ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Meninges


Enviado por   •  28 de Septiembre de 2015  •  Informes  •  4.425 Palabras (18 Páginas)  •  127 Visitas

Página 1 de 18

COMUNICACIÓN  Y PROFESIONALISMO

OBSTETRICIA 2014

[pic 1] Somos Observadores del Mundo

 

Somos observadores según las experiencias que hemos tenido y tenemos. Cuando conocemos algo; ya sea lo que llamamos realidad, o alguno de los hechos de esta realidad, la podemos reconocer, pues, pasa  a formar parte de nuestras imágenes guardadas en el cerebro. Ya contamos con esa imagen para que cada vez que estemos frente a esa misma realidad o parecida sepamos  de que se trata y podamos responder a ella.

Lo interesante de esto es que además, todos los seres humanos somos distintos observadores, porque cada uno de nosotros ha tenido distintas experiencias de vida, ha visto también diferentes cosas, ha tenido una formación absolutamente única.

Por ejemplo hagamos el siguiente ejercicio: cierra los ojos e imagínate un cerro. ¿Cómo es tu cerro?   Lo más probable que tu cerro sea totalmente  diferente al que imaginó otro. Todos describiremos algo diferente, algunos diremos que alto, otros dirán que  nevado, otros pequeño, que está lleno de vegetación o que está seco, etc.  ¿Podemos decir que quienes vieron un cerro alto estaban en lo correcto, que quienes vieron un cerro lleno de vegetación mentían frente a quienes vieron sólo un cerro seco?

Pensamos que podemos aceptar que esta persona observa distinto, y que cada uno de nosotros, entonces observa distinto.

A la luz de este aprendizaje nos podemos preguntar ¿Tiene sentido escuchar la opinión de otros cuando se trata de realizar un trabajo colectivo?  En nuestras organizaciones con frecuencia nos enfrascamos en largas discusiones sobre cómo son las cosas…cada uno cree tener la verdad.

Lo mágico de esto, es que a medida que escuchamos a otros en su observación de las cosas, ampliamos también nuestro mundo de posibilidades, es decir, con lo que observo hoy del mundo, con lo que conozco de él, tengo también una cantidad de acciones que se me ocurre hacer: cómo enfrentar un problema, cómo responder una necesidad, etc.

Pero cuando además de lo que yo veo, puedo escuchar y observar qué ven los otros, enriquezco mis posibilidades de actuar.

Estamos iniciando un aprendizaje que nos permita abrir nuestra mirada al mundo, modificando el OBSERVADOR que somos.

Si trabajamos sobre el cambio del observador que somos, estamos también expandiendo nuestras acciones, estamos por así decirlo, ampliando nuestra visión del mundo, nos aparecen entonces nuevas posibilidades,  nuevas acciones que antes eran imposibles para nosotros.

Observa este dibujo:

Este es el observador que  hoy soy:


[pic 10][pic 2][pic 3][pic 4][pic 5][pic 6][pic 7][pic 8][pic 9]

Este es el Observador que puedo llegar  a ser, al aprender, aceptar y escuchar a otros:

[pic 12][pic 11][pic 13][pic 14][pic 15][pic 16]

De los ejercicios que hicimos en este taller, sacamos varias conclusiones:

  • Aunque estemos frente a una imagen, escena o paisaje cada uno recoge algo distinto, observa aspectos diferentes. Cada uno es un observador distinto.
  • Como observadores distintos, no sabemos cómo son las cosas, sólo sabemos cómo las observamos. Vivimos en “mundos interpretativos”.
  • Cada uno de nosotros es un observador legítimo y distinto.
  • Al ampliar nuestra visión aparecen nuevas posibilidades para actuar que antes no estaban disponibles.
  • Nuestra propuesta es invitarlos a mirar más allá de las acciones y revisar cómo estamos observando las situaciones.

Así, podemos señalar:

  • Somos seres que habitamos en el lenguaje: El lenguaje es clave para comprender al hombre. Además, reconocemos otros dos dominios, el cuerpo y las emociones.
  • El lenguaje genera mundo. No solo hablamos sobre las cosas sino que también hablamos para que las cosas sucedan.
  • Los seres humanos se crean a sí mismo en el lenguaje y a través de él. O sea, el ser humano es un espacio de posibilidades de creación.

[pic 17]


.[pic 20]Aprendiendo a aprender

Desde nuestros primeros días de vida, aprendemos sin que nadie nos diga cómo hacerlo: a caminar, a hablar, a vestirnos… Y seguimos aprendiendo por el resto de nuestra vida.

Un problema frecuente que se produce es que no nos fijamos en cómo aprendemos. Y muchas veces ocurre que hay cosas que nos resistimos aprender y nos declaramos “negados” para esto o lo otro. O bien aprendemos algo de mala manera y no lo corregimos nunca porque decimos “ así soy yo”, “ así lo aprendí yo” o “ ya estoy viejo vieja para aprender algo nuevo”.

Pero la verdad es que aprender a aprender  es algo importantísimo si queremos manejar nuestras condiciones de vida y nuestro futuro. Aprender es un don que todos poseemos y podemos utilizar cuando nos los proponemos.

¿Cuán buenos somos para aprender?

En un mundo como el de hoy día donde todo cambia es bueno hacerse esta pregunta. Y no sólo pensando en uno mismo sino en cómo aprendemos juntos en nuestras Organizaciones.

Cada uno de nosotros se ha formado de pequeño con ideas de lo que uno puede o no aprender, ideas que muchas veces se vuelven malas mañas, de acuerdo a si se es mujer u hombre, campesino o persona de ciudad, si se es rico o pobre. Muchas mañas, todas aprendidas y varias de ellas que se han convertido en un puente cortado para seguir aprendiendo.

Toda persona y toda comunidad, ciudad, pueblo o nación, se cría con, lo que llamaremos “enemigos para aprender”, enemigos que son tremendamente poderosos y además invisibles, porque no nos damos cuenta que viven con nosotros.

Hemos visto a muchos estudiantes en nuestros cursos, experimentar un aumento de su capacidad de aprender y mucha alegría por seguir aprendiendo. Alegría que viene como resultado de reconocer los propios enemigos y vencerlos. Estos estudiantes anteriores a ustedes, aprendieron con esfuerzo  a hacerse nuevas preguntas, a ver otros caminos, y así lograron tener mejores resultados en sus acciones, lo que los hizo sentir más felices.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (28.2 Kb)   pdf (273.8 Kb)   docx (1.1 Mb)  
Leer 17 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com