Planificacion

La planificación de la instrucción

Uno de los aspectos fundamentales que contribuyen al logro de una enseñanza de calidad es la preparación de un plan de acción que articule de modo racional los diversos componentes de la tarea didáctica a cumplir durante el desarrollo de una unidad curricular o de una unidad temática en particular.

En todo caso no basta conocer la conjugación de los elementos del plan ni las cualidades que éste debe poseer; es necesario cumplir con pautas técnicas de concreción, de interrelación, de organización y de evaluación para tener el éxito esperado en la consecución de los objetivos propuestos.

Como se aprecia, la planificación tiene una significativa importancia, puesto que da la oportunidad al docente, como diseñador de la instrucción, de tomar una serie de decisiones que le permitan prever posibles contingencias en el ámbito didáctico.

Para que la planificación como proceso se concretice en la práctica se hace necesario su instrumentación mediante una herramienta operativa denominada Diseño Instruccional, concebido como el proyecto, plan de acción, programa de asignatura, entre otros términos, a través del cual la teoría docente se perfila sistemáticamente en la praxis educativa, partiendo de la realidad concreta del estudiante y de sus circunstancias de aprendizaje (necesidad instruccional, características de los usuarios) con el propósito de hacer posible el logro de un conjunto de objetivos, sean estos generales, terminales o didácticos; por medio del establecimiento de un conjunto de contenidos curriculares (conceptuales, procedimentales y actitudinales) y de la selección y organización adecuada de estrategias instruccionales, de enseñanza o didácticas, constituidas éstas por las técnicas, actividades y recursos materiales específicos para llevar a cabo el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Precisamente, son estos elementos los que configuran un diseño instruccional, el cual se concretiza de manera más operativa mediante otro instrumento de planificación denominado Plan de Estrategias Didácticas o Plan de Clase en el que se especifican detalladamente las estrategias preinstruccionales, coinstruccionales y postinstruccionales, (Díaz Barriga, 2002), las actividades y los recursos didácticos, en atención a los momentos de la instrucción, considerando además como otra variable fundamental la administración del tiempo.

Es oportuno significar que resulta indispensable, al momento de diseñar la instrucción, una relación directa entre finalidad educativa (Qué y Para qué) y la práctica instruccional para alcanzarla (Cómo) en el encuentro didáctico profesor-alumno, a los fines de evitar que el plan instruccional se convierta, como lo señala Nerici (1984), en una “colcha de retazos” sin mayor significación para el estudiante.

COMPONENTES ESTRUCTURALES DEL DISEÑO INSTRUCCIONAL

No existe un acuerdo unánime sobre los diversos elementos que componen un diseño instruccional, y escoger uno a otro depende del modelo curricular adoptado para explicar el proceso educativo. Sin embargo, resulta útil contar en cualquier institución con un modelo que permita la concreción del micro currículo. De acuerdo a las nuevas tendencias en materia de planificación instruccional y a los lineamientos dirigidos desde la Dirección de Currículo, se pueden considerar como componentes básicos del diseño instruccional los siguientes:

-Identificación

-Fundamentación

-Objetivos Didácticos

-Contenidos Curriculares

-Estrategias Didácticas

-Recursos Didácticos

-Evaluación del Aprendizaje

-Referencias.

A continuación, se incluye la descripción de cada uno de los elementos mencionados:

1.- IDENTIFICACIÓN DEL DISEÑO INSTRUCCIONAL:

En todo diseño instruccional deben estar presentes una serie de datos que identifican a la unidad curricular. Así se tiene:

a) Datos generales: permiten identificar de inmediato al diseño instruccional y situarlo dentro del contexto académico del que forma parte. La información solicitada corresponde al: Membrete de la Institución, Nombre de la Unidad Curricular, Nombre del Área Académica, Nombre del Programa Académico, Departamento de adscripción.

b) Datos referenciales: son aquellos que sirven de orientación normativa curricular, siendo los siguientes: Componente o Eje Curricular al cual pertenece, Grado, Sección, Carácter de la Unidad Curricular (obligatoria/electiva), Requisitos, Número Total de las Horas Semanales, Número de Unidades de Créditos, Profesor Responsable, Fecha de Elaboración, Fecha de Aprobación del diseño instruccional.

Es posible que muchos de los datos solicitados sean desconocidos por parte del profesor planificador instruccional.

