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Trabajo Final Integrador- Índice- Alfabetización inicial


Enviado por   •  3 de Diciembre de 2018  •  Síntesis  •  2.512 Palabras (11 Páginas)  •  163 Visitas

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Trabajo Final Integrador- Índice- Alfabetización inicial

Apellido y Nombre: Andrés, María Gabriela

CONSIGNA

Elabore un informe final en el que sintetice las condiciones, situaciones e intervenciones que considera fundamentales para lograr que todos los niños aprendan a leer y a escribir en el transcurso de la UP.

En este informe desarrollaré que condiciones, situaciones e intervenciones son fundamentales para lograr que todos los niños aprendan a leer y escribir en el transcurso de la Unidad Pedagógica.

 El aprendizaje es un proceso prolongado que requiere de múltiples oportunidades con prácticas sostenidas de continuidad, progreso, alternancia y complejización.  Cuando generamos   estas situaciones   en las prácticas cotidianas de enseñanza   estamos   brindando   al alumno que   no solo adquiera el sistema de escritura a través de la alfabetización, sino que se apropie de cómo se escribe el lenguaje,   porque también están operando como escritor al producir diversos textos. El lenguaje escrito sirve para representarme cuando yo no esté presente   por lo tanto se les debe enseñar los límites que la   escritura tiene; los grandes quehaceres del escritor: planificar, textualizar, revisar una y otra vez   apropiarse de las reglas y las normas   convencionales de la escritura (lenguaje que se escribe). Pero es un proceso, como se mencionó anteriormente, y se va construyendo. Tal como explican y fundamentan diferentes autores el acto de lectura y escritura es casi simultáneo pero solo se logra con oportunidades para realizarlo a través de prácticas sostenidas. Por lo tanto es necesario ofrecer a todos los niños un entorno que les permita familiarizarse con los diversos escritos sociales promover una interacción continua con lectores y escritores experimentados. Los lectores y escritores se forman participando en actos de lectura y escritura: se aprende a leer leyendo, se aprende a escribir escribiendo. Es el docente el que puede garantizar una comunidad de lectores a través de su participación. Las situaciones de lectura a través de él son imprescindibles para garantizar el acceso de los niños al mundo de la cultura escrita. En la voz del maestro, la formación del lector no se posterga: es posible desde el primer día de clase. De este modo los chicos se están formando como lectores, cuando los niños escuchan leer al docente acceden a textos pertenecientes a diversos géneros, temáticas, autores y tipos de ediciones. A pesar de no enfrentarse directamente con el texto, pueden progresar como lectores porque interactúan con un adulto experimentado que ejerce y muestra prácticas de lectura.

Como docentes tenemos diversas formas de acercar a los alumnos a los textos y lograr una comunidad de lectores.  A modo de ejemplo destacaré tres situaciones fundamentales:

  • Tener una colección de libros en el aula y ponerlos a disposición de todos los alumnos para que tengan la oportunidad de conocerlos, explorarlos, observarlos, revisitarlos una y otra vez. Compartir con otros, imágenes, preferencias, explicación de por qué se eligió tal o cual obra o simplemente esperar el turno para llevarlo a casa.

  • Antes de iniciar la lectura para todos, el docente presenta la obra, encanta a la audiencia y crea al hacerlo un ambiente particular en el que los alumnos se predisponen a escuchar la lectura: es un tiempo diferente. De este modo preparara de manera sistemática sesiones de lectura en voz alta para sus alumnos, e incluye momentos posteriores de intercambio sobre lo leído en el marco de proyectos, secuencias o actividades habituales como la visita semanal a la biblioteca o la hora del cuento.
  • Todas las oportunidades son buenas para acercar a los niños a los libros: puede ser que en una oportunidad planifique leerles del periódico un artículo interesante, que encontró relacionado con temas de Ciencias Sociales o en otra ocasión se hace cargo de la lectura de un fragmento de un texto particularmente complicado al desarrollar un tema de Ciencias Naturales, un día lee para todos un cuento que un alumno trajo voluntariamente a clase...,

Pero es necesario advertir las particularidades de la situación de lectura habitual en la biblioteca de aula: se trata de una actividad planificada y sostenida; los alumnos la esperan y el docente la lleva adelante de manera sistemática porque considera que él es quien debe asegurar el acceso

    de sus alumnos a la cultura escrita.

 “…Puede afirmarse que un gran propósito educativo de la enseñanza de la lectura y de la escritura en el curso de la educación obligatoria es el de incorporar a los chicos a la comunidad de lectores y escritores…” Delia Lerner, 2001:85

“Cuando el maestro lee en voz alta, se ofrece como ese interprete que pone en escena la lectura para “hacer leer” a otros a través de su voz. Quien escucha también está leyendo porque leer es comprender: seguir la historia, descubrir los detalles que anuncian sucesos, anticipar la reacción del personaje por la forma en que ha sido presentado, festejar o “enojarse” con un final no siempre deseado…” (DT 2 p. 11)

Pero hay algo que impacta tal vez de manera diferente en nuestros alumnos en el proceso de adquirir la lectura y la escritura y ese algo especial es la lectura a través del docente. Cuando el maestro lee, sus alumnos no solo escuchan sino que ellos también leen a través suyo. Es el maestro el que los conecta con el lenguaje escrito, y es a través de su maestro que el niño realiza aprendizajes que luego serán puestos en juego en situaciones de lectura por sí mismos, de escritura y de comunicación oral. El alumno lee a través de sus oídos, lee al escuchar a su maestro, por ello es sumamente importante darnos cuenta del valor que tiene que esa lectura, especialmente las primeras lecturas dentro del aula deben significativas pero también atractivas a sus oídos. La lectura a través de un lector experto continúa a lo largo de toda la escolaridad. El maestro sigue leyendo, aunque los niños leen por sí mismos, textos más complejos o los que resultan poco elegidos por los chicos espontáneamente, textos de un autor o un género novedoso para el grupo de lectores, textos de estudio que le interesa   que sus alumnos conozcan. Sostiene entre dos y tres veces por semana   estas situaciones de lectura  para sus alumnos   pero no solo lee, posteriormente  deja un espacio de silencio  para sentir que  sensación provocó en ellos,  realiza el intercambio, deja circular el ejemplar para que los chicos puedan hojearlo, muestra las imágenes , se releen fragmentos: que asustaron , que provocaron risas, que describían  a los  personajes del  relato, selecciona  algún que otro pasaje . Busca otras propuestas para incentivar el acercamiento a los libros además de leerles: -Hoy vamos a   seleccionar    libros con animales y los agrupamos en una mesa, así yo luego puede leérselos   en otro momento. Cada  lectura  debe generar  intriga , expectativa , ganas de seguir escuchando; por eso es muy importante la presentación de cada  texto , la introducción y por qué no , el marketing ,  que el docente  hará de esa obra : presentando el autor ,  contando a los alumnos por qué se eligió para ese momento, como   los muestra a los niños  , señalando el título, el  autor , la tapa, la contratapa. Todas estas acciones anteriormente mencionadas lograrán una anticipación de la lectura; una predisposición del niño para escuchar la historia. El ambiente que rodea a esa situación de lectura también es muy importante. Las condiciones didácticas consideradas imprescindibles para que logren el proceso de alfabetización, se inicia con la lectura frecuente de textos literarios con propósitos definidos por parte del docente.

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