Ontología de la educación

ONTOLOGÍA DE LA EDUCACIÓN

PROYECTO INTEGRADOR

Para toda la sociedad mexicana es evidente que el sector educativo tiene grandes retos, más aún con la pandemia y la educación a distancia. Tomando en cuenta que el Plan Sectorial de Educación en México 2019-2024 menciona diferentes objetivos por lograr y que a continuación presento:

1) Garantizar el derecho de la población en México a una educación equitativa, inclusiva, intercultural e integral, que tenga como eje principal el interés superior de las niñas, niños, adolescentes y jóvenes.

2) Garantizar el derecho de la población en México a una educación de excelencia, pertinente y relevante en los diferentes tipos, niveles y modalidades del Sistema Educativo Nacional.

3) Revalorizar a las maestras y los maestros como agentes fundamentales del proceso educativo, con pleno respeto a sus derechos, a partir de su desarrollo profesional, mejora continua y vocación de servicio.

4) Generar entornos favorables para el proceso de enseñanza-aprendizaje en los diferentes tipos, niveles y modalidades del Sistema Educativo Nacional.

5) Garantizar el derecho a la cultura física y a la práctica del deporte de la población en México con énfasis en la integración de las comunidades escolares, la inclusión social y la promoción de estilos de vida saludables.

6) Fortalecer la rectoría del Estado y la participación de todos los sectores y grupos de la sociedad para concretar la transformación del Sistema Educativo Nacional, centrada en el aprendizaje de las niñas, niños, adolescentes, jóvenes y adultos.

Personalmente considero que se plantean grandes retos orientados al nivel medio superior. Por ejemplo, en relación a lograr la equidad de manera efectiva deberán de atenderse de fondo muchas otros aspectos, ya que en nuestro país se viven grandes diferencias sociales, diversas realidades que se reflejan en marcadas desigualdades por género, recursos económicos, origen étnico, acceso a internet, religión, etc.

Por otro lado también se plantea la educación de excelencia, para lo cual estamos aún bastante lejos. Para ello será necesario renovar desde los programas y contenidos hasta las categorías en las que se clasifican o separan los aprendizajes tomando en cuenta el contexto de las y los estudiantes, así como sus necesidades actuales. También considero que la preparación, la actualización de las y los docentes deberá ser prioridad para ofrecer nuevas y mejores formas de enfrentar las dificultades.

Indiscutiblemente la participación de la comunidad tendrá que ser fundamental, ya que los retos actuales requieren atenderse desde todos los frentes, gobierno, sociedad y familias.

También se busca reducir la deserción y el rezago estudiantil por cuestiones económicas,

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