2.- FUNDAMENTACIÓN:

Se refiere a los elementos que sirven de apoyo a la inclusión de la unidad curricular. Dentro de la fundamentación se consideran cuatro elementos importantes, que aunque no deben ser subdivididos y señalados como tal en el texto, al momento de redactarla, deben verse presentes dentro de la misma:

a) La justificación de la Unidad Curricular: esta primera parte debe dar respuesta a la importancia de la unidad curricular para el desarrollo científico, tecnológico y social en la que está inserta; relación con el perfil profesional y materias afines; propósito de la unidad curricular; necesidades instruccionales a las que dará respuesta considerando conocimientos, habilidades, destrezas y actitudes previas, a fin de determinar niveles de competencias de entrada y salida y las características de la audiencia (culturales, lingüísticas, socio-económicas, educativas, de estatus ocupacional, actitudes, intereses, expectativas).

b) Naturaleza de la unidad curricular: esto equivale a su característica resaltante y altratamiento de que será objeto (teórico, práctico, teórico-práctico, básico, metodológico o instrumental), esto no se refiere a lo que está dispuesto en los datos de identificación del diseño, sino a la metodología instruccional que se asumirá en la sesiones de clase; es decir, describir cómo se llevará a cabo el encuentro para la construcción del aprendizaje. Aquí también debe definirse la modalidad de aprendizaje (presencia y qué tipo de estrategias se emplearán para lograr esto).

c) Orientación de la unidad curricular: en esta parte se debe hacer mención fundamentada del o de los enfoques filosófico, epistemológico, ideológico, psicológico o de cualquier otra índole alrededor del cual se articulan los otros elementos del diseño instruccional (objetivos, contenidos, estrategias y evaluación) en respuesta a los fines de la institución y al tipo de persona que se desea formar.

Es importante señalar que al momento de definirlos enfoques psicológicos (conductista, cognitivista, constructivista y/o ecléptico) éstos deben estar estrechamente relacionados con la conformación de los objetivos instruccionales y los contenidos procedimentales y actitudinales, de manera tal que pueda verse una congruencia entre los mismos, ya que en muchas oportunidades, por ejemplo escogemos como enfoque la teoría del Aprendizaje Significativo propuesto por Ausubel y cuando revisamos los objetivos y los contenidos nos damos cuenta que en ninguna parte se consideran procedimientos didácticos que lleven al alumno al desarrollo de tal tipo de aprendizaje.

En este sentido, vale la pena considerar que esta separación de elementos obedece sólo a razones didácticas para una mejor explicación de los mismos, por tanto, su redacción deberá elaborarse de forma integral.

OBJETIVOS INSTRUCCIONALES:

Constituyen los resultados de aprendizaje como producto de un proceso de enseñanza sistemático e intencional, es decir, expresan las capacidades que los alumnos deben alcanzar desde los diferentes ámbitos o dimensiones del conocimiento (saber, hacer, ser y convivir). Los objetivos responden a enfoques psicológico-instruccionales, de los que dependerá su formulación, el establecimiento de pautas o estrategias para el aprendizaje y la enseñanza, la selección de recursos didácticos y la organización de la evaluación del aprendizaje. Para su formulación se hace necesario considerar la estructura epistemológica de la unidad curricular, la cual posibilita la identificación y estructuración de los contenidos curriculares a incluir en el diseño, mediante análisis de contenido o de naturaleza conceptual o análisis de tareas o de naturaleza procedimental. Considerando los diferentes niveles de concreción curricular (macro, meso y micro curricular), se pueden diferenciar diversos tipos de objetivos:

a) Objetivos Generales o de primer orden: Que declaran lo que los participantes deben saber, saber hacer o sentir al completar el diseño instruccional, es decir, son enunciados que definen las intenciones que se han de conseguir a lo largo del desarrollo de la unidad curricular. Deben ser formulados como capacidades o competencias profesionales en atención a estrategias cognitivas, conocimientos científicos y a las demandas que se le plantean al profesional en su ámbito laboral.

b) Objetivos didácticos o de segundo orden: También llamados de unidad temática, terminales o habilitantes, se definen como proposiciones que precisan las capacidades o competencias que un estudiante debe demostrar al finalizar el desarrollo de una unidad temática, entendiéndose capacidad como la potencialidad para realizar una actividad determinada

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