TÉCNICAS DE INVESTIGACIÓN JURÍDICA OBJETIVO GENERAL DE LA ASIGNATURA

TÉCNICAS DE INVESTIGACIÓN JURÍDICA

OBJETIVO GENERAL DE LA ASIGNATURA

Comprender y analizar el entorno y la realidad jurídica con la finalidad de detectar y percibir aquellos aspectos del Derecho que se encuentran confusos, deficientes o inexistentes, así como reflexionar y proponer posibles soluciones a dichos problemas.

TEMAS Y SUBTEMAS

Tema 1: La importancia de la investigación jurídica

1.1 LA INVESTIGACIÓN JURÍDICA

Para investigar acudimos a técnicas, métodos y procesos pertinentes destinados a conseguir el propósito de conocer mejor el mundo comprender sus fenómenos y explicar los sucesos.

La investigación es cuestionarse la realidad para poderle explicar después de haber dudado y problematizado el mundo. (Descartes).

La primera interrogante que nos asalta al abordar este tema es sobre la existencia misma de la investigación jurídica ya que son números de los científicos naturales y de las físico matemática e inclusive algunos juristas quienes expresan duda sobre la posibilidad de un análisis profundo sobre las disciplinas jurídicas para lograr aportaciones originales.

Ambos temas, es decir el de la ciencia jurídica y el de la investigación sobre el derecho, se encuentran estrechamente vinculados ya que la primera no puede tener existencia verdadera en la investigación y esta última puede desarrollarse sin los conocimientos científicos y no puramente técnicos Cómo son los relativos a la práctica profesional.

La investigación jurídica se puede concebir como la actividad intelectual que pretende descubrir las soluciones jurídicas adecuadas para los problemas que plantean la vida social de nuestra época.

Lo que ocurre es que en la investigación jurídica no se obtienen resultados espectaculares o sensacionales como en la medicina la física la química y otras disciplinas similares y por otra parte como ya habíamos señalado anteriormente entre los mismos juristas llega a producirse el desaliento ante la falta de eficacia de ciertas disposiciones normativas o bien porque sienten que las mismas se ven constantemente superadas por la dinámica social.

No obstante dichos retrocesos no deben desanimarnos ya que también se han presentado en otros Campos del conocimiento tales como el empleo de las técnicas científicas para la destrucción humana así como la generación de problemas de contaminación ocasionados por el desarrollo de la tecnología también podemos observar qué otros cultivadores de las ciencias sociales como sociólogos politólogos economistas psicólogos y antropólogos sociales expresan sus dudas sobre la posibilidad de la investigación jurídica ya que estima que sólo ellos en sus respectivos Campos por encontrarse en contacto constantemente con la realidad social Son los únicos que pueden obtener resultados verdaderamente originales.

Es muy frecuente escuchar la frase que por otra parte también emplean Los profesionales jurídicos de que los investigadores del derecho se encuentran encerrados en “Torres de Marfil” alejados de la atormentada y dinámica realidad social y que por este motivo no sólo no contribuyen al desarrollo sino que constituyen un obstáculo para el mismo.

Si el derecho constituye un aspecto fundamental de la vida humana objetivada, de acuerdo con la terminología de Luis Recaséns Siches, es indudable que posee las características de la propia vida social de flexibilidad riqueza de matices y que se encuentra en continuo y constante transformación y por lo mismo el jurista debe aproximarse a ese objeto de conocimiento con un espíritu abierto y Dinámico para poder captar los cambios sociales acelerados que influyen en el campo del derecho.

En realidad la ciencia jurídica y por tanto la investigación que permite su evolución utiliza tanto métodos empíricos como instrumentos lógicos de toda rama del conocimiento como el análisis la síntesis la inducción la deducción etcétera que son necesarios para la formación de conceptos principios instituciones y sistemas de carácter jurídico.

En la actualidad advertimos una fuerte corriente de influencia estadounidense que ha exagerado el carácter teórico de la doctrina jurídica y por ello preconiza la necesidad de utilizar preferentemente la que califica como investigación empírica abandonando las famosas Torres de Marfil que en realidad nunca han existido a no ser que en determinadas épocas como cuando imperaba el racionalismo alemán tan criticada por  Ihering.

En la investigación jurídica se pueden utilizar las técnicas de la investigación documental que son comunes a otras disciplinas sociales y desde este punto de vista el cultivador de las disciplinas jurídicas puede utilizar los estudios que sobre esta materia han realizado tratadistas como Ernesto de la Torre, Carlos Bosch García, Jorge Mario García Laguardia y Jorge Luján Muñoz.

Por otro lado resulta difícil aplicar a los estudios jurídicos las técnicas del llamado trabajo de campo que se utilizan en varias disciplinas sociales que pretenden la apreciación directa de la realidad social política y económica y poseen técnicas comunes para lograr el conocimiento riguroso de los fenómenos sociales.

De acuerdo a Felipe Pardiñas, Ario Garza Mercado y Raúl Rojas Soriano existen varias técnicas modernas para las referidas ciencias sociales como el muestreo, las operaciones y medidas estadísticas, las entrevistas los cuestionarios las encuestas e inclusive algunos aspectos así sean limitados de experimentación.

Resulta Claro que los juristas a no ser que hubiesen hecho estudios especiales sobre la metodología de la sociología moderna no están capacitados para emplear en forma rigurosa todos estos instrumentos que requieren conocimientos técnicos de alto nivel Pero en cambio sí pueden utilizar los más sencillos así sea en forma elemental y parcial para complementar sus conocimientos estrictamente jurídicos tales como la entrevista personal el cuestionario particularmente cuando se trata de analizar ordenamientos jurídicos extranjeros respecto de los cuales resulta difícil obtener una adecuada información o bien cuando se requiere apreciar la eficacia de las disposiciones normativas estudiadas.

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