La Esencia.

P S E U D O M A T I S M O S

R A F A E L  L O Z A N O  H E M M E R

Desde el principio del recorrido, a Ernesto le pareció una obra totalmente fuera de los común, inicia la exposición en medio de una sala, una obra donde unos tubos de plástico y bolsas de papel son los protagonistas que simulan la respiración dando al el espectador la sensación de que éstas funcionaran como pulmones  los cuales respiraban por si solos, quizá a primera vista Ernesto no percibió que estas se movían, pero en el momento donde queda totalmente de frente encarando a este juego de tuberías alborotado que están sostenidas por ligeros hilos transparentes, es el sonido lo que hace reaccionar, seguido de la visión que percibe que estás se van desinflando e inflado, exhalaciones, y respiraciones, lo que causa esta sensación es el tiempo como continua y delicadamente llena estas bolsas de papel Kraft color café, se toma unos minutos para entender la obra y tratar de interpretar lo que el autor trata de representar, lo cual parece que es interesante la obra ya que posteriormente, una cámara de vidrio te hace interactuar con la exposición. Señalamiento de advertencia y modos de usos fueron lo que hizo a Ernesto no querer entrar a la cámara de vidrio, ya que éste explicaba y era el propósito de la obra, que pudieras respirar el aire reciclado que ya otras personas habían respirado. A Ernesto le gusto inmensamente cómo la tecnología y el arte se combinan, se integran, juegan para dar una experiencia que te involucra como parte de la exposición, como diciendo “Ernesto sóplame, mírame, muévete, escúchame”.
Ernesto nos platica que la obra que más le gustó fue “La habitación del pulso” ya que desde antes de entrar a la habitación, se ve a lo lejos un sencillo foco que cuelga a un cuarto del pasillo y lo único que hace es parpadear hasta apagarse, la habitación es consumida por la obscuridad, no existe un principio ni un final en el campo visual, en eso al final del pasillo se ilumina con cierto patrón, Ernesto queda totalmente entorpecido ya que lo único que se escucha es el sonido de la luz que tiene un ritmo peculiar, fue totalmente sorprendente ya que la experiencia que se vivió por primera vez fue única, todo pasa en menos de 20 segundos, su cerebro reacciona, las luces se iluminan, logra ver el entorno, descarta las posibilidades de un peligro, el ruido ensordece el ambiente, vuelve a quedar en oscuridad total la habitación… y después de todo eso logra escuchar los latidos que generan la iluminación, no existe nada a su alrededor, solo un corazón representado por un ritmo de luces.

La experiencia que vivió fue sorprendente, muy enriquecedora y divertida ya que él no creía que el arte y la ciencia se pudieran combinar para darle al usuario una forma diferente de concebir el espacio. Y cómo se vuelve algo entretenido, con el que no nada más es apreciar una obra de arte, tratando de interpretar o de entender lo que el autor quiere transmitir, si no es integrar la exposición, y poder concebirla a través de los distintos sentidos.

M U S E O  F R A N Z  M A Y E R

M E M O R I A S  D E S D E  E L  A I R E

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