Como Tratar A Las Personas Con Discapacidad
osoac17 de Noviembre de 2012
10.670 Palabras (43 Páginas)677 Visitas
¿CÓMO TRATAR A LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD?
Las personas con discapacidad, son principalmente y ante todo personas, de aquí que lo normal sea tratarles con la mayor normalidad posible. "Lo normal es un trato normal".
Nuestra primera reacción al observar que una persona presenta una discapacidad, con las limitaciones que ésta conlleva es prestarle nuestra ayuda, de esta manera asociamos la discapacidad a la necesidad de dependencia de otros, cuando lo deseable es que la persona discapacitada logre la mayor independencia posible.
Lo positivo sería consultar a cada uno si necesita o no ayuda y en caso afirmativo, cómo se la podríamos prestar.
No obstante, a continuación incluimos algunos consejos útiles a seguir en el trato de personas con discapacidad:
• Personas que caminan despacio y/o que utilizan muletas:
- En compañía de una persona que camina despacio y/o utiliza muletas, ajustemos nuestro paso al suyo.
- Evitémosle posibles empujones.
- Ayudémosle si tiene que transportar objetos o paquetes.
- No le separemos de sus muletas.
• Personas que utilizan sillas de ruedas:
- Para hablar con una persona que utiliza silla de ruedas, situémonos de frente y a la misma altura (a ser posible sentados).
- Si desconocemos el manejo de la silla de ruedas, preguntémosle al usuario cómo ayudarle.
- Dirijámonos a la persona en silla de ruedas y no a su acompañante.
• Personas con discapacidad para hablar:
- Procuremos no ponernos nerviosos si una persona con discapacidad para hablar se dirige a nosotros.
- Tratemos de comprender, sabiendo que el ritmo y la pronunciación son distintos a los acostumbrados.
- Si no hemos comprendido lo que nos dice, conviene hacérselo saber para que utilice otra manera de comunicarnos lo que desea.
- No aparentemos haber comprendido si no ha sido así.
• Personas con discapacidad para ver:
- Identifiquémonos siempre al dirigirnos a una persona con discapacidad para ver.
- Si se le ofrece o indica alguna cosa, aclarémosle de qué se trata y en qué lugar exacto se encuentra.
- Si precisa de nuestra ayuda, ofrezcámosle el brazo y caminemos ligeramente por delante.
- Advirtámosle de posibles obstáculos que se encuentren a su paso.
- No le dejemos solo, sin advertírselo antes.
• Personas con discapacidad para oír:
- Dirijámonos a la persona con discapacidad para oír cuando nos esté mirando, evitando hacerlo si se encuentra de espaldas.
- Si no conocemos la lengua de signos, hablémosle despacio y claramente, con el rostro bien iluminado.
- Verifiquemos que ha comprendido lo que le tratamos de comunicar.
- En caso de mucha dificultad, podemos escribir aquello que queremos decirle.
• Personas con limitaciones de comprensión:
- Seamos naturales y sencillos en nuestra manera de hablar a la persona con limitaciones de comprensión.
- Respondamos a sus preguntas, asegurándonos de que nos ha comprendido.
- Salvo para cuestiones intelectuales, tratémosle de acuerdo con su edad.
- Limitemos la ayuda a lo necesario, procurando que se desenvuelva sola en el resto de las actividades.
- Facilitemos su relación con otras personas.
• Personas con alteraciones del comportamiento:
- Seamos discretos en el contacto con personas afectas de discapacidades para las relaciones personales.
- Evitemos situaciones que puedan generar violencia, como discusiones o críticas.
- Tratemos de comprender su situación, facilitando siempre su participación en todas las actividades.
Si te encuentras con una persona con discapacidad, piensa
primero que es una persona como tú, con sus características,
limitaciones y ventajas. En segundo lugar, acércate sin miedo
a ella, pero sabiendo cómo tienes que hacerlo como
comunicarte y que ambos os sintáis bien.
CERMI-Aragón quiere darte una serie de recomendaciones para
que comprendas la forma de entender un mundo diferente al
tuyo, sin ningún trato especial pero con la sensibilidad suficiente
para no perderte la oportunidad de conocer personas realmente
estupendas.
