La Realidad

Juan llano

Johnson, Christopher

Español 135

10 de junio del 2013

La Realidad, la burla, y los sueños

Muchas veces nos vemos en la situación que no sabemos si lo que estamos viviendo sea algo real o verdadero, o por lo contrario sea algo imaginado o no cierto . Nos preguntamos cuando comienza la realidad y lo irreal. También, en que momento nuestra imaginación se convierte en nuestra realidad. En mi ensayo expondré como la idea de lo cierto vs lo imaginado o creído es central en la elaboración de la realidad de los personajes en El burlador de Sevilla y La vida es sueño. Desarrollaré la manera en la cual esta idea es presentada, en la forma de burlas y engaños en El burlador, y en forma de sueños en La vida es sueño. Pasare a mostrar como se presenta la idea del engaño en cada una de las trazas y en que momento se enfrentan con la verdad los personajes. En El burlador de Sevilla, Don Juan es el perpetuador del engaño, y no es hasta el final que se convierte en la victima de una burla que termina con su muerte. Por lo contrario, en la traza de La vida es sueño, el personaje de Segismundo se ve en un proceso gradual de descubrir que lo que el había vivido era una ilusión, y llega el punto que no sabe si su actualidad es real o irreal.

Don Juan es la representación carnal del engaño y la burla, lo cual llena de ínfulas de hombre intocable y lo hace vivir en un mundo en el cual el se cree inmortal. Un mundo que solo es creado en su mente y ignora la realidad. Y este mundo eventualmente se convierte en su realidad. Esto lo lleva a desafiar a su destino y hasta la misma muerte. Cada una de las burlas sin castigo elaborada por Don Juan son una representación de su enfrentamiento con la realidad opuesta a la que el vivía, que no le traería castigo hasta el final. El hecho de que todas sus burlas pasaban sin castigo alimentaban el ego de Don Juan,, un ego que se ve reflejado en su distintiva frase “que tan largo me lo fías”. Esta exclamación refleja un Don Juan que se cree imparable y al cual nada ni nadie podrá derrumbar. Y este ego es el que no le permite ver las señales y oportunidades de poder arrepentirse a lo largo de la trama. La primera advertencia se la da Catalinon antes de la burla de Tisbea, este le dice , “Los que fingís y engañáis las mujeres de esa suerte, lo pagareis en la muerte”[901-903] a esto responde Don Juan “ que largo me fiais”[904]. Don Juan pasa por alto la advertencia de Catalinon, diciendo que el no tiene muerte a cual temer. Lo cual demuestra que el esta lleno de soberbia y no le permite ver la realidad de sus actos. Lo siega a ver que tarde o temprano sus actos podría traer serias repercusiones. La segunda advertencia nuevamente desacatada por Don Juan viene de Tisbea quien le dice “ esa voluntad te obligue/y si no, Dios te castigue” [958-959]. Y nuevamente Don Juan responde con su frase estelar, demostrando otra ves su prepotencia. Una prepotencia que alude a que Don Juan vive en una burla el mismo, pensando que lo que el hace no tiene consecuencia.

A la medida que su prepotencia escala también pierde la noción de que lo que se hace se paga. En el ultimo acto cuando se encuentran Catalinon y Don Juan cerca la tumba de Don Gonzalo Don Juan dice

“Aquí aguarda el señor/ el mas leal caballero/ la venganza de un traidor”/ Del mote reírme quiero. /Y ¿habeisos vos de vengar,/ buen viejo, barbas de piedra?[2299-2304].

Don Juan explícitamente se burla de la tumba de Don Gonzalo, y con tono desafiante le dice que como se va a vengar de el en la muerte. Esto es nuevamente un desafío a la muerte, que significa que Don Juan es el único que puede tomar actos sin consecuencia, que la muerte a el no lo persigue. Y lleva la burla a la tumba de Don Gonzalo a un extremo mayor al decir

Aquesta noche a cenar /os guardo en mi posada./Allí el desafío haremos,/si la venganza os agrada;/ aunque mal reñir podremos,/si es de piedra vuestra espada. [2307-2312]

Aquí Don Juan con un cierto sarcasmo invita a Don Gonzalo a cenar para poder venganza, pero le dice que va hacer difícil si el ya no vive.

​El desafío al destino y a los muertos se convierte en su clavario, cuando lo que Don Juan pensaba imposible se vuelve realidad. Don Gonzalo cumple la cita que Don Juan con burla le hizo en frente de su tumba. Luego al irse Don Gonzalo después de hacerle la misma invitación a Don Juan, este dice explicando su reacción

Cuando me tomo la mano/ de suerte me la abrasó,/ que un infierno parecía/ más que no vital calor./ Pero todas son ideas/ que da la imaginación/ el temor; y temer muertos/ es mas villano temor.[2523-2530]

Para Don Juan lo que el acaba de presenciar no es cierto es un simple producto de su imaginación, demostrando la idea central de la trama de lo real vs lo irreal. Lo cual no le permite darse cuenta que su hora de pagar esta pronta a llegar. Pero el ignora esto, y se ve con cuando dice que al muerto no se le teme porque muerto esta. Por eso no duda en aceptar la invitación de Don Gonzalo a cenar, porque el esta muerto y lo que ve no puede ser real. Lo que no se imagina es que el va rumbo a enfrentar su realidad. Una realidad que su arrogancia no le permitía ver, y ahora por medios sobre naturales, y no posibles en un mundo real el seria burlado y castigado. Mientras este cena con Don Gonzalo los músicos que aparecen entonan unas líneas claves que dicen

Adviertan los que de Dios/ juzgan los castigos tarde/que no hay plazo que no llegue,/ni deuda que no se pague.{2783-2786]

Los músicos están anticipándole a Don Juan lo que el por tanto tiempo había ignorado. Ellos están diciendo, que los que anden por la vida pensando que los castigos de dios llegan tarde o no ocurren, que se atengan por que nada se hace sin consecuencia. Y por ende, esto demuestra como el enfrentamiento con la realidad le llega solo hasta el ultimo momento. Y este es el claro caso de Don Juan, a Don Juan le a llegado su hora y vemos su enfrentamiento con la realidad cuando Don Gonzalo le dice que dios quiere que page sus culpas por medio de el y

“así pagas de esta suerte/ las Doncellas que burlaste/ Ésta es justica de Dios:/”quien tal hace, que tal pague.[2808-2811]

Don Juan pagaría sus pecados a manos de el que el menos esperaba, un muerto a quien el creía incapaz de hacerle daño. También se volvería cierto tanto la advertencia de Tisbea como la de Catalinon. Estas fueron advertencias, que por vivir en un mundo creado, imaginado por el mismo, en el

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