Ensayo “Parsons y el trabajo social”

Oscar Alfaro Maldonado

Sede: CDMX ENTS SUAyED

Ensayo “Parsons y el trabajo social”

El “estructural funcionalismo” se basa en el estudio de la sociedad, en donde se reduce un acontecimiento social a la dependencia con las estructuras de las cuales emana, es decir, un suceso en lo social no ocurre de manera individual o por sí sólo, sino en interdependencia con las estructuras o sistemas sociales.

En este sentido un sistema social sería un conjunto de acciones por parte de los individuos que interactúan entre sí y que tienen como fin común obtener alguna gratificación de acuerdo a las relaciones establecidas entre ellos y que son mediadas y definidas por los símbolos que culturalmente están estructurados y son compartidos por ellos.  Una estructura social, entonces será desde esta perspectiva la agrupación de diferentes sistemas ordenados en clases sociales en donde hay una interdependencia entre las mismas y sus participantes tienen un status y roles determinados que deben cubrir y actuar, como ciertas categorías que también van ligadas a las conductas socialmente esperadas de manera individual y colectiva (familia, partido político, club, fabrica) y a aspectos psicológicos que tienen que ver con motivaciones, valores, las normas introyectadas y lo necesario para el buen funcionamiento del sistema.

En algunas características de esta teoría del “estructural funcionalismo”, se percibe una semejanza entre la vida orgánica y la vida social y toma de la primera sus modelos de estudio para estudiar a las sociedades. También establece que las funciones realizadas por los grupos sociales tienden con el tiempo a hacerse más especializadas, interdependientes y eficaces, como resultado del crecimiento de la sociedad o sociedades que las hace más complejas en su organización y que motiva a que haya más movilidad de acuerdo a las acciones o funciones de cada individuo tomando como referencia su status social, la cultura, el grupo al que pertenece, etc.  Señala, la vinculación o las redes que se establecen delineando la estratificación entre las diferentes clases sociales.

Para poder entender los sistemas sociales hay que conocer sus componentes que se enmarcan en dos conceptos: actitudes sociales y tipo colectivo. Dentro de las primeras se toma a la personalidad como un elemento importante para poder entender cómo es que se da posiblemente el vínculo entre una estructura social y otra considerando los roles sociales de las personas en las diferentes instituciones que componen una sociedad. Esta mirada pretende dar una explicación a los comportamientos individuales y el impacto de estos en las estructuras o incluso en la constitución de las mismas; considerando que la psicología individual juega un papel importante sin tener que caer en la psicologización. Así, las actitudes sociales sobre todo tendrán que ver con ciertas tendencias a delimitar gustos o preferencias den base a las experiencias con los otros, en la capacidad para ver el mundo y a nosotros mismos en consonancia con los demás y en la integración de símbolos sociales.  Es desarrollar las actitudes personales internalizando las actitudes de otros, esto al compartir cosas en común en el grupo de pertenencia y en los grupos en los que se desenvuelve una persona.

Por otro lado, los tipos colectivos se refieren a los grupos pequeños integrados por dos o más personas en donde el contacto esta mediado por una intención compartida, un ejemplo, son: la familia, juntas de directores, etc. Las decisiones que se toman al interior de estos grupos, tienen efectos críticos sobre la historia de las comunidades y en tal sentido en como las personas conducen su vida diaria. En un grupo pequeño se entrecruzan presiones sociales y también las de los propios individuos de esos grupos, ya que a su vez son parte un macro que es un Sistema Social.  

Dentro de los grupos pequeños encontramos la conformación de una organización formal en donde se delinean los procedimientos que “gobiernan” las relaciones entre los miembros de esa organización (club, sindicato, empresa, etc), y también establecen los deberes y/o funciones que se espera cada persona cumpla. Con el tiempo esta organización adquiere una identidad propia, independientemente de quien la haya fundado y esto permite que perdure en el tiempo sin dejar de lado que “dicha unidad” se constituyó a partir de otras unidades.

Entendiendo la idea de una organización es factible entender lo que es una burocracia, pues pueden ser vistos como sinónimos y en este sentido desde Max Weber se enuncian las principales características de estos grupos que consisten en: distribuir tareas administrativas y de control de organización en puestos y funciones, crear una estructura de jerarquías de acuerdo a autoridad, tener y establecer un sistema de normas y reglamentos para toma de decisiones y acciones de la autoridad, contar con personal administrativo que se encargue de mantener la organización y comunicación interna, marcar normas para separar el vínculo emocional del personal con jerarquía, los clientes y subordinados, promover la posibilidad de que las personas con autoridad hagan carrera en la organización.

Otro grupo pequeño (colectivo) es la familia la cual usualmente era entendida como “familia nuclear”, pero cuyo concepto ha ido evolucionando y siendo diferente entre una sociedad y otra, de acuerdo a la clase social, la etapa del ciclo vital, la ocupación y el contexto.  En esta “estructura” al igual que en la organización, se establecen jerarquías y niveles de autoridad en relación al rol y la edad que lleva cada integrante: el hombre tiene un rol más instrumental ocupando gran parte de su tiempo hacia el trabajo y la mujer desempeña otro más expresivo ocupando gran parte de su tiempo a la familia.  

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