Lectura conocimiento didáctico del contenido y didácticas específicas

Lectura: Conocimiento didáctico del contenido y didácticas específicas

El artículo de Bolívar basado en los estudios de Shulman (1986), en los cuales se reivindica la profesionalidad del docente, como disciplina que va más allá de la técnica y, en los que el docente debe poseer unas habilidades, competencias y conocimientos para desarrollarla, Shulman también subraya la importancia del conocimiento del contenido y la capacidad del docente de transformarlo en significativo al alumno. Este conjunto de competencias las llama Pedagogical Content Knowledge, traducido, por sugerencia de Marcelo (1993), por Conocimiento Didáctico del Contenido que según Bolívar (2005) es “una especie de amalgama de contenido y didáctica”, un modelo que pretende describir cómo los profesores comprenden la materia y la transforman didácticamente en algo “enseñable”. Concepto parecido al que en la pedagogía francesa se le ha denominado la transposición didáctica, la capacidad de transportar el saber académico a un nivel didáctico para transformarlo a unas necesidades específicas, significativas, asimilables y comprensibles para los alumnos. En las investigaciones de Shulman, el docente, además debe tener un conocimiento específico del contenido, ser especialista.

Estas investigaciones reflexionan acerca de que, si los profesores no poseen conocimientos adecuados del contenido de su docencia, pueden confundir a los alumnos con conocimientos erróneos o incompletos.  Bolívar (2005) apunta que el conocimiento didáctico del contenido (CDC) frecuentemente puede entrar en contradicción con el que viene expresado en los libros de texto y que, en su trabajo cotidiano el profesor con CDC, como agente de desarrollo curricular, establece una relación entre su conocimiento, el expresado en el texto escolar y el contexto de su clase y, ello le lleva frecuentemente a considerar incompleto el texto, completarlo con otros, o simplemente considerar determinados aspectos como “mal planteados”. Recrear o reconstruir el contenido de acuerdo con las perspectivas propias y el contexto de la clase, convirtiéndolo en “enseñanza” sería realizar el CDC. Así pues, el saber del docente influye en sus metodologías didácticas, en el resultado final que percibe el alumno y por ende, en la calidad de la enseñanza.

Aunque Bolívar (2005) propone ser precavidos con propuestas –como la de Shulman– que, quieren incrementar el “profesionalismo” en la Enseñanza, apunta que quizás sea necesario en USA, pero que no sería conveniente para lo que demandan de los nuevos profesores en España: trabajo colegiado, que establece relaciones transversales más allá de las divisiones disciplinares, con un papel educativo, consciente de la dimensión institucional, social y política de sus prácticas pedagógicas.

Finalmente quiero mencionar, que con la lectura del artículo y los apuntes dibuja una idea más profunda de la figura del docente y que, si enlazamos el artículo con las comunidades de aprendizaje y la formación permanente, la idea del docente como profesional de la enseñanza adquiere un sentido más completo.

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