Sostenibilidad y ecología política

SOSTENIBILIDAD Y ECOLOGÍA POLÍTICA

“La  ecología  política  llegó

para quedarse.”  

Entrevista a Víctor M. Toledo 

• Instituto  de  Ciencia  y  Tecnología  Ambientales,  Universidad  Autónoma  de

Introducción

En la entrevista realizada a Víctor Toledo podemos apreciar que nos habla de momentos importantes en la historia, que se convirtieron en factores determinantes para la ecología política. Como platica, él, sin saberlo a conciencia, empezó a hacer ecología política en nuestro país a desde el año de 1992, cuando tuvo diversas participaciones en temas relacionados, por medio de debates televisados, o en la publicación de información relevante; en el ya muy conocido movimiento zapatista y en diversos movimientos campesinos. Es así, que lo que en inicios era llamado ecología  humana,  en  realidad  era lo que conocemos como etnoecología, y era también ecología política.

Desarrollo

La  modernidad  alternativa surge  como  una opción  a  la crisis  de civilización. Esta crisis tiene su nacimiento en las culturas tradicionales, que a pesar de que están conectadas con la modernidad, mantienen una resistencia hacia ella y cuentan con las respuestas necesarias para ayudarnos a remontar las crisis del mundo moderno. En América Latina, las comunidades indígenas son parte importante de lo que nos caracteriza, pues contamos con comunidades  que tienen miles de años reproduciéndose a través de su cultura muy particular y sus relaciones con el entorno natural desde el respeto y la coexistencia con la naturaleza.

Es importante mencionar, que al proponer que la salida a la crisis del mundo  moderno  sea por medio del rescate  de  valores  y  las cosmovisiones de las culturas tradicionales, es decir, las indígenas y rurales; no se propone regresar al pasado en un sentido idealista, sino por medio de la busqueda de lazos entre las partes constructivas del mundo moderno con los valores, principios y prácticas que provienen del mundo premoderno. Esto se torna necesario, para que en un futuro no muy lejano podamos oservar como va cambiando la mentalidad donde para generar todo lo innovador sea necesario ir destruyendo lo existente, que es el punto en el que desafortunadamente nos encontramos en el presente en su mayoría. El mayor error de la modernidad industrial, capitalista y consumista es querer construir a partir de lo poco que queda, solamente por tradición, porque es la unica forma que conocemos, la mas “viable”; sin darse cuenta de que el mundo ya no está capacitado para seguir resistiendo este modelo, y que las afectaciones que sufra la naturaleza, las sufriremos junto con ella.

En la busqueda de este cambio de mentalidad, el movimiento  ambientalista  ha tenido un lento pero constante avance hacia la emergencia, hacia la expansión y la proliferación impresionante  de  los movimientos rurales. Existen en México y en América Latina, muchos grupos de resistencia socioambiental luchando contra grandes proyectos depredadores. Estos grupos han logrado expresarse en  distintas  formas  y  regiones, han resistido y generado proyectos alternativos exitosos a nivel  regional,  a  escala  municipal  o  a  escala  de  las  comunidades; han logrado mantenerse y extenderse con firmeza.  Los  actores  y  los  movimientos  ambientalistas  urbanos  están combinándose  e  integrándose  a  estos  nuevos  movimientos.  Asimismo,  el papel  de  los  practicantes  de  las  nuevas  disciplinas  como agroecología,  historia ambiental,  economía  ecológica  y  ecología  política;  y  la  aparición  de sociedades científicas a nivel regional han sido muy importantes para sus logros y posicionamiento.

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