Historia del condicionamiento clásico

H I S T O R I A    D E L                                                                   C O N D I C I O N A M I E N T O    C L Á S I C O

De acuerdo con Froufe (2011), durante finales del siglo XIX las ideas sobre el funcionamiento de las asociaciones eran producto de la especulación y la reflexión filosófica con el propósito de explicar la adquisición del conocimiento y el funcionamiento de la mente humana. Fue a principios del siglo XX cuando Ivan Petrovich Pavlov en Europa inició una investigación acerca del desarrollo de asociaciones entre estímulos contiguos y Edward Lee Thorndike en América acerca conductas y estímulos contiguos (asociaciones y consecuencias).

Estos planteamientos fueron de mucha ayuda para el progresivo abandono del mentalismo que caracterizaba el asociacionismo filosófico para centrarse en un punto más objetivo en el análisis del control de la conducta por una serie de principios asociativos desarrollados a través de la experiencia.

Según Chance (2001), Pavlov llegó a un punto decisivo en su carrera, ¿continuar con su trabajo actual o acometer un problema nuevo que podría no llevarlo a nada y que podía ser considerado como inadecuado para un científico respetable? Había pasado algunos años investigando sobre el funcionamiento del sistema digestivo de los perros, que le haría acreedor del Premio Nobel en 1904. una de las metas era comprender la manera en que el cuerpo descompone los alimentos en compuestos químicos, el conducto salival del animal se desprendía de su lugar habitual dentro del hocico y se encauzaba a través de una incisión en la mejilla, cuando el perro salivaba, la saliva fluía a través del conducto y se recolectaba en un pequeño tubo de cristal, así Pavlov podía realizar observaciones precisas de las acciones de las glándulas bajo diversas condiciones. Observó que la salivación y demás secreciones gástricas constituyen respuestas reflejas innatas que se desencadenan automáticamente por el contacto de los alimentos a las papilas gustativas, sin embargo, notó un fenómeno extraño cuando los perros eran sometidos a varias sesiones de estudio en las que cada ve se les daba una ración de comida, llegaba un momento en que comenzaban a salivar al ver u oír al experimentador aproximarse al laboratorio, bastante antes de empezar a ingerir la comida, la explicación que Pavlov supuso era que en esas condiciones se forma una conexión nerviosa nueva entre los centros activados por la percepción del experimentador y la degustación de la comida (Froufe, 2011).

Pavlov concluyó que existen dos tipos de diferentes reflejos: El reflejo innato que no es aprendido al que denominó incondicional y el reflejo que debe adquirirse a través de la experiencia al que denominó condicional.

Un reflejo incondicional consistía de un estímulo incondicional y de la respuesta que evoca, la respuesta incondicional. Un reflejo condicional consiste de un estímulo condicional y de la respuesta que evoca de manera confiable, la respuesta condicional.

Posteriormente Pavlov apareaba la comida con el sonido de un metrónomo, al principio no tenía ningún efecto, pero después de que se había asociado de forma repetida, el sonido comenzó a producir el reflejo de la salivación. Encontró que casi cualquier estimulo podía volverse condicional si se le apareaba de manera regular con uno incondicional.

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