioridad; asimismo en 1960 se funda el Centro de Investigación y Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional y ya en 1963 Pablo Latapí Sarre creó la fundación del Centro de Estudios Educativos que generó investigación educativa enfocándose en diagnosticar el sistema educativo nacional, además de llevar a cabo proyectos que promovían la investigación de la educación donde una de las principales acciones en esta promoción de la investigación era incluir el trabajo de los docentes (Colina, 2011; Martínez Rizo, 1996, en Rosas, 2018), durante esta época se crea el primer doctorado en educación dentro de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

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