MODELOS SOCIOECONÓMICOS

Análisis De Modelos Dinámicos Socioeconómicos; Funciones, Herramientas y Sistemas de Evaluación de Enfoque Sistémico y Multidimensional Desde Una Perspectiva General y Prospectiva

NOMBRE

ID: XXX

NOMBRE

ID: XXXX

CORPORACIÓN UNIVERSITARIA MINUTO DE DIOS

FACULTAD DE CIENCIAS ADMINISTRATIVAS

FORMULACIÓN DE PROYECTOS

SEPTIEMBRE DE 2020

Tabla de contenido

Introducción        3

Planteamiento del problema        4

Formulación Problema        5

Pregunta problema        6

Objetivo General        6

Objetivos Específicos        6

Justificación        6

Marco Referencial        7

Marco Teórico        7

Marco Conceptual        9

Marco Geográfico        11

Matríz de Involucrados        12

Referencias        13

Introducción

     Actualmente los diferentes países de Latinoamérica enfrentan cambios importantes a nivel político, social y económico. En los últimos años estos países han instaurado diferentes modelos socioeconómicos, enmarcados en los diferentes planes de desarrollo nacionales; el desarrollo endógeno y sostenible, con el cual se plantean satisfacer las necesidades básicas, la participación de la comunidad, la protección del medio ambiente y la localización de las poblaciones en un espacio determinado. La meta es el desarrollo en el nivel local de las comunidades, pero que trascienda hacia arriba, hacia la economía de los países.

Según More (2014),  una forma de entender el concepto de los modelos socioeconómicos es cuando nos referimos a los sistemas económicos o a la forma en la que se organiza la economía dentro de una sociedad. En general existen tres tipos de sistemas económicos relacionados a los diferentes modelos existentes y adoptados por varios países en América Latina:

• Modelo capitalista: Que utiliza el mercado como mecanismo de asignación de los recursos.
• Modelo socialista o planificado: Se planifica o interviene la economía para lograr determinados objetivos.
• Economía mixta: una combinación de los anteriores.

En las últimas décadas se ha ido conformando un nuevo modelo socioeconómico mundial basado en la microelectrónica y la programación informática como ejes determinantes de la generación de ganancias extraordinaria de las PYMES y derivado de una enorme expansión de los conocimientos impulsados por una lógica innovadora de la acumulación de capitales (Rama, 2010).

En este contexto se concibe que desde los 80 y 90, se ha entrado en una era digital basada en tecnologías de información que se centra en los motores de la acumulación focalizados en comunicaciones digitales, redes, ordenadores, bienes de capital electrónicos, software, telecomunicaciones, bases de datos y servicios de información. En esta economía global, las PYMES se han incorporado en otros sectores, en tanto estas tecnologías alteran las estructuras de precios y marcan los niveles de competencia asociados a su introducción y generalización. El nuevo escenario para las PYMES en América Latina, como el de la tecnología, cambia el uso de los insumos sustituyendo trabajo y modifica las estructuras de costos, alterando los ejes económicos básicos en los diversos mercados de la sociedad (Rama, La irrupción de nuevos modelos socioeconómicos, paradigmas educativos y lógicas, 2010).

En el presente documento se investigarán diferentes modelos socioeconómicos desarrollados dentro de un marco histórico y que han implementado algunas Pequeñas y Medianas Empresas (PYMES) de Latinoamérica y Colombia, relacionados con la formación continua, la asociatividad, el desarrollo sostenible de empresas innovadoras y PYMES inteligentes. Las ventajas y desventajas de dichos modelos se utilizarán para elaborar un nuevo modelo socioeconómico basado en los investigados, cuyo objetivo será incrementar la productividad de las PYMES de Colombia. Entre los aportes más importantes de los modelos identificados a partir de este estudio, se puede plantear un modelo que proponga programas de capacitación del talento humano, la utilización del pensamiento complejo y borroso; y espacios para la investigación y desarrollo dentro de las PYMES, así como la relación directa con la era y la transformación digitales de las mismas (Rama, 2010).

