Teoría Del Conocimiento

La teoría del conocimiento, es una disciplina filosófica. Para comenzar su estudio, resulta necesario comprender primeramente el concepto de filosofía. La palabra filosofía procede de la lengua griega y vale tanto como “amor al sabiduría”, o bien, “deseo de saber, de conocimiento” . La esencia de la filosofía ha sido un tema de amplia discusión, entre diferentes autores, y diferentes épocas; desde la antigüedad, con Platón y Aristóteles, hasta Schelling y Hegel, en el S. XIX. Si quisiéramos resumir las diferentes reflexiones, podríamos, decir pues, en conclusión: “La filosofía es un intento del espíritu humano para llegar a una concepción del universo mediante la autorreflexión sobre sus funciones valorativas teóricas y prácticas.”

Una vez entendido el concepto, es de nuestro interés, situar la teoría del conocimiento en el sistema de la filosofía. “Suele dividirse la teoría del conocimiento en general y especial. La primera investiga la referencia de pensamiento al objeto en general. La última hace toma de investigaciones críticas los principios y fundamentos en que se expresa la referencia de nuestro pensamiento a los objetos.” Expondremos de forma general los rasgos más importantes de cada división.

Teoría general del conocimiento

La teoría del conocimiento es una explicación e interpretación filosófica del conocimiento humano. Una exacta observación y descripción debe proceder a toda explicación e interpretación, este método es conocido como fenomenológico, y busca aprehender la esencia general en el fenómeno concreto, en este caso en particular, se hallan frente a frente la conciencia y el objeto, el sujeto y el objeto. El conocimiento se presenta como una relación entre estos dos miembros, que permanecen en ella eternamente separados el uno del otro; puede y debe descubrir los problemas que se presentan en el fenómeno del conocimiento y hacer que nos formemos conciencia de ellos, tras el análisis, encontraremos pues que son 5 problemas. Expondremos las soluciones más importantes que los problemas han encontrado a lo largo de de la historia filosófica.

a) La posibilidad del conocimiento

El dogmatismo al ser la posición primera y más antigua, presenta una actitud del hombre ingenuo, en la que todavía no se presenta el problema del conocimiento, pues no ve que el conocimiento es por esencia una relación entre objeto y sujeto, cree por el contrario que los objetos del conocimiento nos son dados, absolutamente. Es hasta el tiempo de los Sofistas, cuando se platea por primera vez este problema, dando paso a una corriente completamente contraria, el escepticismo, que considera imposible una relación entre sujeto y objeto, razón por la cual, el ser humano debe abstenerse de juzgar. Más adelante nos encontraremos con corrientes intermedias entre estos extremos, como son el subjetivismo, el relativismo, el pragmatismo, hasta llegar al criticismo, única posición justa en la cuestión de la posibilidad del conocimiento, pues examina todas las afirmaciones de la razón humana y no acepta nada despreocupada.

b) El origen del conocimiento

La experiencia nos revela que un proceso sigue al otro. Nosotros agregamos la idea de que un proceso resulta del otro, es causado por otro. Esta cuestión puede tener tanto un sentido psicológico como uno lógico. Encontramos primeramente, el racionalismo, posición epistemológica, que ve en el pensamiento, en la razón, la fuente principal del conocimiento humano; después damos paso al empirismo, que se opone a esta tesis asegurando que la única fuente de conocimiento es la experiencia. El intelectualismo por su parte, es de opinión que ambos factores tiene parte en la producción del conocimiento, sostiene que hay juicios lógicamente necesarios y universalmente validos, cuyos elementos son derivas de la experiencia. Más adelante, un segundo intento de mediación, el apriorismo, nos dice que nuestro conocimiento presenta elementos a priori, independientes de la experiencia, cuyas formas reciben su contenido de la experiencia. Entendiendo que a priori no significa en este caso lo que es lógicamente necesario; si no aquello que hace posible la experiencia, podemos dar razón al apriorismo como respuesta a esta cuestión.

c) La esencia del conocimiento humano

El verdadero problema del conocimiento consiste en la relación

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