Tipos De Profesores

TIPOS DE PROFESORES

Todo aspirante a docente, dada la responsabilidad que deberá asumir en su nueva profesión, deberá responder a conciencia a tres cuestiones fundamentales, en especial el maestro de educación preprimaria.

¿En qué consiste ser un maestro de preprimaria?

Esa debería ser la cuestión previa a cuyo esclarecimiento tendría que evocarse el aspirante a la docencia en la ayuda de expertos orientadores educacionales.

¿Para que y por que quiero ser maestro?

Esta pregunta es consecuencia de la primera y una vez asimilada las características valiosas de la profesión docente, el candidato debe formularse una nueva interrogante: ¿Por qué quiero ser maestro? Dentro de la continuidad autoindagatoria que plantea este “por que”, es lógico que le futuro maestro se pregunte a si mismo, el consecuente para que quiero ser maestro.

¿Qué tipo de maestro quiero ser?

Por lo demás, y visto el panorama de la docencia contemporánea, de suyo heterogéneo y contradictoria en lo que atañe a la tipología docente, el futuro docente, el futro docente debe proponerse, términos de autoformación, un paradigma de educador-maestro en cierto modo arquitípico, que responda en lo esencial a las características que condicionan profesionalmente al buen maestro.

Una tipología de docente en cualquier sociedad humana se determina al responder a las tres cuestiones fundamentales apuntadas.

La autoridad del maestro se basa esencialmente en el respeto a la personalidad del alumno y en cuya organización e tengan en cuenta las siguientes pautas.

 Que labor docente y educativa de la escuela este a cargo de todo el personal con su director a la cabeza.

 Que los esfuerzos que exige la labor educativa se oriente tanto el conjunto del alumnado como a cada educando en particular.

 Que la gran comunidad que constituye los alumnos del establecimiento se integre con las comunidades más pequeñas que forman cada una de las clases o aulas.

 Que la organización, el correcto funcionamiento u el buen éxito del trabajo docente y formativo de la escuela, depende de la forma en que están organizadas la vida y el trabajo diarios de cada una de las clases.

En general los tipos de profesores se corresponden con los tipos humanos que suelen establecer según los criterios científicos propuestos por las distintas corrientes de la caracterología moderna.

Debe consignarse, sin embargo, que cada tipo docente de los que se conocen usualmente, debido a ciertos rasgos peculiares, surge de la interpretación de sus características biopsicotipológicas en las condiciones propias de su labor docente de todos los días. Esta confluencia de factores intrínseco-extrínseco no debe perderse de vista toda vez se trate de recordar aproximadamente el tipo d maestro que se quiere o que no se quiere ser.

Condiciones básicas requeridas por el magisterio

Cualquier que sea el tipo de maestro al que se pertenezca, debe responder a ciertas condiciones en bien de la comunidad educativa.

Sin duda, y tal como lo planteaba Pizzurno hace medio siglo, los educadores en toda la aceptación de la palabra deben serlo.

 Por su saber

 Por su habilidad técnica

 Por su consagración afectiva

 Por el invariable ejemplo de su conducta

De esta forma, el buen docente podrá caracterizarse por las siguientes condiciones esenciales:

 Instrucción general: la que debe tener todo hombre culto y en particular quien va a ejercer la docencia.

 Instrucción especial: la que se requiere para los temas y problemas especiales que deban abordarse en relato con el problema escolar.

 Aptitudes profesionales: las que suponen un concepto claro, preciso, de la misión de la escuela preprimaria y primaria, de los objetos y finalidades correspondientes a dichos ciclos, de los medios para alcanzar los y de la habilidad técnico-didáctico para aplicarlos con acierto.

 Voluntad y estímulos: para consagrarse a su misión docente con empeño y fe el éxito y las demás cualidades morales que le darán autoridad sobre los alumnos.

 Vocación de las condiciones magisteriales son las que exponen, entre otras, Ibarra y Morse y Wingo. El primero de los nombrados, en su obra Didáctica Moderna, registra:

 amor a la niñez, vocación: atracción por la educación.

 Inteligencia y sensibilidad

 Sociabilidad y relaciones humanas: comprensión.

 Salud, integridad por los sentidos y condiciones de resistencia física e intelectual.

 Estabilidad, equilibrio emocional.

 Entusiasmo, tacto pedagógico y buen humor.

 Probidad magisterial, ideales éticos.

 Conocimientos culturales y profesionales.

Morse y Wingo por su parte, destacan que varias encuestas indicaron que los maestros son agradables para sus alumnos si cuentan, entre otras cosas con:

 Sentido del humor, simpatía.

 Sentido de la justicia, sin prejuicios ni favoritismos.

 Interés por sus alumnos, aprecio por los intereses de éstos, deseo de superar dificultades.

 Viveza y capacidad para estar alertas.

 Deseo de convertir el trabajo en algo claro, interesante y de demostrar su utilidad para el alumno.

 Capacidad para mantener el aula en orden, pero sin rigidez con respecto a las cosas pequeñas.

De lo dicho se desprenden los diferentes tipos de maestros propuestos por los científicos de la educación, caracterizándose en forma general, como los siguientes:

Erudito: es el maestro que por medio de sus clases expresa sus conocimientos.

Educador: este tito de maestro procura comprender, ayuda estimular y orientar a sus alumnos. Enseña

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