Planteamiento del problema

     El nuevo siglo comenzó con el "giro a la izquierda" en América Latina, marcó nuevos rumbos en el manejo de los temas sociales, la participación política o los derechos de las minorías y ganó reconocimiento internacional. En el contexto de la subida de los precios de las materias primas, esta dinámica se ve favorecida por países que se están fortaleciendo y con fuerte crecimiento económico. Si bien la crisis financiera que estalló en 2007 hizo que Estados Unidos y Europa sintieran las consecuencias sociales de la falta de control del mercado, en América Latina la población pobre se ha reducido casi a la mitad. Estos éxitos se complementan con nuevos ideales orientados a lograr una mayor participación política y un desarrollo sostenible (Burchardt, 2017).

Pero esta política provocó una crisis. A medida que cayeron los precios de las materias primas, la economía se debilitó, los gobiernos perdieron el apoyo de la gente en los países latinoamericanos, lo más importante fue tratar de salvarse y la pobreza volvió a aumentar. Por ejemplo, en las últimas elecciones en Venezuela y Argentina o la destitución de la presidenta brasileña Dilma Rousseff están fuera de toda duda: después de más de una década en el poder, los gobernantes de izquierda enfrentan serios problemas. En los últimos 15 años es muy probable que tengan la oportunidad de avanzar en la senda del desarrollo en este siglo y ganar un mayor grado de independencia del mercado mundial y de las materias primas, pero hoy, esta oportunidad ha vuelto a desaparecer, lo que hace que la región esté en una posición de liderazgo asumiendo nuevos retos (Burchardt, 2017).

Al final debe haber un debate profundo sobre la cultura política actual en la región que tanto agota el cambio social. Los primeros signos no son difíciles de encontrar: la clase social más influyente y el mayor poder de decisión se desempeñan bien en términos de desigualdad social, para ellos el cambio suele ser sinónimo de deterioro. Por eso, para muchas personas, la cohesión social no es una esperanza ideal para mejorar, tal y como se ha experimentado en Colombia. En tiempos de crisis, el propio país no busca soluciones. Por lo tanto, incluso sí esto puede significar altos rendimientos económicos a largo plazo, el interés en aumentar la productividad o desarrollar mercados internos es limitado. Así que el país es visto como un trofeo más que como un administrador de asuntos públicos, no por codicia, sino estrictamente racional. El aspecto negativo de esta práctica social y esta cultura política es que no son cuestionadas abiertamente, sino que son compartidas y vividas por actores que son importantes portadores de reformas (Burchardt, 2017).

La desigualdad social ha sido hasta ahora irrelevante, y más bien un problema ético, pero mañana puede convertirse en un polvorín. La reducción de la desigualdad se convierte entonces en un factor limitador que genera daños funcionales para la economía y la sociedad y, por lo tanto, adquiere una nueva racionalidad y cualidad atractiva para muchos de los que hasta ahora la habían ignorado o incluso habían sacado provecho de ella (Burchardt, 2017).

Ahora bien, debemos analizar el planteamiento de los diferentes modelos socioeconómicos que se desarrollan en América latina y que influyen proporcionalmente en el desarrollo de las diferentes políticas que planteas estrategias de apoyo al sector de las pymes:

Una de las características que definen a las pymes latinoamericanas es su extrema heterogeneidad, desde algunas que responden a necesidades de autoempleo y supervivencia, a otras capaces de aprovechar oportunidades de mercado con una gestión eficiente e innovadora.

Esta heterogeneidad condiciona el diseño de las políticas dirigidas hacia estas empresas. La diversidad empresarial englobada bajo el concepto de pymes desaconseja el diseño de una “receta común” para este tipo de agentes. Además de tener un potencial diferente de crecimiento de la productividad y el empleo, las pymes de diversos tipos comúnmente enfrentan restricciones distintas. Mientras que en algunos casos estas barreras corresponden mayoritariamente a limitaciones internas de las empresas (baja capacidad del propio empresario, por ejemplo), en otros casos derivan de un entorno externo desfavorable, a nivel del sector de actividad, de la cadena productiva, del cluster o incluso macroeconómico (OCDE, 2013).

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