El contenido de esta publicación y otras sobre el mismo tema
se pueden descargar en www.cermiaragon.es, en el apartado
de Publicacione
Lo que hay que oír
Estas son algunas de las indicaciones para que tu
comunicación con una persona sorda o con pér-
dida auditiva sea más fluida. Ten en cuenta que
un gran número de personas mayores, muchos
profesionales sometidos a ruidos y, en definitiva,
un tanto por ciento significativo de la población
tiene este problema.
Personas sordas o con discapacidad auditiva
- No le hables nunca sin que te esté mirando.
- Sitúate en un lugar donde te puedan ver con
claridad: háblales de cerca, de frente, a su altura
y con el rostro suficientemente iluminado.
- Habla con voz y con naturalidad, ni muy deprisa
ni muy despacio. Vocaliza bien sin exagerar ni
gritar. Puedes ayudarte con gestos naturales y/o
del uso de escritura si es necesario.
- Si no te entiende, repite el mensaje o constrúyelo
de otra forma más sencilla, pero correcta y con
palabras de significado similar.
- No hables de modo rudimentario o en argot. No
te comuniques con palabras sueltas.
- Cuando te hable no trates de aparentar que le
has entendido si no es así. Si es necesario pídele
que te repita. Ten en cuenta que el ritmo y la
pronunciación no son los acostumbrados.
- Si, además, son personas sordas usuarias de la
Lengua de los Signos Española, utilízala directa-
mente, o bien cuenta con la presencia de un pro-
fesional de la interpretación.
Sugerencias generales
Háblale directamente.
Dirígete siempre directamente a la persona con discapacidad, no a su acompañante.
Pregunta antes de ayudar.
Ofrece tu ayuda sólo si la persona parece necesitarla.
No des por sentado que necesita ayuda.
No subestimes y prejuzgues a las personas con discapacidad.
Déjales que hagan por si mismas todo lo que ellas puedan hacer.
Que ellas te marquen el ritmo.
No decidas por ellas su participación en cualquier actividad.
Actúa con naturalidad.
Pregunta cómo puedes ayudar antes de actuar.
Ayudar tampoco significa exagerar, Hazlo con naturalidad.
Desean que se les trate como a iguales.
Evita el sobreproteccionismo o paternalismo innecesario.
Otra forma
de ver las cosas
Prueba un día a cerrar los ojos e intenta moverte
por el mundo. Comprobarás la importancia que
adquieren los sonidos, las palabras, los gestos.
Descubrirás que hay muchas formas de ver las
cosas.
Personas ciegas o con discapacidad visual
Las diferencias individuales, aptitudes personales,
nivel de autonomía, etc., hacen que cada perso-
na tenga niveles diferentes de funcionamiento.
- Preguntar antes de ofrecer ayuda, evitando la
imposición de la misma y la sobreprotección.
- Al principio puede ser aconsejable acompañar
y mostrar el espacio en el que se va a desen-
volver.
- Al acompañar a una persona con discapaci-
dad visual se debe ofrecer el brazo y caminar
un paso delante de él.
- Identificarse y asegurarse de que sabe que el
interlocutor se dirige a él.
- No ausentarse sin avisar.
- Ser precisos y específicos en el mensaje y no
sustituir el lenguaje oral por gestos.
- Mantener un entorno ordenado, evitando puer-
tas entreabiertas, objetos fuera de su sitio, etc.
- Pequeñas modificaciones ambientales pueden
favorecer la autonomía: buena iluminación,
contraste, etc.
- No todas las personas con discapacidad visual
acceden de la misma forma a la información.
Según su resto visual, sus habilidades precisarán
Braille, textos impresos en tinta, herramientas
informáticas, etc., y cada uno adaptado a sus
necesidades.
De todo corazón
Si algo caracteriza a las personas con discapacidad
intelectual es su enorme capacidad de alegría, cariño
y ternura. No desaproveches la oportunidad para des-
cubrir personas diferentes que pueden enseñarte otra
forma de ser feliz.
Personas con discapacidad intelectual
• Tratémosle de acuerdo a su edad, pero adaptándonos
a su capacidad.
• Seamos naturales y llanos en nuestra manera de hablar
a una persona con dificultades de comprensión por su
limitación intelectual. Nos expresaremos usando un
vocabulario sencillo, asegurándonos de que nos ha
comprendido.
• En una conversación pueden responder lentamente
por lo que hay que darles tiempo para hacerlo. Sea
paciente, flexible y muestre siempre apoyo.
• Si tenemos que explicarle algo, nos dirigiremos a ella
con instrucciones claras y concisas, acompañadas, s
podemos,
...