Que Son Los Biofertilizantes Microbianos

Que son los Biofertilizantes Microbianos

Los Biofertilizantes más comercializados en la actualidad, son inocuos para el hombre y el ambiente, y la mayor respuesta agronómica se ha encontrado en suelos de baja fertilidad. Son más económicos y de fácil transportación, en comparación con los fertilizantes de origen químico sintético que utilizan los productores.

Existen varias presentaciones para su comercialización. Los más comunes son los que se aplican a la semilla y van impregnados en turba (materia orgánica de líquenes), pero también pueden distribuirse en suelo molido, medios de agar, caldos nutritivos, liofilizados, o en medios de aceite.

Los microorganismos que se utilizan en la agricultura, como es el caso de las bacterias, pueden impregnarse en los soportes elegidos y éstos pueden estar o no esterilizados.

El soporte o transportador donde se impregnan las bacterias deben tener la capacidad de almacenar la humedad, además de tener uniformidad química y física, no se tóxico, de fácil esterilización y debe ser biodegradable.

Además de las bacterias fijadoras de nitrógeno como Azospirillun, Rhizobium, Bradyrhizobium y los hongos micorrízicos que transportan fósforo y otros nutrimentos y agua, también se utilizan como Biofertilizantes los microorganismos Azotobacter, Anabaena, Frankie, Bacillus y Pseudomonas entre otros.

Se han utilizado en diferentes cultivos anuales y perennes y en diferentes sistemas de manejo debido a sus importantes y diversas funciones en la agricultura, como es la nutrición, especialmente con nitrógeno y fósforo.

Formas De Aplicación Y Cantidades

Los Biofertilizantes microbianos pueden aplicarse a la semilla, el suelo o el material vegetativo. En cultivos anuales los beneficios de la simbiosis se expresan en plazos muy breves, de 20 – 30 días después de la biofertilización, pero en cultivos perennes en vivero hasta después de tres meses. La forma más precisa de introducirlos es mediante su adhesión a las semillas.

Para la aplicación a la semilla, se sugiere extenderla en un plástico y asperjar sobre la misma un adherente y mezclar; es importante verificar que toda la semilla quede “pegajosa” e inmediatamente agregar el biofertilizante. Si no queda pegajosa, se puede mejorar agregando agua con azúcar. También puede hacerse en una carretilla o una revolvedora elaborada con un tambo.

Fotos: Aplicación de adherente y forma de revolver la semilla

Los Biofertilizantes generalmente tienen la cantidad de microorganismos suficientes para aplicarse en una hectárea de cultivo que tenga semillas de tamaño mediano, como maíz y frijol a razón de 20 a 25 Kg./ha, contenidos en presentaciones de 1 kg, para el caso de la micorriza y de 400 g para las bacterias. Con base a esta información se pueden hacer los cambios para otras semillas, como las semillas pequeñas de trigo, cebada y avena. En estos casos se recomienda utilizar tres bolsas de cada microorganismo por hectárea.

En otros cultivos que requieren etapas de vivero o semillero, como cacao, cafeto, mango o rambután, la cantidad de biofertilizante por aplicar es variabble y depende del número de semillas a biofertilizar. En todos los casos se debe cubrir la superficie de la semilla con el biofertilizante y al momento de depositar la semilla en al bolsa, agregar en el fondo del hoyo gasta 5 g de biofertilizante que puede ser de un microorganismo o la mezcla de dos o mas.

Como una recomendación general, podemos considerar una proporción de biofertilizantes correspondiente al 4% del peso de la semilla.

Las aplicaciones al material vegetativo, especialmente en gramíneas forrajeras tropicvales ques e reproducen por estolones, como estrella de África Cynodon plectostachyus, Brachiaria spp Griseb y Digitara spp Haller entre otros, se asperja el adherente sobre el material vegetativo

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