Tema: trabajo práctico: “Reparar la Escritura. Didáctica de la corrección de lo escrito.” Daniel Cassany..

ISFD. ERNESTO SÁBATO

Alumna: Gamarra Cintia

Profesor: Franco Sebastián

Cátedra: Residencias Pedagógicas.

Tema: trabajo práctico: “Reparar la Escritura. Didáctica de la corrección de lo escrito.” Daniel Cassany.

El autor de la obra es escritor, docente investigador universitario español, licenciado en filología y doctor en filosofía y letras. Escribió varios libros los que en su mayoría abordan la temática de la lectura, escritura y técnicas didácticas que favorecen el proceso enseñanza- aprendizaje.

En el libro “Reparar la escritura. Didáctica de la corrección de lo escrito” el autor centra su atención en reparar los errores de redacción (faltas de ortografías, frases perdidas; párrafos rotos, etc) en docentes y alumnos, así como también en los diversos aspectos de la corrección en el ámbito escolar, está dirigido a los maestros y puede ser aplicada como estrategia principalmente en alumnos de primaria y secundaria.

Aporta una nueva visión en el campo de la corrección utilizando el modo procesal el cual se centra en la corrección durante el proceso de la escritura, en la redacción y la forma del texto utilizando de esta manera a la corrección para mejorar esa escritura lo que a su vez ayudará de manera positiva al alumno a mejorar sus futuros escritos.

Como punto de partida el autor aborda los roles que cumplen alumno y maestro en la corrección desde el enfoque tradicional y que desde la mirada de Cassany deberían cambiar.  Desde el enfoque tradicional es el maestro quien decide qué, cuándo y para qué se escribe, es quién corrige todos los errores y el que tiene la obligación de hacerlo poniendo una nota, a su vez el alumno asume un rol pasivo, limitado, sigue las instrucciones y no esta capacitado para corregirse o para corregir a sus compañeros. Con respecto a esto el autor plantea que este modelo es el causante de la frustración de los alumnos y de una manera errónea de aprender, la falta de confianza que se pone en el alumno lo limita a escribir lo hace con miedo al error y por ende de manera automática.

Para poder cambiar con este modelo, el autor propone:

-Informar al alumno sobre su texto.

-Conseguir que lo modifique antes de llegar al resultado final.

- Mejorar sus escritura.

- Cambiar sus hábitos al escribir para tomar una actitud positiva ante la corrección.

Para explicar esta nueva visión acerca de la corrección, a lo largo del desarrollo del texto aparecen interrogantes tales como: ¿ ¿Qué errores corregir?, ¿Qué textos corregir?, ¿Quién tiene que corregir? ¿Cuándo es preciso corregir?; ¿Cómo hacer más atractiva la corrección?, ¿Cómo corregir?  Respondiendo esto, el autor sugiere que deben corregirse algunos aspectos de la escritura tales como:

normativa (ortografía, morfología y sintaxis y léxico), cohesión (puntuación, nexos, anáforas, etc), coherencia (selección de la información, progresión de la información, estructura del texto, estructura del párrafo), adecuación (selección de variedad, del registro), otros (deposición del texto en la hoja, tipografía, estilística, etc). Pero no se corrigen (o no son tan importantes) aspectos como: la caligrafía, la opinión, el estilo y el grado de interés. Es necesario centrarse en los borradores o versiones inacabadas del texto es decir en el proceso de la escritura y no solo en los textos terminados, ya que los alumnos no quieren volver a revisar el trabajo una vez que se les ha puesto una calificación.

El autor está de acuerdo que el principal corrector es el maestro pero a su vez plantea que existen nuevos mecanismos de corrección que pueden ser implementados para conseguir mejores resultados como por ejemplo; la auto corrección, la corrección a un compañero o entre parejas. Otro aspecto que menciona como relevante es el tiempo, el docente debe corregir de manera inmediata los trabajos en proceso y dar una devolución  para que ellos puedan evidenciar cuáles fueron sus errores y reflexionar acerca de los mismos. Otra manera de convertir la corrección en algo más atractivo es compartiendo las responsabilidades con los alumnos, marcando no solamente los aspectos negativos sino también los positivos y que los escritos que se pidan no sean solamente académicos sino también originales, de la vida cotidiana, lo que hará que ellos escriban más abiertamente y con mayor entusiasmo.

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