EL VELO DEL MIEDO - RESUMEN

Samia, nació en una familia privilegiada, de dinero y jerarquía, pero su futuro no era como ella lo imaginaba:

INFANCIA

Mi infancia fue un martirio, desde muy joven supe que no era bueno ser mujer. A mis años tenía muchas dudas que empecé a preguntar a mi madre, pero ella pese a que me contaba algunos detalles me respondía con desprecio. Samia mi amiga, pese a pertenecer a una familia humilde tenía toda la atención y cariño de la que yo carecía; mi madre me despreciaba y sentía temor por mi padre. Un día llegó su padre con una muñeca en brazos, ella lo tomo emocionada, pese a que su padre la haya encontrado en un basurero, ya que el trabajaba de barrendero, aunque yo pertenecía a una familia privilegiada, nunca me dieron un regalo, solo a mis hermanos; pese a mis peticiones mi madre me reprochó, cerca de las fiestas de navidad recibí un peluche que se convirtió en mi amigo íntimo en quien me refugiaba, éramos inseparables, al único lugar que no iba conmigo era a la escuela.

ADOLESCENCIA

Un día mi madre nos reunió y nos dijo que volveríamos a Argelia que era por ellos y especialmente por mi, no dejaron que ni siquiera me despida de mi amiga, ni que me lleve mi preciado peluche, los abusos tanto psicológicos como físicos de mis padres hacia mi se incrementaron, mi madre me aborrecía, cuando nació mi hermana también mi madre actuó con total indiferencia hacia ella. A la edad de 13 años, mi madre me reprochaba los cambios biológicos que presentaba mi cuerpo, me envolvía el pecho con unas vendas que casi no podía respirar para que mi padre no se de cuenta de estos, a los 14 años mi 1ra. Menstruación, pensé que era una abominación lo que me pasaba, mis compañeras me dijeron era normal, le avise a mi madre y solo me empieza hablar del honor, que podía embarazarme. Una vez que acabé la secundaria, mi padre me dice que ya no iré a la escuela y que mi madre me enseñará hacer cosas que me conviertan en una buena musulmana para que este lista y casarme, no pude replicar solo resignarme a sus palabras. Me anunciaron que iría a Paris a pasar mis vacaciones, donde mi tía, yo afanada y feliz me preparé, obviamente me recomendaron que hiciera todo lo que ella me pidiera, al llegar mi tía me anuncia que me voy a casar y que conoceré a mi futuro esposo, que debía vestirme con mis mejores galas y que sea prudencia y que haga honor a mi familia.

MATRIMONIO

Terminando mis hipotéticas vacaciones retorne a Argelia, donde le dije a mi madre que no era posible para mi casarme con un desconocido, simplemente me dijo que porque no lo había visto cuando fue mi oportunidad, y le dijo a mi padre que estaba con mis buenos pensamiento hacia mi futuro esposo, la boda estaba programada para dentro de un año, en ese tiempo debía aprender todo referente a la casa que mi madre me indicaba, no podía salir, ni ver a nadie, había unas mujeres que venían ayudar con los quehaceres y me hice amiga de una. Mi madre junto a mis tías preparaban la boda, todos me decían que era afortunada, que mi boda iba a ser el acontecimiento del año y que debía sentirme bendecida, preparaban una boda diga de la familia, me sentía ganado que iba al matadero, no podía asimilar el hecho de que iba a casarme y que me debía ir a vivir con el desconocido. Finalmente fue mi tío Ali quien fue elegido para dirigirme hacia el altar, fue fatal, le dije que me casaba en contra de mi voluntad, él me dijo que hablaría con mi padre, pero este vino y me amenazó que me hubiera degollado de no ser por los invitados. Una vez pasada la ceremonia, mi tía Karima me acompaño hasta la casa y me dejo ahí para pasar mi noche de bodas.

¡QUE NOCHE DE BODAS!

Una vez en la casa, mi tía me deja en el cuarto nupcial, llega él y me manosea y me niego a desvestirme y me agarra con mas fuerza, que podría gritar pero que no había nadie en la casa, que era su mujer y debía someterme, intentó penetrarme una y otra vez, antes del amanecer nos dormimos, por la mañana me fui al baño, él se despertó y con su amenazante voz me pidió que abriera y estaba a punto de empezar, cuando por el pasillo se escucho pasos, era mi tía que ingresó, él se vistió rápidamente y salio, ella me preguntó si había consumado mi noche de bodas, no entendía, entonces me dijo que era importante, luego de eso Abdel volvió y me lanzó al suelo, me penetró como un puñal y por el dolor me desmaye, al recobrarme mi tía feliz salió con mi camisón manchado con sangre, supe luego que mi madre había bailado junto a este feliz. Ya a punto de 48 horas de irnos a Francia, mi madre vino y escogió los vestidos que iba a llevar, me dijo que debía escuchar a mi esposo. Con Abdel sufrí violaciones, vejaciones y muchos insultos que me decía, una y otra vez, hablándome vulgarmente de que yo pensaba en otros hombres.

NUESTRO NIDO DE AMOR

Llegamos al Aeropuerto, tomamos una taxi que nos llevo a casa, la casa que mi padre nos compro, la contemple era de ensueño, tenía todas las comodidades, como siempre Abdel no dudo en decirme palabras para que deje de disfrutar del panorama, que si la princesa estaba feliz con la casa. Me puso un ultimátum de que debía embarazarme o me enviaría de vuelta, porque decía que seguramente era estéril, al cabo de 3 meses me embaracé le di la noticia a mi madre por teléfono, luego a Abdel con un almuerzo especial, pero refutó que conmigo le bastaba, que con un hijo más que haría-pero tú me pediste un hijo- Los primeros 7 meses de maltrato y violaciones, al 8vo tuve que ir al hospital donde me dijeron iba a nacer prematuro, llame a mi tía para no estar sola pues mi esposo se fue y me dejo sola, luego de padecer 17 horas nació, me tuvieron que suturar porque mi vagina era muy estrecha y la cabeza de mi bebé grande posterior a eso lo metieron a la incubadora, Abdel me reclamó que no podía hacer nada bien, que no podía evitar que él tomara lo que era suyo, o sea yo.

EL RAPTO

Al retornar a casa y por el llanto de mi bebé Abdel me molió a patadas en el vientre y en la cara, luego sentí que se sacaba el pantalón, me desmayé y aparecí en el hospital, me dolía todo, entonces la enfermera se me acercó y me dijo que todo estaba bien, vino el médico y junto a mi madre me pregunto que había pasado, que debía poner una denuncia, pero mi madre dijo que me caí y yo tuve que confirmar eso, por la mirada fija de mi madre hacia mi. Abdel vino a recogerme y en el auto estaba contengo diciéndome que todo iba a volver a ser igual que antes y que mañana ya

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