El Sujeto Y Su Formacion Como Docente
kazx6 de Enero de 2013
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LAS CUALIDADES CLÁSICAS: VOCACIÓN Y MORAL
En este apartado podemos ver el concepto de maestros y algunas de su características, así como también como lo van idealizando como un sacerdote que tiene la vocación de enseñar la doctrina del saber y tenía que ser de una manera natural, es decir autentica y deseable, también se vio a la mujer como el elemento ideal para el oficio porque se dice que es una educadora moral por naturaleza pero también aseguran los pedagogos que ellas tienen menores condiciones de carácter y muchas veces de espíritu para educar a los niños es por eso que se le comenzó a llenar de conocimientos positivos para que pueda educar y enseñar.
EL MAESTRO
Ser maestro no se trata solo de tener conocimientos y de saber explicarlos, también implica tener una buena imagen frente a la sociedad y si de verdad es su vocación deberá de estar completamente satisfecho con su labor.
LA MAESTRA RURAL
En su mayoría son jóvenes por las largas distancias y el empedrado camino que tienen que recorrer para llegar a su destino en donde se coloca al frente de una humilde aula en donde llegaran muchos niños con todo el entusiasmo de aprender y cuando la clase termina sólo se preocupa por los temas que verá al día siguiente.
LA CIENTIFIZACIÓN RELATIVA DEL OFICIO
Los maestros deben de tener muchas cualidades pero la más importante es la puntualidad y en segundo lugar queda la preparación pedagógica. El profesor no solo debe tener la vocación, sino que también tiene que tener la “preparación pedagógica” y no por eso debe amar solo a la ciencia, su deber es el amor a enseñar eso que aprendió, además tiene el deber de creer en lo que va a explicar.
El maestro debe conocer métodos para enseñar y de esta forma poder enseñar mejor los contenidos.
El buen maestro es una combinación histórica variable de vocación, cualidades morales, conocimiento pedagógico y conocimiento de contenido, también debía ser un científico y un artista.
LA LUCHA POR EL RECONOCIMIENTO SOCIAL
El magisterio como todo grupo social, tiene una existencia doble, el estamento magisterial tiene un primer lugar que podemos denominar objetivo-material.
El maestro es prisionero de la definición social que se hace de su oficio.
Existen en el campo laboral “presupuestófagos” son aquellos que van a la casa de los puestos públicos, de las catedras. Algunos llegan a tomar el magisterio como una industria, y no como una especie de paternidad.
El maestro que es laico se recluta entre los rangos de las clases urbanas más bajas, además es una profesión muy noble y es ejercida por muchos individuos fuera de este paradigma, el prestigio del maestro se mide en relación con el prestigio del productor de la cultura literaria.
También se comenzó a comprender que el reconocimiento social es una serie de atributos materiales que se obtienen con dinero y por eso es posible afirmar que el estado debe proporcionarles a los maestros medios para que ocupen en la sociedad el lugar que les corresponde.
En el primer congreso nacional de instrucción pública se constituyó una comisión de trabajo, el congreso reivindicaba el derecho de los maestros a una jubilación con el goce de todo su sueldo a los maestros con 30 años de servicio, cuando hay enfermedad merecen el goce integro de su sueldo, pero después de cuatro mess solo es medio y en caso de fallecimiento pagan la fosa y las obras fúnebres.
La segunda gran propuesta es la creación de las normales.
LA LUCHA POR LA OBLIGATORIEDAD DEL TITULO DE MAESTRO
El proceso de nacionalización de la vida política, económica y social se refleja en forma concreta de los debates parlamentarios
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