Ensayo basado en El Discurso Fúnebre de Pericles

En este trabajo abordaremos el discurso fúnebre de Pericles, en el nos enseña las virtudes, principios, y valores de los ciudadanos atenienses, el gran ejemplo que es esta ciudad para otras y el orgullo que es morir defendiendo a su gran ciudad.

En Atenas en honor a los muertos que dejó el primer año de la guerra del Peloponeso contra los espartanos, se hizo un discurso fúnebre en honor a los atenienses caídos en batalla, en el cual fue elegido para hablar Pericles político y orador (Rodríguez, 1987). Este discurso fue pronunciado el año 431 A.C. en el Cementerio del Cerámico, en Atenas (Rodríguez, 1987).

Si bien es un discurso para los muertos en batalla, lo que más se aprecia en el discurso es el amor y orgullo de Pericles sobre Atenas, su democracia, su cultura, la forma de ser de todos sus ciudadanos, la libertad, Gobierno y economía que poseen. Él considera que Atenas es un ejemplo para otras ciudades, es digna de admiración, es la gran maestra de Grecia, que los demás imitan y envidian (Rodríguez,1987). Por esto para Pericles la muerte defendiendo el poderío de Atenas, era un honor, pues defiende al imperio que sus antepasados y al que ellos mismo han engrandecido, pasando así a la alabanza inmortal y a la más gloriosa tumba (Rodríguez, 1987).

Su gobierno era la Democracia, ellos lo originaron, es un gobierno que depende de un número mayor de personas, a lo que se había visto habitualmente en otras ciudades, en donde todos los ciudadanos están en igualdad de derecho, el mérito del ateniense es más importante que su clase social, cualquiera podía aportar beneficios a la ciudad, se rigen libremente en los negocios públicos y en la vida diaria, no criticaban al que obraba según sus gustos, no se metían en las relaciones privadas, no infringen la ley en asuntos públicos, obedecen las magistraturas y las leyes, sobre todo las que están legisladas en beneficio de los que sufren injusticia, se preocupan del espíritu a través de juegos, sacrificios anuales entre otros (Rodríguez, 1987).

En la guerra a diferencia de sus enemigos, dejan entrar a cualquier persona a la ciudad, a menos que se tratara de alguna cosa secreta, que el enemigo pudiera obtener ventaja. No preparaban a guerreros como en Esparta, a pesar de esto los atenienses no temían ir a la guerra por su audacia. “a pesar de todo, si queremos correr peligro con tranquilidad de espíritu y no con el ejercicio de trabajos penosos, y no con leyes, sino con costumbres de valentía [...], que Cuando vamos a su encuentro nos encontramos no inferiores en audacia a los que viven continuamente con dureza” (Rodríguez, 1987).

Aprecian más la sabiduría y el conocimiento, que las riqueza, esta no estaba prohibida a diferencia de Esparta, la riqueza era una oportunidad de realizar algo y no para alardear. “Pues amamos la belleza con poco gasto y la sabiduría sin relajación; y utilizamos

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