La Escuela Secundaria

¿Cuáles deberían ser las actitudes de la escuela, para promover un buen aprendizaje? ¿Qué relaciones deberían de existir entre maestro- alumno dentro y fuera del aula? ¿Cuáles deberían ser los conceptos que se necesitarían estudiar en los contenidos temáticos? Y, ¿Cuál es la forma en que se pueden aprovechar los conocimientos previos de los alumnos? En este pequeño texto les diré mi opinión y el porqué de mi punto de vista, así, lograr que usted, tome su punto de vista y realice un debate de opiniones en su interior; lo más importante de este escrito es que usted este convencido de que las preguntas anteriores sean resueltas, y ¿por qué no? Que usted adquiera nuevas preguntas acerca del tema e investigue…

Comenzare parafraseando con la autora Sylvia Schmelkes quien dice que una buena educación va escoltada por la calidad de la misma, basándose en cuatro componentes que son: la relevancia, eficacia, equidad y eficiencia; todos estos relacionados con los contenidos escolares, por supuesto que es algo razonable decir que mientras los contenidos sean relevantes para el alumno, existirá una fuerza natural que incite al alumno a buscar y adentrarse en la información del contenido, también esté tendrá el interés de saber cómo aplicar (en su realidad) el conocimiento que se le esté otorgando. Al tener este interés por el contenido, será más posible lograr que el alumno adquiera el conocimiento, logrando el segundo componente que es: La EFICIENCIA, al tener una escuela con conocimientos relevantes para la comunidad escolar y futura comunidad escolar, así como una eficiencia en la adquisición de estos saberes, la escuela tendrá una cantidad mayor de escolares que ingresen y quieran ingresar.

Para el tercer componente es necesario tener en cuenta su concepto, citando pues, en este caso la definición de equidad que viene en un diccionario de encarta 2009 que dice: EQUIDAD: (Del lat. aequĭtas, -ātis). f. Igualdad de ánimo. || 2. Bondadosa templanza habitual. Propensión a dejarse guiar, o a fallar, por el sentimiento del deber o de la conciencia, más bien que por las prescripciones rigurosas de la justicia o por el texto terminante de la ley. || 3. Justicia natural, por oposición a la letra de la ley positiva. || 4. Moderación en el precio de las cosas, o en las condiciones de los contratos. || 5. Disposición del ánimo que mueve a dar a cada uno lo que merece. Teniendo ya los varios conceptos, tomaremos en este caso solo la quinta definición, que nos quiere decir en otras palabras: equilibrar y dar las mismas oportunidades a todos; en este caso, la escuela está obligada a darle más al que más tiene, para igualar las posibilidades en sus alumnos, y no se aparezca el problema de que el alumno no puede desenvolverse bien por falta de algunos instrumentos esenciales; por último, pero igual de importante tenemos a la eficiencia, la cual se refiere a el tiempo en que se logran los conocimientos en los alumnos. Ya teniendo esto en mente (lo que debe tener una buena escuela), podemos ir dando respuesta a cada pregunta expuesta anteriormente.

Entones, ¿Cuáles deberían ser las actitudes de la escuela, para promover un buen aprendizaje? Primeramente se debe lograr que el alumno vea a la escuela como un lugar donde quiera estar, donde se sienta en confianza, querido, y protegido, así como un lugar donde pueda expresarse sin temor. Ya dentro del aula, que lo vea como el lugar donde aprenderá cosas relevantes para su vida personal, escolar y social, claro, primeramente le debemos hacer ver al joven que lo que se le enseña es importante para ÉL, porque él es el elemento más importante dentro del aula. También otra actitud que se debe tomar en el aula, es la de que el maestro deje que el alumno construya su propio conocimiento, así es, CONSTRUYA POR SI MISMO, para hacerle sentir que es inteligente, responsable, que él puede lograrlo, y también para

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