Y Esa Feria Qué? Digamos NO! A Los Niños Toreros

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA DEFENSA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL POLITÉCNICA

DE LA FUERZA ARMADA BOLIVARIANA

GERENCIA AMBIENTAL. NÚCLEO TÁCHIRA

COSTOS AMBIENTALES ASOCIADOS A LA INADECUADA DISPOSICIÓN DE LOS DESECHOS SÓLIDOS DOMÉSTICOS EN LA COMUNIDAD DE LOMAS BLANCAS, MUNICIPIO CÁRDENAS, ESTADO TÁCHIRA

(ENSAYO)

- Versión 1 -

ELABORADO POR:

Ing. Dora Josefina Izaguirre Vásquez

C. I. V.- 4.885.558

San Cristóbal, Enero de 2012

COSTOS AMBIENTALES ASOCIADOS A LA INADECUADA DISPOSICIÓN DE LOS DESECHOS SÓLIDOS DOMÉSTICOS EN LA COMUNIDAD DE LOMAS BLANCAS, MUNICIPIO CÁRDENAS, ESTADO TÁCHIRA

(ENSAYO)

- Versión 1 -

A nivel mundial, el acuerdo general en materia ambiental es que el principal problema es el Cambio climático. Este problema tiene la particularidad que a diferencia de otros problemas ambientales – afecta a todos los ciudadanos del planeta, aun cuando su incidencia sea mayor sobre los ciudadanos de los países pobres o en vías de desarrollo que sobre los países desarrollados.

En Venezuela, aun cuando se reconocen diversos problemas ambientales, existe un destacado consenso en que es la “basura” el principal de ellos, ya que tiene una incidencia directa o indirecta en la población de comunidades rurales o urbanas, de cualquier estrato socio económico y es posiblemente el que más “se cruza” con la realidad de la mayoría de los venezolanos.

El Cambio climático y los desechos sólidos están vinculados a la descomposición de la basura que genera gas metano, uno de los llamados gases de efecto invernadero. Por tanto la gestión de residuos sólidos a nivel municipal, es una actividad que debe atender dos problemas muy importantes, educar para producir menos desechos desde los hogares y los llamados lugares de origen y la disposición final, luego de los procesos de selección, recuperación, y reciclaje, es en este momento donde se presenta el elemento cultural que y los costos de asumir el componente educativo como bandera en el tema de los desechos sólidos.

Se observa de manera alarmante que en los últimos 30 años, la producción de desechos per cápita en América Latina ha aumentado de 0,2 – 0,5 kg/día a 0,5 –1,00 kg día, en la actualidad; alarmante por cuanto se debe considerar que actualmente existen millones de habitantes en esta zona lo que da un valor inimaginable de toneladas de desechos que tienen un destino productivo vulnerable.

En nuestro país cada ciudadano produce entre 0,8 y 1,2 kilogramos de basura, y así cada día generamos, unas 20 toneladas de basura que deben ser recolectadas, y transportadas hasta sitios de disposición final o incorporadas a

procesos de reutilización o reciclaje, no es una cifra despreciable.

Los valores da calidad en relación con la gestión de desechos sólidos en América Latina y el Caribe varía de una región a otra, aunque por lo general son deficientes. La cantidad de desechos por persona ha venido aumentando constantemente mientras que la calidad de esos desechos se ha ido reduciendo

Así, en función del compromiso con el ambiente y la calidad de vida, la atención de los residuos sólidos y a través de este, el cambio climático, resulta un tema ambiental fundamental para el país, las empresas, los ciudadanos y los distintos niveles de gobierno

Mientras, la composición de los desechos producidos tanto por los hogares como por las empresas ha pasado de ser casi totalmente biodegradables a un grado de biodegradabilidad mucho menor, con cantidades crecientes de plásticos, aluminio, papel, cartón, cajas de empaques y materiales peligrosos.

Este parámetro está vinculado a una política mundial de la empresas de aumentar sus ganancias a costa de la depredación del ambiente fabricando y estimulando mediante campañas mediáticas finamente diseñadas para seguir odas que cambian casi que a diario. Se ha perdido la costumbre de reparar, reconstruir, transformar, y aun peor no deseamos heredar los “cachivaches” de las y los abuelos. Se nos “enseña“ a cambiar la casa y el carro cada año, la ropa todos los meses o cada quincena, y hasta nuestros hábitos alimenticios atentan contra la calidad ambiental

Podría suponerse que el aumento en la cantidad de desechos per cápita y la composición de los mismos tienden a correlacionarse con los crecientes niveles de ingreso y con factores del deterioro o ausencia de una consciencia histórico-socio-cultural (n.a.).

Por consiguiente, la disposición de desechos es un problema creciente asociado con los mayores niveles de prosperidad económica. (Equipo PNUMA-GEO) y se añade menos ética y consciencia ambientales, (n.a).

Así también, la acelerada expansión de las poblaciones urbanas y el consiguiente desarrollo urbanístico no planificado hacen que el incremento de la generación de desechos sea mucho más rápido que la capacidad de recolectarlos y eliminarlos, lo que resulta en grandes grupos de población sub atendidos o desatendidos en este aspecto. Algunas ciudades grandes como Brasilia, Medellín, Caracas, y La Paz, se precian de contar con niveles muy altos de servicios de recolección de desechos sólidos (~90%), aunque no está muy claro si estas cifras incluyen la recolección en asentamientos de invasión. Otras ciudades como Santiago, atienden una fracción mucho menor de sus poblaciones (57%), y la mayoría de las ciudades y pueblos pequeños tienen una tasa de éxito aún menor.

Si se considera que sólo un pequeño porcentaje de los desechos se deposita en rellenos sanitarios, por cuanto la mayoría se lleva a botaderos abiertos o a rellenos sanitarios semicontrolados, no recubiertos, sin protección de aguas freáticas, recuperación de lixiviados, ni sistemas de tratamiento. Por ejemplo, un estudio realizado en México reveló que sólo 11 de los 97 vertederos controlados para el depósito final de los desechos cuenta con equipo e instrumentación adecuados que permitan considerarlos verdaderos rellenos sanitarios. La separación y tratamiento de los desechos orgánicos es una modalidad prácticamente inexistente.

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