Los juegos y la tecnología ¿Nuevos modos de subjetividad?

Los juegos y la tecnología ¿Nuevos modos de subjetividad?

Desde autores clásicos del Psicoanálisis que teorizaron sobre el jugar de los niños, como Sigmund Freud y Donald Winnicott, que nos permiten dar cuenta del lugar que tiene el juego en el trabajo psíquico que define a la infancia,  contribuyen a pensar la problemática presentada, que, desde distintos marcos teóricos, proponen al concepto de infancia como construcción social y la influencia de ello en lo que se entiende por “niño”, permitiendo entonces, complejizar la mirada sobre la infancia en la actualidad, abriendo preguntas sobre el impacto de las prácticas socioculturales en la constitución subjetiva.

El desafío se presenta a la hora de preguntarnos por el modo y uso de las nuevas tecnologías, de manera que podamos contribuir a pensar la actualidad del jugar en pos del trabajo psíquico que conlleva.

Entonces. . .

¿Jugar en el parque es tan importante para el desarrollo físico, así como la tecnología en el desarrollo cognitivo?

¿Qué tanta creatividad les quita la tecnología a los niños o cuánto beneficio les aporta el ejercicio y el aire libre?

Son algunos interrogantes que abren el debate sobre la necesidad de equilibrar y compartir actividades en las que los niños crezcan ejercitando su cuerpo.

Según investigaciones realizadas en países desarrollados mostraron que en el primer año de vida no había diferencias en el desarrollo afectivo motriz y cognitivo entre niños de diferentes niveles socioculturales, pero ya en el segundo año los grupos desventajados socioculturalmente lograron un desarrollo cognitivo significativamente inferior al promedio.

Estas diferencias significativas en el primer año de vida podrían relacionarse con la construcción del objeto subjetivo y la omnipotencia ligada al deseo del mundo, es decir, en la construcción del yo, pero cuando el infante sale de la omnipotencia y se encuentra con el objeto real la realidad material y la estimulación singular tiene efectos significativos.

La falta de tiempo para jugar con nuestros niños hace que los adentremos también al mundo tecnológico, muchas veces nos resulta más cómodo facilitarles a nuestros hijos un celular, tablet, o demasiada televisión ya que de este modo están entretenidos y nosotros aliviados.

En esta medida la falta de juego en la vida de un niño tiene repercusiones en su desarrollo en general, Piera Aulagnier plantea la actividad como el equivalente psíquico del trabajo de metabolización orgánico que consiste en transformar lo “no propio, en propio”; estos estímulos externos tienen un potencial traumatogenico debido a que la capacidad metabolizadora aun esta en desarrollo.

En este sentido Wilfred Bion desarrolla el concepto de función de reveri, este autor considera que el infante humano nace con elementos desligados dominados por la pulsión de muerte que el contacto amoroso con la madre debe transformar, es decir, la madre le ayudara a construir su mundo interno. El adulto mediador de estímulos y ligador de emociones, es quien acompañara a la construcción subjetiva brindando causa y afecto.

Andre Green propone que es el placer-displacer que está en el juego el que permite el desarrollo progresivamente de herramientas psíquicas que harían de prolongaciones artificiales de sentidos, capaces de influir en la organización perceptiva que al comienzo es bilógica.

...