La Muerte Ontológica del Hombre a Manos de una Razón practica

La Muerte Ontológica del Hombre a Manos de una Razón practica

Tal como el mono imita lo que el hombre hace, el hombre imita lo que la sociedad hace, buscando en ella lo que en el esta perdido, de tal manera que la vida y su sentido se terminan dando como un falso estereotipo enmarcado en un papel que acredita la sociedad, acabando con la naturaleza contemplativa y sensible del humano, y con ello convirtiéndole en un esclavo de la razón la cual lo a encadenado a la cárcel de la industria y el progreso, sin embargo el problema no solo recae en esto sino que también conlleva una calamidad donde los hombres hemos dejado atrás a nuestro ser sensible por caer en la ideología de que la razón es el único progreso y con ello solo llegamos donde los verdugos de la humanidad, los cuales solo intentan vendernos como maquinas utilitarias que se dejen absorber por una sociedad que nos oculta la esencia de todo en ella misma, tanto que de hecho el individuo ya no se logra entender sin ella y prefiere seguir la ideología del progreso vendiendo su ser sensible por uno razonable, pero con ello termina auto encadenándose a las falsas utilidades y convirtiéndose en un residuo social que solo usan para mantener una estructura vacía.

De tal manera que el hombre encuentra a su primer verdugo en sus afanes por entender las nociones y con ello comprenderse va al contexto, el cual se convierte por excelencia en la cúspide de las ideas y el entendimiento de los entes y en consecuencia de ello el hombre en busca de entendimiento espera de este un camino que lo lleve a la comprensión del ser de las cosas y así llegar a entenderlas propiamente según la utilidad que le da su entorno, sin embargo ahora el contexto se ha corrompido y el hombre que sigue usando aquel método, también se ha corrompido, dejando atrás su ser sensible y llevándose por el marco social donde termina vendiendo a este por la razón, la cual es la única que en este entorno se llega a considerar progreso, pero este progreso no es mas que la ideología social que también convirtió al hombre en una utilidad y que ahora con ello lo ha sepultado en una cárcel en la que el hombre siguiendo los ideales del contexto ha perdido su ser por dejarlo a la materialidad y el deseo que el entiende por felicidad y a la razón que entiende por progreso, llevando a que el ser del hombre se convierta en el ser de otro mas no el ser para sí, evitando el cambio o la proyección a otro ser y con ello convirtiéndonos en máquinas que al igual que ellas nos da un propósito y un número de serie para apuntar al mismo fin . Es por ello que hoy en nuestro contexto hemos convertido a la tecnología en una necesidad y al hombre en el esclavo que trabaja por llegar a esa tecnología, demostrando que ahora el hombre vive en el deseo de los otros al olvidar lo que en verdad quiere por solo mantenerse en lo que la sociedad le ha metido por la fuerza, pues mantiene su vida en el ideal de progreso y de lo utilitario, haciendo de la tecnología una necesidad pues es representante del progreso útil.

Y es aquí donde la razón entra como el segundo verdugo y a su vez como la madre fundadora de este contexto y de estos falsos ideales que venden las cosas a las utilidades y terminan cambiando todo aquello que conocemos como algo que sirve en cuanto la utilidad que me preste, porque ahora la razón nos ha dado el ideal de que el progreso es aquello que nos da una utilidad, eliminando el medio donde se nos guiaba a la utilidad para alcanzar una función y al eliminar dicho medio convirtiendo al ser en la utilidad

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