Ética, sociedad y profesión. Søren Kierkegaard

Ética, sociedad y profesión.

Søren Kierkegaard

1. ¿Cuál fue tu formación? ¿Cuál fue el contexto de tu pensamiento filosófico? ¿Qué te inspiró? ¿Aceptación o rechazo?

Curse mis primeros estudios en la escuela pública “Escuela de virtud cívica”, donde siempre me vi destacado en latín e historia. Continúe mis estudios En la Universidad de Copenhague donde al principio me vi inclinado hacia la teología, pero estando allí me incline más hacia la filosofía y la literatura, no reemprendí mis estudios teológicos hasta la muerte de mi padre en 1838, fue entonces también cuando volví a practicar el protestantismo luterano cual había abandonado un poco durante mi estadía en la universidad. Me gradué en 1841 con un Magistri Artium (que hoy en día corresponde a un doctorado en filosofía PhD).

Mi pensamiento se mueve a partir de mi inconformidad frente al cristianismo oficial. Todo mi pensamiento es una reacción contra el idealismo y la religiosidad formalista de la Iglesia oficial danesa y su teología fuertemente dominada por el hegelianismo. Kierkegaard lo hace en nombre del valor del individuo y de una fe personal y trágica.

Dentro de las cosas que me inspiraron podemos hablar de mi padre, Regina Oslen y mi choque con la prensa.

Por darle gusto a mi padre siempre mantuve los primeros puestos en mi clase, pero la educación que él me transmitió fue más allá de la cultural pues él me inculco la imaginación, la dialéctica y la religión.  Mi amada Regina Oslen me influyó para que me dedicara a la literatura y por último el rechazo de la gente me orillo para que reflexionara sobre los problemas de la existencia individual.

1. ¿Cómo fuiste como persona?  ¿Relación con tu familia? ¿Cómo viviste? ¿Qué te llevo a la filosofía? ¿Anécdotas? frases, aforismos.

Siempre fui visto como un niño raro ya que nací jorobado y con una pierna más larga que la otra. Esto afecto en mi personalidad y mi trato con la gente, pero a su vez fue lo que hizo que me interesara en los problemas reales de los hombres reales. Ya de grande me distinguía por la brillantes de mi ironía y por mi sentí del humor.

Fui el séptimo hijo de 7 de la segunda familia de Michael Pedersen Kierkegaard, con el cual tuve el mayor vínculo emocional, sin embargo tuve problemas con el al enterarme que había tenido un vínculo con mi madre antes de enviudar, me causaba conflicto dado que mi padre era el mayor ejemplo de la religiosidad. Todos estos problemas los resolvimos antes de que el muriera.

Mi padre embarazo a mi madre antes de contraer nupcias, lo cual hizo me sintiera hijo del pecado. Siempre me sentí temeroso del pecado debido a las ideas religiosas inculcadas por mi padre.

Antes de la muerte de mi padre conocí a Regina Oslen quien tenía solo 14 años y de la cual         me enamore, por lo cual espere a que tuviera 16, edad que me permitía socialmente acercarme a ella y le pedí que se casara conmigo, a lo cual ella acepto. Desafortunadamente sentí que no podía seguir con el compromiso y lo rompí. Sin embargo siempre la ame.

Mi interés filosófico y religioso nació a partir de mi influencia paterna. Mi padre y sus amigos tenían la costumbre de mantener discusiones en base a la filosofía tales yo escuchaba desde niño. Por lo cual desarrolle un gusto por la filosofía.

1. ¿Cuáles son los aspectos, ideas, valores e ideología más relevantes de tu pensamiento filosófico? Relación con el ser humano, la sociedad, Dios. ¿Influencia de otros filósofos?

La idea más relevante de mi pensamiento filosófico es el individuo y los estadios, cuales son el estadio estético, ético y religioso. Los cuales son formas de vida. Los cuales explico como:

• El esteta sería aquel individuo que, angustiado ante la imposibilidad de determinar por sí mismo la buena dirección de su propia vida, suspendiese las decisiones para evitar equivocarse: nada es preferible excepto si produce placer. Por eso, el esteta acabará dedicando toda su vida a encontrar la fórmula en que haya quedado absolutamente desterrada la angustia. Esta figura encuentra su mejor ejemplo en Diario de un seductor, donde el goce de la vida como momentos aislados de placer es lo único que guía al protagonista.
• El hombre ético, en cambio, confía en que, al contrario, su razón le proporcione los elementos necesarios y suficientes para evaluar en cada momento la oportunidad de sus actos y, con ello, guiar rectamente el curso de su vida; sin embargo, y en abierta oposición a Hegel, para mi esta figura queda atrapada en el espacio mediocre y alienante de lo público, el concepto compartido, nivelador, en el que desaparece el individuo.
• El religioso albergará en sí mismo la tensión entre los dos estadios anteriores; sentirá la dificultad para actuar, pero a la desesperación opondrá no su razón, sino la pasión que el esteta derrochaba en las gestas amorosas, empleada ahora en sentir hasta el final su temor a equivocarse, mientras no puede por menos que actuar. Instalado en el absurdo de la existencia y en la angustia radical de la aspiración a la eternidad, el religioso afirma únicamente su fe, y a través de ella su propia y radical singularidad.

El filósofo que más me marco fue Hegel dado que tenía gran presencia en mi sociedad y con el cual mi pensamiento chocaba ya que  yo realice una filosofía existencialista, que la considero como una expresión de la vida individual examinada con intensidad y no como la construcción de un sistema monolítico a la manera del filósofo Friedrich Hegel.

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