Preescolar

CARACTERISTICAS FISICAS

Durante esta etapa el aumento de peso y talla son relativamente constantes, aproximadamente de 2 kg y de 6 a 8 cm/año, respectivamente. Un aumento mensual de peso de 160 a 200gr se considera normal.

La cara tiende a crecer proporcionalmente más que la cavidad craneal. El cerebro alcanza 85 y 90 % del tamaño del adulto a los 4 y 6 años, respectivamente, el perímetro cefálico aumenta 1 cm/año y el perímetro torácico alrededor de 2cm/año. La mandíbula tiende a echarse como preparación a la erupción de los dientes definitivos.

Ganglios linfáticos sufren un crecimiento profundo durante los primeros años, debido a las constantes infecciones a las que se exponen los niños, deben ser palpables o mayores de 1cm ni dolorosos. Al final de los 3 años el tejido adenoides alcanza su tamaño máximo y va perdiendo importancia. Las tonsilas palatinas siguen creciendo hasta alcanzar su tamaño máximo a los 7 años después se van atrofiando con lentitud. Los senos para nasales se desarrollan en la etapa preescolar. Los senos esfenoide aparecen a los 3 años , los frontales de los 3 a 7 años y los maxilares a los 7 años.

Mayormente los ojos de los preescolares son hiperòpicos (la imagen de un objeto colocado a distancia cae detrás de la retina). Sin embargo esta no tiene importancia porque los ojos se acomodan con facilidad, aumentando el poder del cristalino para refractar el poder de luz. A medida de que los ojos crecen en longitud y cambian durante la niñez la mayoría de los niños contrae emetropía (la imagen de un objeto distante cae sobre la retina). El astigmatismo (reflexión desigual atreves de los diferentes meridianos de los ojos) es otra variación del crecimiento de los ojos. La visón parece ir mejorando hasta los 6 años cuando casi todos los niños tienen una visión de 20/20. Entre los 4 y 5 años de edad, algunos niños presentan la llamada “visión en espejo” que los hace producir dibujos o letras invertidas o usar juguetes en forma rara. Esta visión es transitoria y desaparece a los 6 años. El control vasomotor sobre la dirección oblicua no se obtiene hasta los 6 años de edad, por esto los dibujos de líneas oblicua todavía son imperfectos.

El tórax aumenta en amplitud, en respuesta a las exigencias fisiológicas, a medida que los niños crecen y se vuelven más activos; su diámetro antero posterior corresponde al 80 o 76 % su diámetro transverso. El tejido muscular aumenta durante el periodo preescolar, y entre los 5 y 6 años de edad del 60 al 75 % del incremento del peso se debe al incremento del peso muscular.

En los prescolares el cansancio muscular se recupera rápido que en los adolescentes y en los adultos, pero se presenta más fácilmente. Esto explica la dificultad del niño o niña para mantener el cuerpo en determinada posición. Por tanto, en la conducción de los preescolares hay que tener en cuenta:

• Los periodos de actividad deben de ser cortos y seguidos de periodos de descanso, especialmente cuando los niños son pequeños

• La tensión se fija en periodos más cortos y los cambios de postura se hacen más necesarios mientras menos edad tengan los niños.

La postura de los niños preescolares se caracteriza por cierta pronación de los pies (los talones hacia afuera), con separación de ambos pies y acercamiento de la rodilla (genum valgum) que aumenta a los 3 o 4 años y disminuye de los 6 a 7 años. La lordosis fisiológica y el abdomen prominente tienden a desaparecer al llegar a los 4 años junto con las almohadillas de grasa situada debajo de los arcos plantares. Hematológicamente, la edad preescolar se caracteriza por altas cifras de leucocitos (6000 a 12000 mm3), con predominio linfocitario

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